El futbolista Harrison Otálvaro decidió llevar su caso a la Comisión Nacional de Disciplina Judicial (Cndj), luego de un prolongado conflicto legal con su exabogado.
El deportista, que jugó en equipos como Millonarios, América, Atlético Nacional y Tolima, se vio en la necesidad de demandar al Cúcuta Deportivo para reclamar pagos pendientes de su contrato. Aunque su abogado logró que el equipo reconociera y desembolsara el monto adeudado, Otálvaro no recibió la totalidad del dinero que le correspondía.
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Otálvaro recurrió a José Cadena, representante legal del Cúcuta Deportivo, quien confirmó que el club ya había realizado la liquidación completa. No obstante, el futbolista no recibió la suma total, lo que le llevó a emprender acciones legales contra su abogado.
Ante la Comisión Nacional de Disciplina Judicial se celebraron varias audiencias a las que el abogado investigado no asistió, resultando en que las pruebas presentadas demostraban su responsabilidad en el caso.
Durante una serie de audiencias para evaluar la conducta del abogado de Otálvaro, y, con base en las pruebas, se determinó que el togado no asistió a las audiencias y que, efectivamente, retuvo una parte significativa del dinero correspondiente a su cliente, razón por la que no podrá ejercer su profesión por dos años y tendrá que pagar 10 salarios mínimos.
Esta es la historia del jugador Otálvaro con su abogado
Todo comenzó el 10 de marzo de 2015, involucrando al destacado futbolista Harrison Otálvaro y su apoderado legal, referente a una deuda del Cúcuta Deportivo Fútbol Club S.A. Según reporta CNDJ, el contrato inicial fue establecido para que el abogado se encargara del cobro de $38.508.525 por los derechos deportivos de Otálvaro, de los cuales el 20% serían honorarios del abogado. En total, $7′700.000 estaban destinados para pagar al defensor legal.
La trama se complicó cuando, de acuerdo con CNDJ, el abogado “recibió por parte de la Sociedad la suma de $322.206.571 en varias cuotas pagadas en efectivo desde el mes de septiembre de 2015 a junio de 2017″, dinero que correspondía a varios poderdantes, incluido Otálvaro. Sin embargo, el jugador apenas recibió 10 millones de pesos y perdió contacto con su apoderado.
Debido a la falta de respuesta, el futbolista que jugó en Millonarios solicitó una aclaración al club, obteniendo respuesta el 8 de agosto de 2017 de José Augusto Cadena Mora, representante legal del Cúcuta Deportivo.
En el comunicado se afirmaba: “Nos permitimos informarle que la Sociedad se encuentra al día respecto a las obligaciones contempladas en el Acuerdo de Reorganización a su favor”. Esto reveló que el abogado contratado no había cumplido con su obligación, estafando al jugador.
Adicionalmente, otro comunicado del 14 de septiembre de 2018 corroboró: “Su acreencia conforme al proyecto de calificación y graduación de créditos aprobado por la Superintendencia de Sociedades ya fue pagada a través de su apoderado designado para el efecto”.
Así, Otálvaro llevó su caso a la Jurisdicción Disciplinaria para buscar justicia frente a lo que consideraba una actuación irregular del jurista.
La defensa del abogado argumentó que los pagos recibidos eran para varios deportistas y que el Cúcuta Deportivo no aclaró que los montos adeudados hubieran sido pagados en su totalidad. Según explicaron al medio de comunicación, sostienen que el club utilizó una figura denominada reversión de intereses para evitar el pago completo de las sumas acordadas en el Acuerdo de Reorganización.
Sin embargo, la Justicia Disciplinaria, después de evaluar las pruebas documentales, determinó que el abogado “vulneró sin justificación alguna el deber de obrar con lealtad y honradez en sus relaciones profesionales” y concluyó que la retención de dineros no era una conducta acorde con el código ético de los profesionales del derecho, por lo que merecía una sanción.