Francia Márquez celebró designación del primer obispo afrodescendiente en Colombia: “Un paso importante”

La Catedral Santiago Apóstol de Cali fue epicentro de un evento histórico: por primera vez, la Iglesia católica en Colombia ordenó a un sacerdote negro como obispo. El afortunado de esta sorpresiva designación fue el padre Wiston Mosquera, que ejercerá su episcopado en Quidbó (Chocó), siendo una de las ciudades más golpeadas por los hechos violentos de los grupos armados ilegales, como las Farc, el ELN y, ahora, el Clan del Golfo.

“Me quedé pálido y me dieron tres días para responder si aceptaba”, expresó el clérigo, al contar el asombro con el que recibió la noticia de su escogencia por parte del papa Francisco. Este suceso ameritó el pronunciamiento de la vicepresidenta de la República y ministra de la Igualdad, Francia Márquez, que asistió a la ceremonia y, en sus redes sociales, hizo pública su satisfacción por el nuevo rol que cumplirá Mosquera.

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“Saludamos con alegría y esperanza la decisión del Papa Francisco y la Santa Sede de nombrar al primer obispo afrodescendiente en la historia de nuestro país”, expresó Márquez en su perfil de X. Del mismo modo, la vicepresidenta, que también hace parte de la comunidad afro, recalcó que este nombramiento “es un paso importante en el camino hacia la reparación histórica de los pueblos afrodescendientes en Colombia y el mundo”.

Mosquera Moreno, nacido en Andagoya en 1967, creció en un hogar tradicional del departamento del Chocó. Su vocación sacerdotal comenzó temprano, al crear un grupo juvenil en su comunidad. “Llegamos a ser 125 muchachos haciendo labor social y deporte. Hacia 1995, un sacerdote nos invitó al seminario”, recordó el clérigo en declaraciones recogidas por EFE, que marcan la influencia de su camino en el ministerio.

La mamá del obispo, María Jerónima Moreno, ha sido una figura inspiradora en su vida y en su camino espiritual. “Ella me inculcó la pasión por el servicio y me ha acompañado por todas las parroquias”, recordó el sacerdote. En su recorrido por Jamundí, Cali y Robles, antes del emotivo acto, María Jerónima fue denominad como “la primera dama” del hombre que decidió aceptar el “llamado de Dios” y servir al Pacífico colombiano.

“No temo a las balas y seré un instrumento para que se silencien los fusiles”, reiteró el obispo, que indicó que planea recorrer ríos y selvas para cumplir con su misión pastoral y llevar el mensaje de paz a toda la región. La ceremonia culminó con un momento cargado de simbolismo: El Cristo de Bojayá, municipio que conoció el horror el 2 de mayo de 2002, con una masacre que dejó 74 civiles muertos, fue entregado a Mosquera Moreno.

Es preciso destacar que la posesión formal del obispo nuevo obispo se llevará a cabo el 5 de octubre, en la catedral San Francisco de Asís de la capital chocoana, que será de ahora en adelante su parroquia. Su nombramiento, tal y como lo reseñó la vicepresidenta Márquez, representa un avance significativo para la Iglesia católica en Colombia y para las comunidades afrodescendientes, que piden cada vez más espacios de reivindicación.

Wiston Mosquera, confirmado desde el 5 de julio de 2024, tomará el lugar del tolimense Juan Carlos Barreto Barreto, que desde 2013 hasta abril de 2022 se desempeñó en esta dignidad, antes de ser trasladado a la Diócesis de Soacha. No podía ser más especial la escogencia de un religioso de la región para adelantar la labor de reconstrucción y reconciliación, en una de las regiones más apartadas del territorio nacional.

• Vicario Parroquial de Nuestra Señora del Rosario en Jamundí - Valle (2005)
• Párroco en Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Robles- Valle (2006- 2011)
• Párroco del Señor de los Milagros en Cali (2011-2012)
• Rector del Santuario de la Divina Misericordia en Cali (2012-2017)
• Vicario Episcopal para la zona Oriente (2012-2017)
• Vicario General (2017-hasta la fecha)
• Párroco en la Catedral San Pedro Apóstol de Cali (2018 - 2024)