La FLIP criticó discurso de Petro sobre la prensa: una oportunidad perdida para la protección de los periodistas en Colombia

En una reciente firma de directiva para la protección de periodistas y la libertad de expresión, el presidente Gustavo Petro pronunció un discurso que ha generado una fuerte controversia.

Jonathan Bock, director de la Fundación para la Libertad de Prensa (Flip), calificó el discurso del mandatario como una “oportunidad perdida” y expresó su preocupación por la falta de un mensaje claro de apoyo hacia la prensa.

La directiva firmada representa un esfuerzo para establecer estándares claros que protejan el ejercicio periodístico y garanticen la libertad de expresión en Colombia, pero la intervención del presidente ha suscitado un debate sobre su compromiso con estos principios.

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La firma de esta directiva es el resultado de años de trabajo y busca ofrecer un marco claro para la protección de los periodistas y la promoción de la libertad de expresión. Este documento se ha creado en un contexto alarmante de incremento de agresiones y estigmatizaciones hacia la prensa por parte de funcionarios públicos en los últimos dos años.

Bock destacó en una entrevista con Néstor Morales en el programa Mañanas Blu que, en la actualidad, los funcionarios públicos representan el segundo mayor peligro para los periodistas en Colombia, después de los grupos delincuenciales.

Este fenómeno ha sido evidente en actos de hostigamiento y agresiones por parte de alcaldes, gobernadores y otros representantes del Estado, lo que ha intensificado la necesidad de una directiva robusta para proteger a los periodistas.

El discurso de Petro durante la firma de la directiva, en lugar de reforzar el mensaje de respeto y apoyo hacia la prensa, ha sido criticado por Bock como “desafortunado”.

El director de la Flip subrayó que el presidente desaprovechó una ocasión crucial para enviar un mensaje claro sobre la importancia del periodismo en la sociedad y el respeto necesario hacia la crítica.

“El presidente tenía ante sí un momento para resaltar la relevancia del trabajo periodístico y su compromiso de respaldarlo”, comentó Bock, enfatizando que el mandatario debería haber aprovechado la ocasión para fortalecer el respaldo institucional a la prensa.

Uno de los puntos centrales del discurso de Petro fue su afirmación de que, al igual que cualquier ciudadano, él tiene derecho a la crítica. Sin embargo, Bock argumentó que, aunque el presidente tiene el derecho de defenderse de las críticas y calumnias, su posición le otorga un poder y una responsabilidad que no se comparan con los de un ciudadano común.

“El presidente no es el portero”, dijo Bock, refiriéndose a una de las analogías usadas por Petro. “El presidente tiene un poder muy fuerte y una responsabilidad particular, entre las cuales está el respeto a la prensa”. Bock subrayó que la crítica que el presidente puede hacer debe ser medida y no debe contribuir a la estigmatización de los medios de comunicación.

La FLIP ha documentado un preocupante aumento en las amenazas y agresiones hacia periodistas en diversas regiones del país. Este problema es particularmente grave en algunas ciudades y departamentos, lo que hace que la firma de la directiva sea aún más relevante.

Aunque en lugar de fortalecer los esfuerzos para proteger a los periodistas, el discurso del presidente se desvió hacia una narrativa que Bock considera inadecuada. La estigmatización de la prensa, lejos de ser una cuestión menor, se ha convertido en un problema serio que afecta la seguridad y la libertad de los periodistas en Colombia.

La intervención de Gustavo Petro durante la firma de la directiva para la protección de periodistas ha sido objeto de críticas por su falta de apoyo contundente hacia la prensa.

La FLIP ha señalado que el discurso del presidente no solo falló en fortalecer el mensaje de protección a los periodistas, también se desvió hacia una narrativa que podría agravar la estigmatización y los riesgos enfrentados por los medios de comunicación en el país.