Desde las 5:30 de la mañana de este viernes 6 de septiembre, miles de personas se han visto afectadas por la protesta liderada por conductores de las empresas Coosoatlan y Lolaya, en Barranquilla y Soledad. La causa de esta manifestación es el asesinato de un chofer, presuntamente como represalias por no pagar cobros extorsivos.
Los bloqueos se han registrado en puntos clave, como la avenida Murillo, la avenida Circunvalar, la entrada a Soledad 2000, la salida de Granabastos y la zona de acceso a la Terminal de Transporte.
Como resultado, la movilidad en la ciudad se ha visto seriamente afectada, impactando la salida y llegada de viajeros y la distribución de alimentos en la central de abastos. Estos problemas se suman a los rezagos del recién levantado paro camionero.
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Los conductores piden mayores condiciones de seguridad, argumentando que, a pesar de las reuniones con la Policía, no han podido eliminar las amenazas de grupos como el Clan del Golfo. Hace una semana, un trabajador de Coosoatlan recibió un panfleto con una demanda de pagos extorsivos, lo cual se cree que motivó el asesinato del chofer José Luis Chávez, quien fue atacado a tiros mientras conducía la noche del jueves.
El paro involucra a varias empresas de transporte, incluyendo Coolitoral, Sobusa, Alianza Sodis, Coochofal y Transmetro, las cuales también han visto sus operaciones afectadas. Algunas de estas empresas han colocado un 20% de su flota en las calles con apoyo policial para tratar de brindar una solución de movilidad.
El asesinato de José Luis Chávez se dio en la tarde del jueves 5 de septiembre, en el barrio Villa Estadio del municipio de Soledad (Atlántico), donde un sujeto abordó el bus como pasajero y luego abrió fuego. José Luis Chávez Ardila, de 51 años, fue trasladado a un centro asistencial donde se confirmó su muerte minutos después.
Ante estos hechos, la Policía Metropolitana de Barranquilla ha anunciado una investigación para dar con los responsables y ha ofrecido una recompensa de hasta 40 millones de pesos por información que conduzca a su captura. El Coronel Dave Figueroa, Comandante Operativo de la Policía Metropolitana, ha destacado la participación de personal de la Sijín, del Gaula y del servicio de vigilancia para esclarecer el caso.
Los bloqueos también han incluido al sistema de transporte Transmetro que anunció la suspensión de sus servicios a través de su cuenta en X. Decenas de pasajeros han quedado varados por más de una hora en los puntos de los bloqueos, buscando alternativas de transporte. Algunos conductores informaron que solo dejan pasar a motocicletas y vehículos en casos extraordinarios, como el transporte de personas enfermas.
El investigador y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía continúan recabando pruebas en el lugar del asesinato de Chávez Ardila, incluyendo grabaciones de cámaras de seguridad y testimonios de testigos. Según el Coronel Figueroa, las autoridades están comprometidas en capturar a los autores del crimen y garantizar la seguridad de la ciudadanía, reafirmando la recompensa ofrecida.
Finalmente, hace menos de un mes se hicieron virales en redes sociales panfletos amenazantes contra la empresa Coosoatlan, firmados por el Frente Carlos Daniel del Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), conocido como el Clan del Golfo. La empresa tenía un plazo de 24 horas para dialogar con el grupo armado y llegar a un acuerdo.
Siendo la 1:50 p. m., Infobae Colombia pudo comunicarse con la Policía Metropolitana de Barranquilla, quienes confirmaron que ya no se presentan bloqueos viales.
Así se está recobrando la normalidad vial en Barranquilla tras cese de paro Camionero
Después de semanas de tensiones, la carretera que conecta Bogotá con Villavicencio ha sido finalmente desbloqueada, facilitando el tránsito de alrededor de 6.000 vehículos diarios. Este restablecimiento del tráfico normal es consecuencia de la culminación del paro camionero, que había afectado significativamente varias regiones de Colombia. A pesar de la eliminación de numerosos bloqueos en diferentes puntos del país, el norte del país aún enfrenta desafíos.
El 6 de septiembre de 2024, el brigadier general José Ramírez, jefe de la Policía Nacional, reportó la existencia de siete bloqueos permanentes y diecisiete bloqueos intermitentes. Este número representa una clara reducción en comparación a la noche anterior, donde se habían registrado cincuenta y tres bloqueos. “Poco a poco se han ido desactivando este tipo de bloqueos en el país”, aseguró Ramírez, señalando un avance significativo hacia la normalización de la transitabilidad en las vías colombianas.
En el Departamento de Norte de Santander, la implementación del acuerdo con los transportistas ha comenzado a mostrar resultados. Los conductores de carga han empezado a remover los bloqueos en las principales arterias de la región. El gobernador William Villamizar informó que áreas clave como Montebello y Urimaco han sido despejadas, lo que permite el flujo regular de vehículos en el norte del país.
En Barranquilla, la situación sigue siendo crítica, ya que algunos bloqueos persisten, complicando aún más la situación en una de las principales ciudades de la costa caribeña. La resolución de estos bloqueos representa el último desafío relevante que las autoridades deben enfrentar para asegurar la completa normalización del tránsito en las vías del país.
El gobierno y las autoridades locales continúan trabajando en coordinación para asegurar que el acuerdo con los transportistas se implemente efectivamente y que el tránsito vehicular en Colombia se restaure plenamente en todas las regiones. La eliminación de los bloqueos facilitará no solo la movilidad, sino también la reactivación económica en las áreas más afectadas.