Así proponen erradicar todas las formas de acoso escolar en los colegios de Bogotá, ante alarmantes incrementos

El alarmante incremento del acoso escolar en Bogotá ha movilizado a las autoridades locales para enfrentar una crisis que afecta gravemente a niños y adolescentes en toda la capital colombiana. Según datos presentados por la Secretaría de Educación, entre 2020 y 2023, los casos de bullying entre adolescentes de 12 a 17 años aumentaron un 674%, con un impacto también significativo en jóvenes adultos (616%) y en niños pequeños (566%).

Desde el recinto Los Comuneros, el Concejo de Bogotá señaló que localidades más afectadas son Ciudad Bolívar, Engativá, Kennedy y Suba, lo que refleja la complejidad de los factores comunitarios implicados. Los tipos de acoso más reportados incluyen hostigamiento generalizado (78,34%), discriminación por orientación sexual e identidad de género (17,56%), discriminación étnico-racial (3,18%) y xenofobia (0,92%).

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Además, se señaló que el problema del acoso escolar, que se manifiesta tanto en formas de violencia psicológica como física, perjudica directamente la salud mental y el rendimiento académico de los estudiantes. Aunque las escuelas son el principal terreno donde ocurren esos actos, las redes sociales y las rutas escolares también representan espacios de riesgo. Las consecuencias van desde la deserción escolar y el bajo rendimiento académico hasta las conductas autolesivas y el suicidio en los casos más extremos.

Frente a esa problemática, la cabildante Clara Lucía Sandoval, junto con otros 20 concejales, presentaron un proyecto de acuerdo con el fin de erradicar todas las formas de acoso escolar en las instituciones educativas de Bogotá. “El bullying en los colegios ocurre principalmente por aspecto físico, edad, condición socioeconómica, discapacidad y rendimiento académico”, subrayó Sandoval, que además destacó la necesidad de un abordaje integral.

El proyecto de acuerdo propone fortalecer los comités de convivencia escolar con una mayor participación de las familias, implementar la Alianza Familias-Escuela, actualizar los manuales de convivencia, promover canales de denuncia anónimos y fomentar una cultura de respeto en las escuelas. “Con el proyecto de acuerdo buscamos combatir el acoso escolar en los entornos escolares para que ningún menor, sin importar la forma de discriminación o el motivo, sea hostigado en su lugar de estudio”, recalcó el concejal Andrés Barrios.

Dentro de las medidas planteadas, la concejala Sandoval enfatizó que “todos los jóvenes merecen respeto y dignidad. Este proyecto de acuerdo busca garantizar un entorno escolar libre de bullying, construyendo una Bogotá más inclusiva y respetuosa, donde cada joven pueda desarrollarse plenamente sin temor a ser víctima de maltrato o discriminación”.

Simultáneamente, durante la presentación del proyecto de acuerdo, el cabildante Julián Sastoque reveló un preocupante aumento de los delitos sexuales en Bogotá durante 2024. Sastoque evidenció que los casos de delitos sexuales incrementaron en un 61.4% comparando el período de enero a julio de 2024 con el mismo lapso del año anterior. Frente a esa situación, insistió en que los esfuerzos de seguridad también deben centrarse en combatir estos delitos, además de la violencia intrafamiliar, que también está en aumento.

La preocupante denuncia la fundamentó gracias a datos oficiales en la Policía Nacional, que reportó que los incidentes en los que las víctimas fueron menores de edad crecieron un 73%, pasando de 508 casos entre enero y julio de 2023 a 883 en 2024. Asimismo, el número de víctimas adolescentes aumentó en un 74.11%, de 962 reportes en los primeros siete meses de 2023 a 1.675 en el mismo período de 2024.

A su vez, sumó que por localidades, algunos sectores de Bogotá muestran índices que requieren atención urgente. En Los Mártires, los casos de delitos sexuales subieron un 256%. En particular, los incidentes que involucraron a menores casi se quintuplicaron, aumentando de 20 a 96 casos.

Sastoque citó a la Administración distrital a un debate de control político para que explique las medidas que se están tomando para enfrentar este tipo de delitos. “La situación demanda una respuesta integral y coordinada de las autoridades locales, la Policía y otras entidades encargadas de la prevención y atención de estos casos”. Igualmente, subrayó la necesidad de fortalecer las estrategias de seguridad no solo para abordar los delitos comunes, sino también para tratar con urgencia la violencia de género y familiar.

Así lo hizo saber el concejal Andrés Barrios, quien denunció que de las 235 cámaras de seguridad instaladas en instituciones educativas con visualización externa, solo 86 están en funcionamiento. Lo anterior, exponiendo cada vez a que más jóvenes sean víctimas de diferentes delitos que se comente a los alrededores y al interior de los centros de formación básica de la capital.

De acuerdo con datos del sistema de alertas de la Secretaría de Educación de Bogotá se registró en 2023 un total de 6.431 casos de consumo de sustancias psicoactivas entre niños, niñas y adolescentes, una preocupante estadística que pone en evidencia la creciente problemática en las instituciones educativas de la ciudad. Ante dicha situación, el concejal Barrios solicitó a las autoridades distritales que adopten un plan de acción inmediato para abordar esa problemática.

El cabildante expresó su preocupación, destacando que localidades como Chapinero, Santa Fe y Kennedy no funciona ninguna cámara de videovigilancia, y los casos de La Candelaria, donde ni siquiera se han instalado. Según Barrios, ese déficit en la infraestructura de seguridad facilita la actividad de jíbaros que utilizan los entornos escolares para sus negocios ilícitos, poniendo en riesgo a menores de edad.

El concejal instó tanto a la Secretaría de Seguridad como a la entidad de Educación a trabajar coordinadamente para enfrentar esta crisis. De acuerdo con el vocero, 149 cámaras están fuera de servicio debido a la obsolescencia tecnológica, lo que impide actualizarlas o repararlas. “Tienen que ser renovadas y es deber de la administración distrital hacerlo”.

Además, presentó videos que evidencian el consumo de drogas en los entornos educativos y solicitó a la Secretaría de Educación que atienda las mesas de trabajo que se le convocan para impulsar una ‘Semana Distrital de Prevención al Consumo de Drogas’. “Estamos viendo a una Secretaría indolente, a la que pareciera no preocuparle el elevado consumo de sustancias psicoactivas por parte de menores de edad”.

Según el concejal, la Administración distrital debe enfocarse en resolver esta situación, activando las cámaras de seguridad y mejorando las medidas de prevención del consumo de drogas. Barrios aseguró que seguirá trabajando desde su curul para que la Semana de Prevención se haga realidad y para garantizar un entorno seguro para los estudiantes.