Infortunadamente, la violencia en Cali sigue siendo un mal que permea la ciudad. Los esfuerzos de la administración de Alejandro Éder no parecen ser suficientes para contrarrestar los homicidios, riñas, hurtos y demás delitos en los que muchos menores de edad mantienen rodeados.
De hecho, en el oriente de la Sucursal del cielo está surgiendo una dinámica de violencia entre jóvenes llamada “guireo” o “chacaleo”, que consiste en que dos grupos de niños, niñas, adolescentes y jóvenes, entre los 8 y 20 años, se citan en un sitio específico de la ciudad, principalmente en el oriente, para lanzarse piedras, palos, o en el peor de los casos, con machetes y diferentes armas cortopunzantes se atacan.
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“El ‘guireo’ comenzó a recrudecerse en Petecuy hace aproximadamente un año y medio. Son galladas de niños y jóvenes que se enfrentan por, entre comillas, cuestiones de honor: quiénes son los dueños de una cancha, de un parque, de una cuadra. Es una práctica de niños peligrosa que ha vuelto a levantar fronteras invisibles en el territorio”, explicó Gustavo Andrés Gutiérrez, director de la biblioteca itinerante Biblioguetto en entrevista con El País de Cali, en 2023.
A propósito de esta peligrosa práctica, el miércoles 21 de agosto se conoció el reporte de la muerte de dos jóvenes, de 18 y 19 años, en medio de estos enfrentamientos violentos, en la que, esta vez, se habría hecho uso de armas de fuego.
Los hechos se presentaron hacia las 9:30 p. m. en el polideportivo de Pízamos III, sitio que dejó de ser utilizado para actividades deportivas y se convirtió en el punto de encuentro para este tipo de peleas.
“Esta es la crónica de una muerte anunciada. Todos los santos días hay enfrentamientos aquí en el polideportivo, güireo entre los muchachos de Pízamos, Potrero Grande, La Orquídea, Comuna 21 y Comuna 14, a las 6:00 p. m., 9:00 p. m., 10:00 p. m.”, contó un líder comunitario del sector al medio citado, que ha sido testigo de los enfrentamientos sin que haya una intervención efectiva de las autoridades.
Según el testimonio del líder, en medio de la pelea se escucharon varios tiros, hiriendo gravemente a uno de ellos. Lo llevaron al Hospital Carlos Holmes Trujillo, donde murió horas más tarde.
“Estas muertes no habían ocurrido, pero como no hay control iban a pasar en algún momento. Ellos estaban enfrentándose cuando de un momento a otro sonaron unos disparos, uno de los muchachos salió herido y lo llevaron en una motocicleta para el Hospital Carlos Holmes Trujillo, pero al rato falleció”, complementó al medio reseñado.
Pero la pelea no habría quedado ahí, según expuso el líder, luego de una hora de ocurrido el hecho violento, se formó una nueva trifulca en el mismo sitio, donde otro joven habría resultado herido y posteriormente murió. “Además, también hay un apuñalado, menores con cabezas rotas y lastimosamente esta situación se viene presentando todos los días”, lamentó el líder.
Según relatan los habitantes del sector, abrumados por la situación, las rondas e intentos de la Policía por detener estos hechos, ni las mesas de trabajo con la administración de la ciudad han sido suficientes para detener la violencia que está creciendo como una bola de nieve en este punto neurálgico de la ciudad, donde en muchos de sus barrios impera la pobreza y falta de oportunidades.
“Desde hace rato venimos haciendo el llamado a la alcaldía, ya que estos jóvenes necesitan intervención social y oportunidades porque no tienen nada qué hacer. La Policía viene haciendo su trabajo porque llamamos al cuadrante y ellos llegan, pero los muchachos no le hacen caso al cuadrante, antes los encienden a piedra y como la mayoría son menores de edad toca esperar a que llegue el Bienestar Familiar”, apuntó el líder comunitario al medio citado.
De acuerdo con el subsecretario de Política de Seguridad, Álvaro José Pretel, desde la Alcaldía de Cali se han implementado programas de empleabilidad y proyectos productivos para alejar a los jóvenes de la violencia. “Desde la Alcaldía tenemos un programa de prevención social de violencia, el cual está enfocado a fortalecer a 1800 jóvenes de la ciudad para que ellos puedan realizar un proyecto de vida enmarcado en la legalidad”, apuntó a El País.