Juan Fernando Petro, hermano del presidente de la República, Gustavo Petro, volvió a estar en el centro de la polémica. Esta vez, el motivo es una controversia desatada en un reconocido centro de estética en Chía, donde su esposa, Beth Levy Bethel, se sometió a un procedimiento de cejas que no cumplió con sus expectativas.
Un audio revelado por W Radio evidencia a Juan Fernando Petro utilizando su cercanía con el poder presidencial para reclamar al establecimiento, al generar un nuevo episodio de ‘usted no sabe quién soy yo’ en su ya polémica trayectoria.
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De acuerdo con el medio citado, el incidente ocurrió cuando Beth Levy Bethel acudió a un centro de estética para realizarse un procedimiento de cejas. El lugar, parte de una cadena con varias franquicias en Bogotá, fue el escenario donde se originó el conflicto. Según fuentes del establecimiento, la esposa de Juan Fernando Petro fue informada detalladamente sobre los riesgos y resultados del procedimiento antes de firmar un consentimiento. Durante el proceso, que no implicaba sedación, la cuñada del jefe de Estado permaneció consciente y observó cada paso del procedimiento, al que accedió voluntariamente.
Sin embargo, tras finalizar el diseño de cejas y pagar más de 500.000 pesos, Bethel regresó al establecimiento visiblemente molesta. De acuerdo con el relato de los dueños del local y que tuvo acceso el medio citado, la esposa del hermano del presidente expresó su insatisfacción de manera airada, afirmando que las cejas no quedaron como ella deseaba, protagonizando la famosa frase ‘usted no sabe quién soy yo’.
En un mensaje de voz enviado por la propia Beth Levy Bethel, se escucha: “Es que no importa las fotos, lo que importa es la que el cliente se sienta feliz con su procedimiento. Si usted se va a fijar en las fotos (...) las fotos no hablan, quien habla soy yo. Soy yo quien se debe sentir muy bien con el proceso que le habían realizado y no estoy pagando tres pesos por un proceso que yo quería y vi desde el principio, le dije a ella cómo quería que quedara”.
El incidente escaló cuando Juan Fernando Petro, en un audio enviado al mismo centro de estética, expresó su inconformidad con el servicio recibido por su esposa: “Hoy estuvo una cliente que se llama Beth Levy Bethel arreglándose las cejas allá, ella advirtió desde un comienzo que quería un arreglo de cejas en particular, pero ustedes hicieron un trabajo completamente diferente y un mal trabajo con respecto a lo que ella, realmente, quería”, manifestó Petro.
Añadió: “Por lo tanto, yo voy a poner una queja al lugar. Yo soy Juan Fernando Petro, esposo de Beth Levy Bethel y hermano del presidente de la República. Esto sonará muy pretencioso, pero no es posible que ustedes hagan un trabajo tan mal hecho, que el cliente no quede satisfecho, desde un comienzo advertido que por ahí no era y aún hicieron el trabajo que no se quería hacer”.
Este nuevo episodio provocó controversia no solo por el reclamo en sí, sino por el hecho de que Juan Fernando Petro utilice su parentesco con el presidente para hacer presión sobre un asunto personal. Aunque cualquier ciudadano tiene el derecho de expresar su insatisfacción con un servicio recibido, la utilización del nombre del presidente Gustavo Petro por parte de su hermano levantó cuestionamientos sobre el límite entre la vida privada y el aprovechamiento de influencias políticas.
Este incidente se suma a una serie de controversias que rodearon a Juan Fernando Petro desde que su hermano asumió la presidencia. Cabe recordar que, a pesar de no tener ningún cargo público ni funciones oficiales, Juan Fernando Petro fue beneficiario de un pasaporte diplomático, documento que le fue expedido por el Ministerio de Relaciones Exteriores el 13 de octubre de 2022, dos meses después de la posesión de Gustavo Petro como presidente.
Este pasaporte, que tiene vigencia hasta el 15 de enero de 2025, es el mismo que utilizan altos funcionarios del Estado, permitiéndole pasar varios controles de seguridad sin que sus pertenencias sean revisadas, de acuerdo con varios medios de comunicación.
El uso del pasaporte diplomático ha sido motivo de críticas, especialmente porque Juan Fernando Petro ha sido vinculado a varias controversias legales, incluida su supuesta participación en reuniones con narcotraficantes en proceso de extradición a Estados Unidos, en lo que se ha denominado el “Pacto de la Picota”. Este asunto es actualmente objeto de investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación.