Gustavo Petro exhibió simbólico regalo en la Casa de Nariño: “Vidas dedicadas a la lucha por los derechos”

En un acto que generó toda clase de reacciones en las redes sociales, el presidente de la República, Gustavo Petro, recibió el martes 17 de septiembre de 2024 el retrato del asesinado expresidente chileno Salvador Allende, cuando se acaban de conmemorar, el 11 de septiembre, 51 años de su asesinato, a manos del régimen del dictador Augusto Pinochet Ugarte, con el violento ataque al Palacio de la Moneda.

Petro, en los últimos días, se ha comparado con el político de izquierda, cuyo mandato fue interrumpido por este cruento ataque. Y no ha dudado en comparar la situación vivida por el primer mandatario de corte progresista del continente con el que vive él actualmente, por cuenta de las investigaciones que adelanta el Consejo Nacional Electoral (CNE), por presunta violación de topes en su campaña.

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“Recibo con orgullo la foto del presidente Salvador Allende que cuelgo en lugar público en la Casa de Nariño. Un regalo del gobierno chileno. Allende y Nariño, vidas dedicadas a la lucha por los derechos de la humanidad”, comentó el jefe de Estado en su perfil de X, en el que compartió un compendio audiovisual de esta solemne ceremonia, que como era de esperarse, causó diferentes reacciones.

La encargada de entregarle este obsequio fue la embajadora de Chile en Colombia, María Inés Ruz Zañartu, que por indicación del presidente Gabriel Boric, uno de los amigos de Petro en la región. Además del libro Solidaridad, que recopiló 120 afiches de 23 países, en respaldo a las personas perseguidas y/o exiliadas por la dictadura.

Según se conoció, la pieza es una fotografía de 50 x 70 centímetros tomada por el fotógrafo uruguayo Naúl Ojeda (1939-2002), que traspasó los derechos de la imagen a la Fundación Salvador Allende: una institución vinculada a la familia del ultimado político, que –del mismo modo– los cedió al Gobierno colombiano. Es por esto que ahora lucirá en una de las paredes de la edificación en la que reside Petro.

La diplomática austral explicó que la entrega es una muestra de agradecimiento del pueblo chileno a Colombia, por el apoyo que brindó el país a los que tuvieron que exiliarse huyendo del régimen de Pinochet: que se extendió hasta 1990, cuando se dio la transición hacia un gobierno democrático, tras la derrota sufrida por el militar en el plebiscito de 1988.

El evento efectuado en la Casa de Nariño fue una especie de reivindicación para Petro, que ya había adelantado la realización de este acto el 9 de septiembre, cuando en un extenso mensaje en la red social X arreció contra el CNE, recordó su lucha contra el exprocurador Alejandro Ordóñez, por el que votó para llegar al cargo, pero que, luego, lo destituyó e inhabilitó por el negocio de las basuras en Bogotá.

“Una artista trae un retrato de Allende que colgaré en las salas del Palacio. Solo le decimos al grupo mafioso que se detenga, porque no sabe qué huracán está desatando”, expresó Petro, en la misma publicación en la que convocó a sus seguidores a salir en su defensa, ya no llenando la Plaza de Bolívar, sino en una convocatoria con fines superiores: la defensa del poder que recibió el 7 de agosto de 2022.

Uno de los que cuestionó este acto fue el concejal de Bogotá Daniel Briceño, del Centro Democrático, que hizo énfasis en cómo el actual mandato se rige por objetos y no por hechos. “La espada de Bolívar, el sombrero de (Carlos) Pizarro, la sotana del cura Camilo Torres y ahora el cuadro de Salvador Allende. El presidente Gustavo Petro vive en los simbolismos y la charlatanería mientras al país se lo lleva la violencia, el derroche, la corrupción y la ineficiencia”, denunció.