Capitán del Ejército aseguró que el coronel Publio Hernán Mejía le ordenó falsear informes: “Eran bandidos y tenían que morirse’”

Un capitán retirado dio a conocer detalles sobre las órdenes recibidas para falsificar algunos combates. Además, aseguró que él no había escuchado ni un disparo

Guardar

El coronel (r) Publio Hernán Mejía enfrenta un juicio en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por su presunta responsabilidad en 72 casos de falsos positivos o ejecuciones extrajudiciales en el Batallón de Artillería No. 2 La Popa.

Según el testimonio del capitán (r) Nelson Javier Llanos en medio de una audiencia para el tribunal de paz, Mejía le ordenó falsear informes operacionales para presentar muertos como bajas en combate, cuando en realidad no hubo enfrentamiento alguno.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

El capitán (r) Llanos, en su declaración ante la JEP, expuso la cadena de mando que perpetuó esta práctica. Según Llanos, el coronel Mejía le dio instrucciones precisas para alterar la realidad y presentar muertos como bajas en combate, a pesar de no haber enfrentamientos reales.

Entré en el pasillo que llevaba a la oficina del comandante del batallón y le dije: ‘Mi coronel, me están dando la orden de que diga en el informe operacional que hubo combate, pero anoche yo no disparé, no escuché un solo disparo ni nada’. Recuerdo que él se volteó con su fuerte voz y me dijo: ‘¡Hermano, eran bandidos y tenían que morirse, listo!’”, aseguró.

De acuerdo con algunos testimonios, cuando Mejía llegó al batallón el ambiente cambió - crédito JEP
De acuerdo con algunos testimonios, cuando Mejía llegó al batallón el ambiente cambió - crédito JEP

Quien lo interrogaba le preguntó qué hizo ante eso. Llanos respondió: “Absolutamente nada. Cuando el comandante del batallón le habla a uno en esos términos, uno no puede ni siquiera… vamos a citar palabra”. En el interrogatorio también le preguntaron qué edad tenía en aquel entonces. “En ese momento, 21 años”, aseguró el capitán en retiro.

En su testimonio, Llanos aseguró que él no solo alteró en una oportunidad los informes que se debían presentar. Indicó que se sentía incomodo con el hecho de tener que decir mentiras frente a combates que nunca habían ocurrido. En el Interrogatorio, la Fiscalía l preguntó si él se acordaba puntualmente de los informes a lo que dijo “si claro, porque como le digo tienen mi firma”.

Los falsos positivos constituyen uno de los episodios más oscuros de la historia reciente de Colombia. Estos crímenes implicaron el asesinato de civiles por parte de la fuerza pública, que en su afán de mostrar resultados operacionales, manipuló informes y privó de la vida a personas que no tenían relación con grupos armados.

El caso de el coronel (r) Mejía

Publio Hernán Mejía, coronel retirado del ejército colombiano, enfrenta un juicio adversarial ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por su presunta participación en 72 casos de “falsos positivos” en los departamentos del Cesar y el sur de La Guajira. La Fiscalía de la Unidad de Investigación y Acusación (UIA) ha solicitado una condena de 20 años de prisión para Mejía, argumentando que el coronel “ideó, diseñó y ejecutó a través de un ilegal aparato organizado de poder un plan que consistió en asesinar personas de la población civil y presentarlas como bajas en combate”.

Los “falsos positivos” son crímenes en los que miembros de las fuerzas militares colombianas asesinaron a civiles inocentes y luego presentaron sus cuerpos como bajas en combate. Estos actos ocurrieron durante el conflicto armado interno en Colombia, dejando un rastro de dolor y sufrimiento para las víctimas y sus familias.

Coronel Publio Hernán Mejía, acusado por presunta participación en 72 casos de falsos positivos - crédito Colprensa
Coronel Publio Hernán Mejía, acusado por presunta participación en 72 casos de falsos positivos - crédito Colprensa

El caso de Mejía es emblemático en la búsqueda de justicia y verdad en relación con estos crímenes. La JEP está evaluando las pruebas y testimonios para determinar su responsabilidad. Según la acusación, Mejía habría cometido delitos de homicidio en persona protegida, desaparición forzada y tortura.

La defensa de Mejía niega su responsabilidad en los hechos. Sin embargo, testimonios de otros militares han descrito cómo la llegada de Mejía transformó el ambiente en el batallón y cómo se buscaba consolidar su imagen como un “héroe” en el Ejército.

El juicio en la JEP es un paso significativo en el proceso de justicia transicional en Colombia, que busca esclarecer los crímenes cometidos durante el conflicto armado y ofrecer reparación a las víctimas. La resolución de este caso podría sentar un precedente importante para otros procesos similares en el país.

Guardar