Presidente del Senado, Efraín Cepeda, pidió reforzar las medidas de seguridad en el Congreso: restringirán el ingreso de personas al capitolio

Luego de que la fuerza pública incautara un cargamento de explosivos en una bodega del barrio Mochuelo, en la localidad de Ciudad Bolívar, en el sur de Bogotá, que presuntamente iban a ser usados en un atentado al Palacio de Justicia, varias edificaciones aledañas no bajan la guardia y anunciaron nuevas medidas de seguridad.

Así lo confirmó Efraín Cepeda, presidente del Senado, luego de sostener una reunión con voceros de los partidos políticos, junto con el director de la Policía, general William Salamanca, en la que los congresistas manifestaron su preocupación ante la amenaza que recibieron las altas cortes.

“Muchos de ustedes se han expresado sobre la situación de seguridad del Senado, avivada por aquel descubrimiento que se hizo en una casa aledaña de una maqueta del Palacio de Justicia con unos explosivos”, expresó Cepeda durante la plenaria del martes 27 de agosto de 2024.

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El presidente del Senado indicó que, una vez se conoció el caso de amenaza al Palacio de Justicia, la mesa directiva pidió que se revisaran las medidas de seguridad para evitar cualquier acto de violencia contra el recinto de la democracia.

“Dejaron algunas recomendaciones y algunas acciones. La cultura de seguridad. La Policía Nacional quiere que los congresistas, y en particular los senadores, pensemos todos los días en materia de seguridad. Ponen como ejemplo el tema de domicilios que entran al Senado de la República. Creo que hay que modularlos de alguna manera”, explicó el congresista.

Igualmente, Efraín Cepeda indicó que a diario cinco mil personas ingresan al Congreso de la República, pero llamó a los congresistas para que revisen sobre las personas que autorizan su ingreso al Capitolio.

“Cuando una persona entra al Congreso de la República, autorizada por la oficina de un senador, aparece el nombre del senador que está autorizando. Pero hay muchas oficinas que generan la entrada a algunas personas y no aparece el nombre de quién autoriza. De manera que los senadores sí tenemos que hacernos responsables con nuestro nombre, como debe ser, pero muchos funcionarios se arropan en la sección donde trabajan para permitir la entrada”, expresó.

Ante ello, la primera medida ordenada por el presidente del Senado fue limitar el número de funcionarios por congresista que entrarían al Congreso, al denunciar que estarían ingresando “funcionarios desconocidos” con autorización de los congresistas o funcionarios de las dependencias del legislativo.

“Las entradas al Senado no pueden ser agendadas por cualquier funcionario, sino por los jefes. Secretaría General, Subsecretaría General, Dirección Administrativa. Estamos estudiando qué funcionarios necesitan intervenir y con su nombre asumen la responsabilidad de la entrada”, dijo Cepeda.

De igual manera, el congresista del Partido Conservador se refirió al papel que desempeñará la Policía nacional en referencia a la seguridad de los senadores y representantes, sea en Bogotá o en las regiones del país.

“Va a poner acá en el Senado dos analistas de datos de estudios de seguridad. Va a hacer una nueva evaluación de todos los congresistas, tanto la seguridad de ellos en Bogotá como en sus territorios y sus desplazamientos. Expresaron que donde encuentren que tienen que reforzar la seguridad, lo harán”, mencionó.

Finalmente, el presidente del Senado, Efraín Cepeda, resaltó que un dron de las autoridades estará recorriendo los alrededores del Congreso, un sitio donde se encuentran la Casa de Nariño, el Palacio Liévano y el Palacio de Justicia.

La reunión también contó con la participación de la jefa de seguridad de la Casa de Nariño, ya que la Policía “está asegurando como un todo estas instituciones públicas”.

Según la investigación de la Policía, el hallazgo incluyó una maqueta que aparentemente replica las instalaciones del Palacio de Justicia, así como sesenta cartuchos calibre 5.56 mm, 16 paquetes de explosivo R1 y un chaleco arnés de uso militar.

A su vez, revela que dos individuos, cuya identidad está siendo verificada, arrendaron la bodega el jueves 8 de agosto, por doscientos mil pesos y las fotocopias de sus cédulas como garantía.

Los investigadores también están verificando el vínculo con el tráfico de estupefacientes, ya que se ha reportado que cuatro personas (dos mujeres y dos hombres, uno de ellos menor de edad) podrían estar involucradas. Tras conocerse la alerta por la potencial amenaza, la Corte Suprema de Justicia de Colombia adoptó medidas extremas de seguridad.