Indígenas se tomaron una planta de gas en Santander: podría afectar la distribución en otros departamentos

Integrantes de la comunidad indígena u’wa han demandado al Gobierno cumplir compromisos de inversión social, tomándose la planta de gas de Gibraltar, en la zona rural del municipio de Toledo, Norte de Santander.

En la acción, unos quince operarios de Ecopetrol que estaban en las instalaciones fueron retenidos, impidiéndoles la salida y afectando las labores de la empresa petrolera en esta región.

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La toma de la planta de gas es una medida de presión por parte de la comunidad u’wa para exigir que se implementen los acuerdos de desarrollo social previamente pactados con las autoridades gubernamentales.

Esta protesta está ocurriendo en un momento crítico para la infraestructura energética del país. De acuerdo a la información del medio El Colombiano, la planta de Gibraltar, que suministra gas industrial y domiciliario a numerosos municipios en Santander, Antioquia y Norte de Santander, es fundamental para la seguridad energética de más de 500 mil usuarios. Este centro energético distribuye unos 38 millones de pies cúbicos diarios de gas natural.

El secretario de gobierno de Norte de Santander, Yony Peñaranda, declaró al medio Caracol Radio que estas reclamaciones, en su mayoría, corresponden a temas del gobierno nacional. Peñaranda añadió que la administración departamental ha mostrado su disposición al diálogo y ha enviado mensajes proponiendo la creación de mesas de trabajo para generar confianza y tranquilidad.

El gobierno nacional ha realizado tres puestos de mando unificado con la participación de diferentes carteras, como el Ministerio del Interior y el Ministerio de Defensa, así como Ecopetrol, en un esfuerzo por encontrar una solución a la situación.

El medio mencionado reporta que los indígenas u’wa han despojado de radios y algunas armas a los militares del Ejército nacional que brindaban seguridad a esta infraestructura.

En videos que se publicaron en redes sociales de la toma de la planta de gas de Gibraltar, un portavoz de los indígenas u’wa comunicó que se tomaron las instalaciones por los acuerdos con el presidente Gustavo Petro. “Este gobierno, supuestamente es el del cambio, desafortunadamente no hemos visto ningún cambio en nuestros territorios”, declaró el vocero. Además, ratificó que con los mandatos pasados se habrían logrado algunas negociaciones, pero no ha sucedido lo mismo con el gobierno actual.

“Como ustedes pueden ver, ya estamos posicionados sobre la planta, ya se cerró con todas las medidas de seguridad y los protocolos que se manejan, dijo uno los indígenas. Además, afirma que no se retuvieron operadores de la planta: “No estamos aquí para atropellarlos a ustedes ni para vulnerar sus derechos, tampoco vamos a obligar a que estén en este espacio, el que quiera irse puede irse.”

Los indígenas u’wa advierten que no se irán de la planta de gas de Gibraltar hasta que el Gobierno no se apersone de las problemáticas que presenta la comunidad en los diferentes terrritorios donde habitan.

Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas, ha manifestado que Colombia no enfrentará un racionamiento de gas natural gracias a la infraestructura nacional existente para importar el hidrocarburo. Según explicó en su visita a Barranquilla, esta capacidad de importación asegura la seguridad energética del país.

No obstante, Murgas puntualiza la necesidad de activar todas las fuentes posibles de gas, tanto locales como externas, para evitar dependencia en una sola fuente. Destacó que la falta de desarrollo de yacimientos no convencionales ha influido en la situación actual y advirtió la importancia de firmar contratos dentro de una industria cuya inversión opera a largo plazo.

La ausencia de nuevos contratos, según ella, aleja la inversión necesaria para incrementar la actividad exploratoria en Colombia.

Además, Murgas señaló que es indispensable aumentar la actividad exploratoria para incrementar las reservas de gas y lograr autosuficiencia energética, que hoy día se está perdiendo. Indicó que el anuncio de no suscribir nuevos contratos aleja la inversión que Colombia requiere para dicha exploración, y que esta falta de inversión se reorienta hacia países vecinos.