El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) publicó los datos del crecimiento económico de Colombia durante el segundo trimestre del 2024, la cual registró un incremento del 2,1 por ciento, lo que corresponde a un 0,4 por ciento mayor que el reportado en el mismo periodo durante el año anterior.
No obstante, algunos expertos y sectores económicos del país consideran que, pese a este avance, las medidas del Gobierno de Gustavo Petro deben ir más allá, tal como lo mencionó el exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, que invitó al gabinete presidencial para que brinden señales para garantizar mayor confianza al sector privado del territorio nacional.
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Inicialmente, Ocampo, en su columna de opinión publicada en El Tiempo, indicó que, de continuar con esta senda, el crecimiento de la economía podría estar por encima de los pronósticos de los analistas y organizaciones internacionales para este año.
“Estos datos muestran que la economía tuvo su peor desempeño en el tercer trimestre del año pasado y desde entonces ha mostrado una reactivación modesta. Con base en esta información, el crecimiento anual del Producto Interno Bruto (PIB) puede ser cercano al 2 por ciento en 2024 y al 3 por ciento el próximo año”, escribió el exministro en el medio de comunicación.
A su vez, manifestó que “una de las características de este crecimiento económico en el país es su diversidad sectorial. Sobresalen el sector agropecuario y la administración pública. Hay también una expansión moderada del sector financiero, de la construcción y del comercio”, resaltando que estos dos últimos “muestran cifras positivas después de varios trimestres con registros negativos”.
Sin embargo, mostró su preocupación ante el decrecimiento de la industria manufacturera, la producción minera y las exportaciones comerciales, por lo que sostuvo que tiene relación con algunas políticas adaptadas por el Gobierno Petro. “El valor de las exportaciones disminuyó un poco por los menores precios internacionales de algunos productos, especialmente del carbón”, comentó.
Tres puntos clave para la reactivación económica
El exfuncionario del Gobierno Petro también señaló que aunque “la inversión muestra tres trimestres de aumentos modestos, cuando se ajustan por factores estacionales (...) continúa siendo muy baja, apenas un 15 por ciento del PIB”, a lo que envió un mensaje a la Presidencia para que anuncie cómo abordarán la reactivación de la economía del país, teniendo en cuenta que el presidente ha mencionado dos propuestas para lograr este aspecto como la reducción de la tasa de tributación de las empresas y las inversiones forzosas del sector financiero.
“Sobresale la falta de mención de políticas para reactivar la inversión y acelerar el crecimiento de las exportaciones no tradicionales (...) dos de sus elementos anunciados han sido objeto de fuertes críticas, y hay un tercero que debe ser parte de la agenda”, mencionó Ocampo.
Frente a la reducción de la tasa de tributación, el exministro aclaró que “podría ser conveniente, pero no hay forma de compensar su costo en una coyuntura fiscal crítica”. En cuanto a las inversiones forzosas, propuesta que generó gran controversia en Colombia, Ocampo señaló que es un instrumento no viable para el momento del país, por lo que recomienda “utilizar el Grupo Bicentenario, que agrupa a las entidades financieras del sector público, y hacerlo en coordinación con el Pacto por el Crédito que ha propuesto el sector financiero”.
No obstante, el exjefe de cartera de Hacienda comentó que un tercer punto clave para lograr la reactivación económica en el país es el apoyo decidido del Gobierno a la inversión privada, a lo que resaltó que este debe tener toda la disposición de los funcionarios y los representantes del gremio económico.
“Para ello es esencial que el Gobierno dé señales claras de que confía en el aporte del sector privado al desarrollo del país y mantiene normas que promueven la inversión, entre ellas las reglas para las concesiones de infraestructura y para las tarifas de servicios públicos, dos sectores en los cuales la inversión privada ha sido muy importante. Exige además agilidad y flexibilidad en la aprobación de licencias ambientales”, puntualizó.