Esta es la presunta relación del israelí encontrado muerto en Medellín con el programa espía Pegasus, denunciado por Gustavo Petro

Yariv Bokor logró conseguir su cédula de extranjería colombiana en 2020, además de un permiso de residencia, a pesar de que su empresa de informática nunca funcionó en el país. También trabajó para una empresa que tiene relación con la firma creadora del spyware israelí

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La muerte de Yariv Bokor, residente en Medellín, abre interrogantes sobre sus nexos con Sandvine, una empresa señalada por usar tecnología en violaciones de derechos humanos - crédito Androidphoria
La muerte de Yariv Bokor, residente en Medellín, abre interrogantes sobre sus nexos con Sandvine, una empresa señalada por usar tecnología en violaciones de derechos humanos - crédito Androidphoria

Pasan los días y la muerte del ciudadano israelí Yariv Bokor, de 49 años, encontrado en su residencia en Medellín en la mañana del 13 de septiembre, siguen sin ser esclarecidas. De hecho, han sido varias las hipótesis que han surgido alrededor de su deceso, aunque ninguna tan grave como la que se conoció en la mañana de este domingo 15 de septiembre.

Y es que las autoridades aún intentan esclarecer las causas de su fallecimiento, pues en un principio se habló que el extranjero era un ingeniero informático y propietario de la compañía de consultoría informática Bokor Technology Consulting Services, con sede en la capital antioqueña.

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Sin embargo, según la columna de Daniel Coronell para la revista Cambio, el israelí con más de 17 años en Colombia tendría otros propósitos que estarían relacionados con las recientes denuncias del presidente Gustavo Petro sobre el sistema de espionaje Pegasus, presuntamente adquirido por el gobierno de Iván Duque.

Según reveló Coronell, en enero de 2020 Yariv Bokor obtuvo una cédula de extranjería y un permiso oficial de residencia en Colombia. Esta documentación le permitió radicarse en Medellín, donde había fundado, siete años antes su empresa.

En un apartamento del conjunto Río Luna fue hallado Yariv Bokor en estado de descomposición - crédito Google Street View
En un apartamento del conjunto Río Luna fue hallado Yariv Bokor en estado de descomposición - crédito Google Street View

Sin embargo, los registros en Cámara de Comercio de Medellín también arrojaron que hay constancia de que Bokor Technology Consulting Services no llegó a despegar nunca como empresa en Colombia. El israelí solicitó la cancelación de la matrícula mercantil el mismo año en que la fundó, 2013, y nunca tuvo actividad comercial. Incluso, hay documentos escritos y firmados con puño y letra del extranjero para retirarse como empresario, con los que usó su pasaporte israelí para respaldarlos.

Además, en su columna de opinión, Daniel Coronell reveló que antes de establecerse en Colombia, Bokor mantuvo diversas propiedades en Estados Unidos que parecían no estar en proporción con los ingresos esperados de un ingeniero de sistemas. Entre estas propiedades se encuentran una en la costosa ciudad de West Palm Beach, Florida, y direcciones en sitios privilegiados de Nueva York y Los Ángeles.

Sin embargo, la ficha clave sobre la posiblemente muerte del israelí y su relación con el supuesto programa espía está en la descripción que Bokor tiene en su página de LinkedIn. Desde 2016 hasta su fallecimiento, el extranjero había trabajado para la compañía Sandvine, especializada en inteligencia informática.

Esta empresa, con sede en Ontario, Canadá, ha sido acusada varias veces de participar en actividades de espionaje, censura y violaciones de derechos humanos. Incluso, comunicaciones oficiales del Gobierno de Estados Unidos aseguran que Sandvine “proporciona herramientas de censura y monitoreo web masivo, incluido el bloqueo de noticias, el acoso a políticos y activistas de derechos humanos, y la instalación de software espía en los dispositivos electrónicos de críticos y disidentes del gobierno”.

La Fiscalía colombiana abrió investigación sobre la compra de software Pegasus por inteligencia - crédito Ernesto Guzmán/EFE
La Fiscalía colombiana abrió investigación sobre la compra de software Pegasus por inteligencia - crédito Ernesto Guzmán/EFE

La denuncia del gobierno americano es tan seria que, para febrero de 2024, Sandvine fue incluida en la lista de entidades que permiten abusos de los derechos humanos, después de que se le acusara en 2023 de ayudar con la interceptación del teléfono del candidato opositor a la presidencia de Egipto, Ahmed Altantawy.

Sandvine, que opera desde Ontario, Canadá, está acusada de usar herramientas tecnológicas para censurar la discrepancia, monitorear actividades en internet, acosar opositores, vigilar periodistas y activistas de derechos humanos en al menos 16 países: Azerbaiyán, Argelia, Afganistán, Bielorrusia, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Eritrea, Jordania, Kuwait, Pakistán, Qatar, Rusia, Sudán, Tailandia, Turquía y Uzbekistán”, señaló Daniel Coronell en Cambio.

Aunque en principio no pareciera tener relación con las denuncias del presidente sobre la compra de Pegasus en 2020 por un valor de 11 millones de dólares que fueron entregados en efectivo, presuntamente, por el gobierno de Iván Duque, Sandvine tiene un socio en común con NSO, la empresa israelí que desarrolla el programa espía, utilizado en actividades de vigilancia y espionaje a nivel mundial. Este socio común es Francisco Partners LLC, que en 2017 compró Sandvine y hasta 2019 tuvo el 65% de NSO.

Sin embargo, la muerte de Yariv Bokor sigue siendo objeto de investigaciones por parte de las autoridades colombianas, que indagan sobre la desaparición repentina del ciudadano extranjero dos días antes de que fuera encontrado en un charco de sangre y con varios vidrios a su alrededor en su residencia en Medellín, el viernes 13 de septiembre.

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