Este es lujoso apartamento en Bogotá de Rodolfo Hernández: ubicado en exclusivo sector y está en venta

Después de un mes en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Internacional de Colombia en Piedecuesta (Santander), el excandidato presidencial y empresario Rodolfo Hernández falleció la tarde del lunes 2 de septiembre. El político santandereano sufría de cáncer de colon en estado terminal, enfermedad que finalmente le costó la vida.

Hernández, conocido por su franqueza, expresó en múltiples ocasiones cómo sería su vida si hubiera ganado la presidencia frente a Gustavo Petro. En varias ocasiones, durante su campaña indicó que no se mudaría a la Casa de Nariño.

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Para ello, el ingeniero había adquirido un apartamento en el edificio Vitrium, uno de los más modernos en el norte de Bogotá, que en ese momento estaba avaluado en 4.300 millones y que hoy estaría cerca de los 6.000 mil millones de pesos.

El inmueble es uno de los proyectos más exclusivos en la capital. De acuerdo con información de la página Icono Urbano, la construcción se ubica en la carrera séptima con calle 93, frente al Parque El Chicó. Es un conjunto residencial de dos torres de 13 y 11 pisos, con un total de 36 apartamentos con áreas entre los 267 y 395 metros.

La propiedad de Rodolfo Hernández era uno de los más pequeños y su familia hace cerca de un mes lo había puesto en venta.

En una entrevista que brindó para la revista Semana en medio de su campaña presidencial, el empresario santandereano señaló “ya compré una choza en Bogotá”, agregando en sus declaraciones la razón de la compra del apartamento en zona exclusivo de Bogotá: “Lo compré porque creo que los colombianos no tienen por qué pagarme a mí la comida y la vivienda”, dijo en ese momento.

Rodolfo Hernández anunció en numerosas ocasiones que su motivación fundamental para postularse al cargo más alto del país no era el dinero. El empresario dejó una considerable fortuna y en una ocasión explicó en una entrevista con la revista Bocas que su verdadero interés era servir al país.

En dicha entrevista, el fallecido político reveló que su patrimonio asciende a “USD100 millones, es decir, a unos 400.000 millones”, lo que demostraba que sus ambiciones políticas no estaban motivadas por la riqueza.

La fortuna de Hernández proviene de su empresa constructora HG (Hernández Gómez y Cía), la cual fundó el 29 de julio de 1971. Hernández, según sus declaraciones a diversos medios, mencionó que “el 70% de su fortuna está en tierra y un 30% rotándola en la financiación de los productos que venden”.

Este magnate decidió emprender su propio camino en la construcción después de ser despedido de la Secretaría de Obras Públicas de la Gobernación de Santander a principios de los años setenta.

La Silla Vacía informó que el excandidato y su familia poseen seis compañías y más de 370 propiedades, entre ellas terrenos, apartamentos y locales. En Florida (Estados Unidos) son propietarios de la sociedad HG Constructora LLC, establecida en 2019 bajo la dirección de Socorro Oliveros, esposa de Hernández, y su hijo Luis Carlos Hernández, que estuvo involucrado en un intento de cobrar una comisión millonaria por obtener un contrato para la transformación de residuos.

La empresa HG fue esencial en el desarrollo urbano de Piedecuesta. Esta pequeña localidad se transformó en una próspera ciudad, gracias a los primeros proyectos de vivienda popular que comenzaron a emerger bajo la gestión de Hernández.

“La infraestructura era limitada,” comentó Hernández en Bocas, “pero logramos cambiar eso y expandir nuestro impacto a Bucaramanga y otras ciudades como Barranquilla (Atlántico) y Villavicencio (Meta).” Este crecimiento no solo incrementó su capital, sino que también introdujo estilos arquitectónicos modernos en la región.

Hernández dejó huella en cada territorio en el que incursionó. Sus métodos y la expansión territorial que promovió lo convirtieron en uno de los empresarios más influyentes en el sector de la construcción.