La reciente polémica en torno a la ministra de la Igualdad, la vicepresidenta Francia Márquez, puso nuevamente el foco en la gestión de su cartera. La situación se agravó tras la falta de entrega oportuna del presupuesto del 2024 para el Ministerio de la Igualdad a la Comisión Primera de la Cámara, la respuesta de la jefa de cartera a esta omisión y el posterior pronunciamiento de la representante a la Cámara Catherine Juvinao, del partido Alianza Verde, intensificaron el debate.
Según los datos más recientes, revelado por el diario El Tiempo, el Ministerio de la Igualdad presenta una ejecución de apenas el 1,24% del presupuesto asignado para la vigencia actual, un indicativo de la ineficacia en la utilización de los recursos.
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El reporte de la fuente citada destaca que, aunque el sector de Igualdad y Equidad en su conjunto muestra una ejecución del 43,17%, esta cifra es en gran parte impulsada por las entidades adscritas al ministerio, como el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), el Instituto Nacional para Sordos (Insor) y el Instituto Nacional para Ciegos (Inci), que tienen ejecuciones significativamente más altas (50,12%, 47,28% y 45,94% respectivamente).
Ante esta noticia, la crítica de la congresista Cathy Juvinao se centró en la baja ejecución del presupuesto del Ministerio de la Igualdad, a pesar de los recursos significativos asignados. En un comentario en la red social X, la legisladora cuestionó la eficiencia del ministerio y acusó a Márquez de victimización.
“La respuesta de la vicepresidenta al email que rebotó ya es anécdota. Lo realmente grave aquí es la casi nula ejecución de su ministerio, cuando han tenido más de $2 BILLONES en sus primeros dos años. En lugar de responder, se victimizan. La gente NO les va a comer cuento”, dijo la legisladora en su publicación.
El mensaje de la congresista generó numerosos comentarios negativos, no solo en relación con el presupuesto del ministerio de Francia Márquez, sino por las mismas declaraciones de Juvinao. Muchos señalaron que su cambio de postura frente al Gobierno la hacía ver hipócrita, lo que provocó críticas adicionales hacia su persona.
El poco avance del Ministerio de la Igualdad: programas en marcha
El Ministerio de la Igualdad, liderado por la vicepresidenta Francia Márquez, ha sido objeto de atención por los avances y desafíos en la implementación de sus programas clave. Uno de los proyectos más destacados es el programa Jóvenes en Paz, que provocó controversia desde su lanzamiento por parte del presidente Gustavo Petro, que lo presentó bajo la premisa de “pagar para no matar”. No obstante, el programa busca la inclusión de jóvenes a través de la educación, el emprendimiento y ayudas monetarias.
El programa Jóvenes en Paz está diseñado para beneficiar a 100.000 jóvenes en todo el país. En su primera fase, que se desarrolla en Medellín, Bogotá, Quibdó, Buenaventura, Guachené y Puerto Tejada, se priorizó a 6.360 jóvenes. Hasta ahora, 3.865 jóvenes firmaron acuerdos para participar, de los cuales 2.989 ya están en la fase de permanencia. El componente de ayudas monetarias, que fue el más polémico, ha visto la entrega de 3.434 transferencias a 1.724 jóvenes, sumando más de 3.034 millones de pesos, de acuerdo con la fuente mencionada.
Es importante destacar que estas ayudas no se reflejan en la ejecución presupuestal del Ministerio, ya que la primera cohorte está vinculada a Prosperidad Social. Sin embargo, el Ministerio suscrito un contrato por más de 137.000 millones de pesos para expandir el programa a 83 municipios, con el objetivo de llegar a 49.920 jóvenes adicionales.
Otro de los programas en ejecución por el Ministerio de la Igualdad es el Sistema Nacional de Cuidado, que actualmente se encuentra en fase de reglamentación y desarrollo de políticas a través del documento Conpes. Este sistema busca establecer un aspecto integral para el cuidado, apoyando a las personas en situación de vulnerabilidad.
El programa Hambre Cero es otra de las iniciativas centrales de la cartera, con acciones enfocadas en transferencias monetarias, provisión directa de alimentos, fortalecimiento de los sistemas productivos alimentarios locales y mejora de los sistemas de abastos. Hasta el momento, se ha avanzado en la reglamentación necesaria para coordinar a 15 entidades en la creación del Sistema Nacional de Garantía Progresiva del Derecho a la Alimentación.
Además, estructuraron programas de provisión de alimentos y preparación de mercados campesinos, entre otras acciones.
Otros proyectos como Agua Es Vida también mostraron progreso, aunque varios de estos esfuerzos se vieron afectados por recortes presupuestales, lo que puso en suspenso varias iniciativas. El balance general del Ministerio de la Igualdad muestra avances, pero también desafíos significativos en su implementación.
La representante Jennifer Pedraza, durante una sesión del miércoles 21 de agosto, expresó su preocupación por el ritmo de ejecución de estos programas, advirtiendo que de no mejorar los resultados, el futuro del ministerio podría verse comprometido.