Conductor de taxi impidió el paso de una ambulancia durante una emergencia médica en Bogotá: la Secretaría de Salud anunció acciones legales

En la localidad de San Cristóbal, en Bogotá, un taxista fue multado por obstaculizar el paso de una ambulancia que se dirigía a atender una emergencia de un menor de edad.

Diversos videos compartidos en redes sociales muestran cómo el conductor del taxi realizaba movimientos bruscos y en zigzag, bloqueando el camino del vehículo de emergencia, a pesar de los repetidos llamados para que permitiera el paso.

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El incidente, que ocurrió en la madrugada del 12 de septiembre, revela el comportamiento imprudente del conductor, documentado por una paramédica que grababa la escena desde el interior de la ambulancia. En el video se escucha cómo la profesional al volante solicita al conductor del taxi, a través del altoparlante, que les permita avanzar rápidamente para poder atender la emergencia en curso.

Como se puede ver en el video, el vehículo de placas WMN326 frenaba repetidamente y hacía maniobras de un lado a otro, obstaculizando el avance de la ambulancia que intentaba superar el bloqueo. Al final del recorrido, luego de aproximadamente un minuto de constante interferencia, el taxista no cedió el paso a pesar de la evidente urgencia del servicio médico.

La cuestión no se limitó a la obstrucción mecánica; una infracción formal fue impuesta al conductor con una multa de 564,225 pesos, emitida el jueves 12 de septiembre. Además, la Secretaría de Salud de Bogotá comunicó que se tomarán las medidas legales: “Es pertinente señalar que el video hará parte del inicio de acciones legales en contra del conductor para evitar futuras reiteraciones”.

La Secretaria de Salud rechaza enfáticamente el comportamiento del conductor” y ”recuerda que este tipo de conductas no solo generan infracciones al Código Nacional de Tránsito, sino también posibles delitos contra la vida e integridad personal del paciente”. Además, la Secretaría hizo un llamado a ”velar por el respeto a las prioridades médicas y sanitarias, permitiendo el libre tránsito de las ambulancias”.

Un hombre de 66 años falleció en el sendero peatonal de Monserrate, en Bogotá, al no recibir asistencia médica oportuna. Leandro Castellanos, concejal de la ciudad, denunció que la ambulancia solicitada tardó una hora y 13 minutos en llegar al lugar, lo que resultó en la muerte del individuo.

El incidente ocurrió el domingo 25 de agosto cuando el adulto mayor se desmayó en un túnel del sendero. La primera atención fue proporcionada por el Cuerpo de Bomberos de Bogotá, quienes inmediatamente solicitaron una ambulancia. Castellanos aseguró que este retardo evidencia una grave negligencia en el sistema de emergencias de la Secretaría de Salud.

Según detalló el cabildante, la ambulancia estaba estacionada en la falda del cerro, lo que agravó la situación al no reaccionar con la celeridad requerida. “Un hombre de avanzada edad, que sufrió un desmayo en el túnel, al cual auxilió el cuerpo de Bomberos, pero lastimosamente el cuerpo médico y la ambulancia no hicieron presencia”, indicó Castellanos.

El concejal enfatizó que si el vehículo de emergencia hubiera actuado con mayor agilidad, el hombre podría haberse salvado. “Si hubiese sido oportuno, si hubiese tenido otra actuación, otra convicción en su servicio, el desenlace sería diferente”, afirmó.

Además, Castellanos hizo un llamado a la Secretaría de Salud para que inicie una investigación exhaustiva y tome las medidas necesarias para que incidentes similares no vuelvan a ocurrir. “Es necesario que se determine quiénes son los responsables y que se judicialice a los culpables”, concluyó el político.

Bogotá enfrenta serias demoras en la respuesta de ambulancias, según datos revelados por la concejal Diana Diago. A inicios de 2024, la ciudad capital presenta tiempos de espera que oscilan entre media y una hora para los servicios del Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (Crue), lo que ha generado preocupación y críticas por la eficacia de su sistema de salud.

De acuerdo con Diago, los tiempos de atención se dividen en tres categorías: crítica, alta y media. Las dos primeras presentan un tiempo promedio de 31 minutos, mientras que en la atención media el tiempo se eleva a 1 hora y 6 minutos. Estos tiempos están lejos de cumplir con los estándares internacionales, lo cual genera, según Diago, un grave riesgo para la vida de los ciudadanos.

La denuncia de Diago incluye acusaciones de presunta corrupción en el manejo de recursos destinados a fortalecer el sistema de ambulancias. Sostiene que los políticos de turno han desviado fondos que deberían haber mejorado la infraestructura y los tiempos de respuesta. “Tuvieron el tiempo y los recursos para fortalecer la entidad, pero en vez de eso jugaron con los dineros públicos y con la vida de los bogotanos”, afirmó Diago.