Reportan nuevos combates en el corregimiento de El Plateado (Cauca)

Los enfrentamientos, al parecer entre las mismas disidencias de las Farc, provocó el confinamiento forzados de unas 150 familias

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(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

Durante la noche del sábado 31 de agosto, volvió a ser escenario de hostilidades armadas el corregimiento de El Plateado, del municipio de Argelia, en el occidente del departamento del Cauca.

De acuerdo con la información preliminar que conocieron en el informativo de televisión Noticias RCN, en zona rural de esa población se registraron combates, lo que provocó que la población se tuviera que confinar en sus hogares.

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Entre tanto en algunas de la cuentas, como Super Noticias 24/7, que publican información de ese territorio en el suroccidente de Colombia, señalaron que se trataría de un grupo insurgente, sin identificar y posiblemente de las estructuras disidentes de la extinta guerrilla de las Farc, cuyos miembros se estaban escudando en las viviendas de la zona, como dan cuenta los videos que publicaron del enfrentamiento.

Mientras que en Periódico Virtual, un portal regional de noticias del Cauca, indicaron que se trató de un combate entre dos frentes de las disidencias: el Carlos Patiño y el José María Becerra.

“Estábamos todo, en familia, en el parque cuando vimos que la gente empezó a correr, claro, ya se escucharon esa plomizas, qué me tocó hacer, ir por el carro, recoger a mi esposa e hijos para después refugiarme en la primera casa donde nos abrieron la puerta”, afirmó uno de los habitantes de la zona.

Agregaron en ese medio de comunicación local que se tiene un estimado de 150 familias que se tuvieron que confinar de manera forzada en el corregimiento, al quedar en medio de los disparos.

“Pensamos en no dormir, porque no sabemos a qué horas vienen a sacarnos de las casas, los más tensionante es ver llorar a los niños por el miedo que siente por las balaceras”, dijo uno los pobladores.

Y es que El plateado ha sido uno de los territorios más afectados por las acciones de los insurgentes, donde a finales de julio ocurrió una de las incursiones más graves, luego de que un niño de resultara muerto y seis personas más heridas, después de que guerrilleros de la estructura Carlos Patiño atacaran la única la cancha de fútbol sintético de la población con drones hechizos cargados con explosivos.

En esa ocasión, según informaron en la misma Fuerza Pública, los insurgente atacaron como retaliación por haberse negado a expulsar a los uniformados de la zona.

“Ante la negativa de la población civil de retirar a las tropas, en el día de hoy, a eso de las 9:20 de la noche colocan un dron sobre la cancha sintética que tiene el corregimiento y lanzan un explosivo donde al parecer tenemos seis civiles heridos y un menor de edad muerto”, afirmó en esa ocasión el general Federico Mejía, comandante Comando Específico del Cauca.

El Cauca sigue siendo un departamento duramente golpeado por las acciones armadas de los grupos armados organizados que se disputan las rentas ilegales como el narcotráfico o la minería ilegal, y se teme un recrudecimiento de la violencia ya que en la estructura que respondía al mando de Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, hubo una división y entraron en conflicto con Alexánder Díaz Mendoza ‘Calarcá'.

De hecho, el viernes de la semana pasada se conoció del trágico asesinato de Carlos Andrés Ascué Tumbo, un defensor de derechos humanos y miembro activo de la guardia indígena, informaron en La W Radio.

Ascué, quien se desempeñaba también como coordinador pedagógico en el consejo educativo del resguardo Pueblo Nuevo, había denunciado anteriormente haber recibido amenazas de muerte debido a su labor organizativa dentro de las comunidades indígenas. Estas amenazas, presumiblemente provenientes de grupos armados ilegales, se materializaron el día de su asesinato.

Lucio Güetio, autoridad indígena de Caldono, manifestó su profundo pesar por la pérdida de Ascué, subrayando que las amenazas que este joven líder había recibido se habían cumplido de la peor manera posible. Güetio indicó que el homicidio no solo constituye una pérdida irreparable para la comunidad, sino que también refleja la crítica situación de inseguridad que prevalece en la región.

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