El Día Mundial de la Prevención del Suicidio (Dmps), se celebra anualmente el 10 de septiembre y es organizado por la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio (Iasp) y respaldado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según un informe del Instituto de Medicina Legal, en el primer trimestre de 2024 se registraron 712 casos de suicidio de los cuales 205 fueron cometidos por jóvenes entre los 18 y 28 años, y 186 por personas de entre 29 y 44 años.
De acuerdo con el Consejo Colombiano de Seguridad, CCS, en la actualidad, los entornos laborales en el país enfrentan un gran reto que es el cuidado de la salud mental de los trabajadores en un escenario en el que los problemas y trastornos de la salud mental, que pueden llegar hasta la conducta suicida, se han incrementado.
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Signos de alarma de conducta suicida
- Aislamiento social.
- Presencia de pensamientos o planes de autolesión en el último mes o acto de autolesión en el último año.
- Alteraciones emocionales graves.
- Desesperanza.
- Agitación o extrema violencia.
- Conducta poco comunicativa.
Recomendaciones para prevenir el suicidio en entornos laborales
Ante este panorama, el CCS le recomiendan a las empresas a estar en continua actualización y capacitación en torno a las políticas y normativas nacionales para la mejora de la calidad de vida y de condiciones laborales de sus trabajadores y así poder generar programas y acciones más específicos al interior de las organizaciones para la promoción de la salud mental.
- Fortalecer la educación en salud mental de los trabajadores, líderes y gerentes: mediante la realización de formación y capacitación continua que les permita conocer y comprender la importancia del cuidado de la salud mental en el entorno laboral y familiar y que, a su vez, permitan brindar herramientas para el autocuidado y la gestión de la salud mental en las empresas.
- Generar Sistemas de Vigilancia Epidemiológica en salud mental: monitorear y vigilar la salud mental de los trabajadores en el entorno laboral a partir de la identificación de peligros psicosociales y la recopilación de datos e información que posteriormente permita el análisis y evaluación de los factores de riesgo psicosocial, accidentes y enfermedades laborales en salud mental.
- Promover la desconexión virtual: respeto por la jornada laboral y la desconexión digital, bonificaciones por productividad, entre otros aspectos que influyen en un clima laboral satisfactorio.
- Diseñar e implementar políticas, cultura y programas de bienestar y apoyo: se debe fomentar en los entornos laborales el desarrollo y comunicación de políticas que fomenten la salud mental de los trabajadores y una cultura organizacional que permita una comunicación bidireccional asertiva, oportuna y efectiva entre el trabajador y el empleador.
- Programas de bienestar integrales que comprometan todas las esferas de la salud: (física, mental, emocional, social) del trabajador con la inclusión de la flexibilización del horario laboral, pausas activas, organización de tareas, horarios y espacios de relajación y meditación en el entorno laboral.
Por otra parte, las empresas deben fortalecer la articulación con los otros actores del sistema de salud mental como lo son las cajas de compensación familiar, las ARL, las instituciones prestadoras de servicios de salud (IPS) mediante consultorios y/o profesionales especializados en la temática para así generar más estrategias de promoción de la salud mental de los trabajadores.
La Organización Mundial de la Salud realiza estas recomendaciones
- Introducción de políticas orientadas a reducir el consumo nocivo de alcohol.
- Restricción del acceso a los medios más frecuentemente utilizados para el suicidio (por ejemplo, plaguicidas, armas de fuego y ciertos medicamentos).
- Información responsable por parte de los medios de comunicación.
- Identificación temprana, tratamiento y atención de personas con problemas de salud mental y abuso de sustancias, dolores crónicos y trastorno emocional agudo.
- Capacitación de personal de salud no especializado, en la evaluación y gestión de conductas suicidas.
- Seguimiento de la atención prestada a personas que intentaron suicidarse y prestación de apoyo comunitario.
- Apoyar a quienes han perdido a seres queridos que se han suicidado.