Ministro del Interior aceptó que la ‘paz total’ del Gobierno está fracasando: “Los grupos violentos no entendieron el mensaje del presidente Petro”

El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, reconoció que el camino hacia la paz total enfrenta serios desafíos. En declaraciones recientes, Cristo afirmó que la iniciativa de paz del Gobierno no alcanzará un éxito completo debido a la resistencia de varios grupos armados.

“Nosotros podemos tener todos los éxitos en la paz total, que no los vamos a tener. Yo creo que los grupos violentos no entendieron el mensaje del presidente Gustavo Petro”, señaló el ministro.

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Estas declaraciones se producen mientras el Gobierno lucha por mantener los acuerdos de cese al fuego con los distintos grupos armados.

Hasta la fecha, casi todos los ceses al fuego se han levantado, dejando solo uno en vigor con el bloque Magdalena Medio. Las Fuerzas Militares han intensificado sus operaciones en regiones como el Cauca, donde la violencia sigue siendo un problema persistente, según informó el ministro.

“El cese al fuego, al que muchos le atribuyen todos los males, prácticamente ya no existe”, aseguró Cristo. Añadió que solo queda un cese al fuego y es con el bloque Magdalena Medio.

“Me niego a hablar de Estado Mayor Central, eso es un mal invento, ni fue estado, ni fue mayor ni fue central, y con el Frente Jorge Briceño, el de Calarcá, que son las disidencias de las Frac, 1.200 a 1.500 hombres”.

A pesar de estos contratiempos, el Gobierno de Gustavo Petro ha implementado diversas reformas y ha entablado negociaciones con el objetivo de avanzar hacia una paz total.

No obstante, la falta de compromiso por parte de algunos actores armados y la persistente violencia han complicado estos esfuerzos. Cristo destacó el “gran esfuerzo” que las Fuerzas Militares están realizando en el Cauca, una de las áreas más afectadas por el conflicto armado.

La administración se mantiene firmemente comprometida con la búsqueda incansable de la paz. Cristo enfatizó la importancia de redoblar esfuerzos y de un compromiso colectivo para avanzar en la implementación del acuerdo de paz con las Farc. Según el ministro, sin una implementación efectiva de este acuerdo, las esperanzas de alcanzar la paz total en Colombia seguirán siendo limitadas.

Las palabras de Cristo muestran la complejidad de encontrar una solución duradera a la lucha armada en un país con una larga historia de conflicto.

El camino hacia la paz total es arduo y está lleno de obstáculos, pero el compromiso del Gobierno y de las Fuerzas Militares permanece inalterable, con la esperanza de que, mediante esfuerzos continuos y un enfoque renovado, se logren avances significativos en la construcción de una Colombia más pacífica y justa.

Colombia enfrenta desafíos importantes en medio de su esfuerzo por alcanzar la paz total. Entre los problemas más apremiantes se encuentra la persistente violencia y el narcotráfico. A pesar de los esfuerzos del Gobierno, la producción de cocaína ha alcanzado niveles sumamente alarmantes, la erradicación de cultivos ilícitos mediante métodos forzados ha sido abandonada y aun no aparece una nueva opción rápida y eficiente.

El presidente Gustavo Petro promulgó en noviembre de 2022 una ley que permite al Gobierno negociar y desmovilizar a grupos armados ilegales ofreciéndoles beneficios judiciales. Esta política dada a conocer como la paz total, busca negociar con guerrillas, narcotraficantes y bandas criminales para poner fin a décadas de conflicto armado, de acuerdo con la legislación. Sin embargo, enfrentan la resistencia de grupos como el ELN y el Clan del Golfo, los cuales a pesar de hostiles negociaciones, continúan con actividades violentas.

Otro desafío considerable es la reparación a las víctimas del conflicto. La implementación de estas reparaciones ha sido lenta, lo que ha generado descontento y desconfianza en el proceso de paz. Sumado a eso, la administración de Petro debe abordar una reforma rural que busque hacer más productiva la tierra y enfrentar el problema de los cultivos ilícitos desde una perspectiva de salud pública.

Finalmente, Petro, como primer presidente de izquierda en Colombia, enfrenta una fuerte oposición política que cuestiona sus métodos y objetivos. Esta resistencia política incrementa la complejidad de implementar sus políticas de Paz Total.