Si los procesos de paz adelantados con los grupos armados del país han enfrentado serias dificultades, las conversaciones con las bandas criminales locales de varias ciudades del país no ha sido la excepción.
Uno de ellos es el proceso de paz urbana que se adelanta con las tres principales bandas criminales del departamento del Chocó, que son Los Mexicanos, Lokos Yam y RPS, quienes anunciaron la finalización del cese al fuego que había con el Gobierno nacional, debido a la expansión y control realizado por el Ejército Gaitanista de Colombia (EGC), más conocido como Clan del Golfo.
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“Anunciamos oficialmente el levantamiento al cese al fuego unilateral y comenzaremos a emprender acciones militares para defender nuestros territorios”, se lee en el comunicado.
Además, las tres estructuras criminales sostuvieron que “las autoridades como la Fiscalía, Policía, Sijin, Ejército, Gaula se dedicaron a perseguir a esos tres grupos”, y critican que, estos mismos permitirían que otros grupos “operaran con total libertad en los territorios”.
En la misiva, denuncian que el Clan del Golfo ha realizado varias “incursiones armadas simultáneas” en la ciudad de Quibdó, por lo que señalaron que esto “lo hacen para hacer ver que somos las estructuras de la mesa, las que estamos generando el miedo y la zozobra, dejando en evidencia que esta alianza criminal lo que busca es entregarle el dominio territorial del municipio de Quibdó al Ejército Gaitanista de Colombia”.
En este sentido, las tres estructuras criminales instaron al Gobierno nacional y a la comunidad internacional para brindar soluciones frente a esta problemática. “Hacemos un llamado a las organizaciones encargadas de acompañar el Ecsj (Oficina del Consejero Comisionado, Delegados del Gobierno Nacional, Mapp-OEA, ONU y Diócesis) para que inviten a las autoridades locales a que cesen con esta alianza criminal que tienen con el EGC”, puntualizaron.
Clan del Golfo se apoderó de Quibdó, confirmó Gobierno Petro
Durante un debate de control político realizado en la Comisión Segunda del Senado, el alto comisionado para la Paz, Otty Patiño, advirtió la expansión del Clan del Golfo en territorio chocoano, especialmente, en la ciudad de Quibdó.
El funcionario vallecaucano calificó estos actos como “tenaz” y explicó su preocupación ante la intención de la estructura criminal de querer apoderarse de la operación de los grupos delincuenciales en la ciudad del pacífico colombiano.
“Hoy el Clan del Golfo ha tomado la decisión de apoderarse de Quibdó, la capital de un departamento, y eso no es cosa menor. Lo están haciendo asesinando, creando temor o apoderándose de otras bandas que allí operan como Los Mexicanos, RPS y otras. Ellos quieren desalojarlos para apoderarse de ese territorio”, expresó Patiño en el debate realizado el pasado martes 3 de septiembre en el legislativo.
No obstante, un día después de estos comentarios, el grupo armado, a traves de su cuenta de X, pidieron a Otty Patiño que presentara las pruebas concretas sobre sus afirmaciones.
“El señor comisionado no debe caer en el juego de los enemigos de la paz que han incrementado su estrategia de difundir rumores falsos con el fin de desacreditar a alguna de las partes”, se lee en el comunicado del Clan del Golfo.
A su vez, advirtieron al Gobierno de Gustavo Petro de que “si quiere adelantar un proceso con el EGC, lo primero que debe hacer es respetar nuestra identidad y no transmitir rumores”, y enfatizaron en que los diálogos en curso con el Gobierno nacional deben evitarse malentendidos y seguir el canal designado para las negociaciones, que cuenta con un coordinador oficial.
No obstante, el representante a la Cámara del Pacto Histórico y delegado del Gobierno en el espacio de diálogo con los tres grupos delincuenciales de Quibdó, David Racero, hizo un llamado a las organizaciones para que no retomen el camino de la violencia y busquen alternativas para frenar los ataques contra la población del pacífico.
“Los grupos armados levantan el cese al fuego, según ellos, para poder contrarrestar la ofensiva del Clan del Golfo. Eso, por supuesto, es una mala noticia para el pueblo de Quibdó que iba avanzando positivamente en la capital de Chocó (...) la comunidad de Quibdó y los mismos grupos organizados están más que dispuestos a entablar un mecanismo de tregua, un mecanismo humanitario, con acompañamiento de la Iglesia, con organismos internacionales, para detener la avanzada militar”, aseguró Racero en diálogo con El Espectador.