Concejales le ponen la lupa a la Secretaría de Movilidad de Bogotá por contrato millonario en riesgo

Los cabildantes del Concejo de Bogotá Jesús Araque y Daniel Briceño exigieron acciones inmediatas en relación con el Sistema Fénix, un proyecto inicialmente dispuesto para modernizar los procesos y los trámites de la Secretaría Distrital de Movilidad.

Tras tres años de retrasos y solo un 67% de avance, el sistema, que tenía por objetivo mejorar la atención al ciudadano en trámites como la renovación de licencias y el pago de comparendos, se ha transformado en un símbolo de mala gestión y utilización ineficiente de recursos públicos. Según los cabildantes, los costos del proyecto han escalado de $9.000 millones a más de $13.000 millones sin que se haya completado su implementación.

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El contrato original fue adjudicado a Indra Colombia S.A.S. por $9.000 millones, pero debido a faltas en el cumplimiento del contratista, fue transferido a Data Tools S.A.S. tres días antes de su vencimiento, sin que se aplicaran sanciones a la primera empresa. La segunda empresa, en segundo lugar en la licitación, ha asumido la responsabilidad del proyecto, pero enfrenta numerosos problemas técnicos y atrasos.

La situación del Sistema Fénix despertó serias preocupaciones y derivó en dos adicionales al contrato inicial que han elevado su costo total a $13.380.000.000. A pesar de esas modificaciones, el proyecto no está completo y presenta múltiples fallas operativas.

Un potencial conflicto de intereses emerge con Data Tools S.A.S., que también tiene un contrato de $8.000 millones para el mantenimiento del sistema SICON PLUS, al que Fénix debía reemplazar. Para los voceros, la dualidad pone en duda la transparencia del proceso de adjudicación, llevando a que la Contraloría de Bogotá identificara presuntos hallazgos administrativos con incidencia fiscal, sugiriendo un detrimento patrimonial de más de $8.000 millones.

Según Briceño, “es necesario que la Secretaría de Movilidad aclare qué está pasando con este proyecto. La ciudadanía tiene derecho a saber por qué un software crucial se ha convertido en un pozo sin fondo”. Araque añadió que si bien la actual secretaria de Movilidad, Claudia Díaz, no es responsable del estado del contrato, tiene la obligación de intervenir para evitar más pérdidas de los recursos de los bogotanos.

Según datos oficiales de la Secretaría de Movilidad, el Sistema Fénix, busca revolucionar los procesos de gestión de infracciones y cobros coactivos con un enfoque moderno y eficiente. Esa interfaz se implementará alineada con las mejores prácticas internacionales en gerencia de proyectos, empleando metodologías ágiles de desarrollo de software.

El objetivo principal del sistema es diseñar y construir una plataforma tecnológica capaz de soportar y optimizar los procesos relacionados con las infracciones de tránsito y transporte. La plataforma incluirá herramientas como la automatización digital de procesos (DPA) y la orquestación de servicios, que se integrarán conforme a los requerimientos funcionales descritos en el anexo técnico del proyecto.

Para asegurar la calidad del software, se llevarán a cabo diversas pruebas, incluyendo pruebas unitarias, integrales y de estrés. Estas pruebas son esenciales para garantizar el correcto funcionamiento del nuevo software en el ambiente de producción. Además, se desplegará la plataforma en los entornos previamente definidos para su uso.

Un componente clave del Sistema Fénix es la capacitación de los usuarios. Se implementará una estrategia de formación para que los usuarios del nuevo sistema puedan manejar de manera eficiente las nuevas herramientas y procesos. La transferencia de conocimientos técnicos a la oficina de TIC de la Secretaría de Movilidad es otra parte crucial del proyecto. Esa transferencia garantizará que el personal técnico esté adecuadamente preparado para mantener y evolucionar el sistema.

El proyecto también contempla la actualización y estandarización de la documentación técnica de los desarrollos en el ambiente de producción. Ese paso asegura que toda la documentación necesaria esté al día y cumpla con los estándares requeridos para el correcto mantenimiento del sistema.

Finalmente, se procederá a la migración de la información existente relacionada con las contravenciones al nuevo software. Dicho procedimiento es vital para asegurar que todos los datos históricos y actuales se integren sin problemas en la nueva plataforma, permitiendo una continuidad en los procesos y operaciones.