Por la ladera del barrio Villa Sofía, en el norte de Medellín, el miércoles 28 de agosto, fueron visto bajando dos jóvenes desnudos que minutos antes habían intentado robar a un domiciliario montaña arriba.
Así quedó registrado en un video denuncia con el que los habitantes del sector intentaron prevenir a otros trabajadores en la capital de Antioquia.
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Aprovechándose de su aspecto juvenil y utilizando un uniforme de colegio, lograron acercarse a su víctima sin levantar sospecha y, luego, intimidarla para tomar sus objetos de valor.
De acuerdo con la grabación, difundida a través de las redes sociales, su víctima alcanzó a alertar a los vecinos de Villa Sofía, quienes salieron para ayudarlo y lograron capturar a ambos señalados.
A ninguno, sin embargo, se le ven moretones en el cuerpo o señales de haber sido golpeados; lo que “redujo” su castigo a ser desnudados para luego tomar las esclareas de un sendero peatonal y llegar a una de las vías principales de la ciudad.
En redes, habitantes de la capital antioqueña se mostraron de acuerdo con el castigo e, incluso, insistieron que “falto la tradicional golpiza” que se les da a los ladrones cuando son atrapados por la comunidad en la que estuvieron haciendo de las suyas, con todo y que, de acuerdo con el penalista Ricardo Burgos y sus declaraciones entregadas a Citytv no es algo que permita la Ley en Colombia:
“Lo que permite la ley colombiana es capturar a la persona que presuntamente cometió un delito y llevarla ante las autoridades competentes. Nada de golpearlos hasta casi matarlos o quemar los vehículos en los cuales están transitando”.
Y es que en situaciones similares, al intentar “ajusticiar” a delincuentes, ciudadanos se han visto envueltos en investigaciones, a pesar de que intentaban ponerle un pare a la inseguridad, como sugiere el también penalista Iván Javier Mojica Rozo:
“Aunque hacer un seguimiento a las cifras de linchamientos puede resultar complicado porque, según, ‘la policía rara vez hace un registro sistemático de estos hechos’, algunas evidencias nos permiten ver un aumento de estos casos, tanto en Colombia como en América Latina. Una de las representaciones más comunes, y a la vez más peligrosas de este fenómeno, es el acto del linchamiento, el cual ha llegado a dejar hasta 140 muertes en un año”.
Otros dos jóvenes recibieron el mismo castigo en Bogotá tras apuñalar a un conductor de vehículo particular al que intentaron atracar
Dos menores de edad fueron capturados y agredidos por la comunidad en el barrio Timiza, en el sur de Bogotá, la noche del lunes 12 de agosto. Los adolescentes fueron sorprendidos presuntamente intentando robar un vehículo Chevrolet, lo que desencadenó un violento acto de justicia por propia mano por parte de los residentes de la zona.
Según se observa en los videos difundidos en las redes sociales, la víctima del intento de robo fue herida con una puñalada en la pierna derecha al resistirse al asalto. Este forcejeo alertó a los vecinos, quienes rápidamente intervinieron.
Los residentes lograron rodear y capturar a los menores. En lugar de esperar a las autoridades, los agresores desnudaron a los adolescentes y los golpearon, mientras los interrogaron, acción que también quedó registrada en las grabaciones compartidas.
Cuando la Policía llegó al lugar de los hechos, encontró a los jóvenes desnudos y sometidos por la multitud. Los oficiales, a su llegada, tuvieron que intervenir para proteger a los menores y trasladarlos en una camioneta a la estación policial.
A pesar de las negaciones constantes de los adolescentes acerca de su participación en el robo, las grabaciones muestran que estaban a pocos pasos de la víctima, quien los identificó como los responsables del ataque.
“Hay que darles una lección porque vienen acostumbrados a salir para delinquir y quedar en total impunidad”, “Falto pata, salieron muy sanitos”, “No se perdona edad ni género. Bien por la comunidad”, “Más duro a la próxima”, “No les hicieron nada”, se lee en algunas de las reacciones al video de su “castigo” en redes sociales.