El programa Colombia Mayor, diseñado para apoyar a los adultos mayores en situación de vulnerabilidad, entra en una nueva fase con novedades que buscan mejorar la calidad de vida de sus beneficiarios. A partir del 20 de septiembre de 2024, comienza el noveno ciclo de pagos, con una inversión superior a los 215.000 millones de pesos. Más de 1.641.336 adultos mayores en todo el país podrán recibir sus pagos hasta el 3 de octubre.
Gustavo Bolívar, director de Prosperidad Social, destacó los avances que el programa logró en lo que va del año, en especial el incremento en el monto de las transferencias para las personas mayores de 80 años. Antes recibían 80.000 pesos, pero debido a una reforma impulsada por el Gobierno del presidente Gustavo Petro, ahora recibirán 225.000 pesos. Esta medida busca reducir las brechas de desigualdad y brindar un alivio económico significativo para quienes más lo necesitan, asegurando que puedan acceder a productos básicos de la canasta familiar.
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Este incremento en el monto del beneficio no es un hecho aislado, sino parte de una estrategia más amplia vinculada a la reforma pensional que se está impulsando. Uno de los pilares de dicha reforma, el Pilar Solidario, está orientado a ampliar el alcance del programa para cubrir a más de 3 millones de adultos mayores.
Bolívar resaltó que este cambio estructural permitirá garantizar un apoyo sostenible y a largo plazo para las personas mayores en situación de vulnerabilidad, quienes durante años estuvieron al margen de sistemas de protección económica sólidos.
En el octavo ciclo, realizado en agosto, más del 96% de los beneficiarios recibieron su pago de manera efectiva a través de SuperGIROS y sus aliados. Aun así, Prosperidad Social continúa trabajando para mejorar la atención, instando a los beneficiarios a mantener actualizados sus datos de contacto para asegurar que la información sobre pagos y montos llegue de manera oportuna.
En este nuevo ciclo, los beneficiarios recibirán un mensaje de texto con la fecha exacta en la que podrán hacer efectivo su pago, además de instrucciones para evitar cualquier contratiempo. La entidad también habilitó líneas de atención tanto en Bogotá como a nivel nacional para resolver dudas o problemas relacionados con el proceso de pago. Quienes deseen más información o tengan alguna duda pueden consultar la página oficial de Prosperidad Social.
Ahora se puede reclamar pagos desde cualquier parte
El senador Alejandro Carlos Chacón Camargo presentó un proyecto de ley que busca facilitar el acceso de los beneficiarios del programa Colombia Mayor, o cualquier iniciativa similar, al subsidio que reciben. La propuesta tiene como objetivo principal que los adultos mayores puedan realizar el cobro de su subsidio en cualquier lugar del país, sin importar el domicilio donde están registrados.
El documento detalla que “los adultos mayores que reciban beneficios del programa ‘Colombia Mayor’, o cualquier programa equivalente, podrán cobrar su subsidio en cualquier lugar del país donde se encuentre, sin importar su domicilio registrado, utilizando los operadores de pago definidos por el Gobierno Nacional”. Esto permitiría una mayor flexibilidad para quienes se encuentren en un municipio diferente al de su registro original.
Además, para evitar procesos engorrosos que puedan dificultar el acceso de los beneficiarios al subsidio, el Departamento para la Prosperidad Social y el Departamento Nacional de Planeación deberán tomar varias medidas. Entre ellas, garantizar que los adultos mayores puedan cobrar su subsidio en cualquier punto del país y que los operadores de pago agilicen los procedimientos para evitar largas filas.
El proyecto también establece que, si el beneficiario no reclama el subsidio en un periodo de un año, los fondos serán reintegrados a la Dirección del Tesoro Nacional. Sin embargo, los beneficiarios tendrán la posibilidad de reclamar la totalidad de los giros pendientes en cualquier momento durante ese año.
Chacón enfatizó en que el proceso actual para el pago de los subsidios es “excluyente y burocrático”, lo que afectó negativamente a muchos adultos mayores, quienes enfrentan dificultades para cobrar sus apoyos económicos, comprometiendo así su dignidad y bienestar.