Niñas Embera fueron separadas de sus familias por denuncias de maltrato: ahora regresarán a su territorio, pero seguiran protegidas

En un esfuerzo conjunto por garantizar los derechos de la infancia y asegurar el bienestar de los menores de la comunidad Emberá, la Secretaría Distrital de Integración Social y la Comisaría de Familia de Santafé han anunciado el retorno de tres niñas Emberá a sus territorios ancestrales.

Las menores, que fueron separadas temporalmente de sus familias debido a denuncias de maltrato, han estado bajo medida de ubicación institucional mientras se verificaban las condiciones para su reintegro seguro.

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Este proceso, que culminará con el retorno de las niñas se ha llevado a cabo bajo estrictos protocolos de protección. Las audiencias de seguimiento realizadas por la Comisaría de Familia de Santafé permitieron evaluar las condiciones familiares y establecer compromisos claros en cuanto al trato y protección de las menores una vez retornen a sus hogares. La presencia virtual de la Defensoría de Familia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) aseguró la transparencia y el cumplimiento de las garantías necesarias para las niñas.

El contexto de estas medidas responde a la situación de vulnerabilidad que ha vivido la comunidad Emberá asentada en el Parque Nacional Enrique Olaya Herrera, donde se han registrado diversos tipos de violencia, consumo de sustancias psicoactivas y accidentes viales que pusieron en riesgo a los niños, niñas y adolescentes.

Desde el 11 de julio, cuando se implementó un Punto de Mando Unificado, la Secretaría de Integración Social ha desplegado una serie de estrategias pedagógicas y de prevención para mitigar los riesgos que enfrentaban los menores.

Entre estas acciones se destacan 62 experiencias pedagógicas y artísticas, orientadas a promover el diálogo intercultural y reforzar la identidad cultural de los menores Emberá. Además, se realizaron más de 100 recorridos en las zonas aledañas al Parque Nacional, identificando situaciones de riesgo y activando rutas de atención y protección para las niñas, niños y adolescentes. Las familias también recibieron capacitaciones en autocuidado y protección infantil, con el objetivo de evitar futuras situaciones de maltrato.

La Secretaría de Integración Social, en coordinación con otras entidades, también garantizó jornadas de vacunación, desparasitación y atención prioritaria en salud, así como remisiones al sector educativo y programas de inclusión social. En el marco del retorno, las niñas, junto a otros miembros de la comunidad, participaron en el festival Jedeko (Luna en emberá), un evento de despedida que buscó transmitir un mensaje de cariño y protección para los menores, a través de actividades artísticas y pedagógicas.

De acuerdo con el distrito el retorno de estas niñas Emberá no solo simboliza una esperanza renovada para sus familias, sino también el compromiso de las instituciones locales y nacionales con la construcción de proyectos de vida dignos y libres de violencia en sus territorios ancestrales.

El Parque Nacional Enrique Olaya Herrera, en Bogotá, cerrará temporalmente las zonas donde la comunidad indígena Emberá estuvo asentada durante 10 meses. La medida busca realizar acciones de recuperación ambiental, incluyendo el control de plagas, la revisión del estado de los árboles y la fauna. Estas labores comenzarán el 9 de septiembre y estarán a cargo de las Secretarías de Salud y Ambiente. Las autoridades recomiendan a los ciudadanos no ingresar a las áreas señalizadas y evitar el tránsito de animales.

El cierre durará hasta que se restablezcan las condiciones ambientales y sanitarias adecuadas. El asentamiento de la comunidad Emberá en el parque fue parte de una protesta por incumplimientos en su reasentamiento en territorios ancestrales. Aunque después de un acuerdo con la Alcaldía y la Unidad de Víctimas, las familias Emberá han comenzado a retornar a sus tierras.