‘Bogotá sin hambre 2.0′: estos son los objetivos del nuevo programa del distrito para reducir la inseguridad alimentaria

El alcalde Carlos Fernando Galán anunció la implementación del programa ‘Bogotá Sin Hambre 2.0′, destinado a reducir significativamente la inseguridad alimentaria en la capital colombiana. Según explicó, la iniciativa busca disminuir a la mitad el índice de inseguridad alimentaria grave desde 2024 a 2027, objetivo que se traduce en pasar del 4,2% al 2,2% de la población afectada.

Para alcanzar dicha meta, el programa contempla un conjunto de acciones estratégicas, entre las cuales se destaca el aumento de las transferencias monetarias dirigidas a las personas que se encuentran en situación de pobreza extrema. Esas medidas se implementarán con un rigor y disciplina reconocida por el alcalde Galán, quien subrayó en su discurso que “nadie en Bogotá debe acostarse a dormir con hambre, porque eso también es una forma de violencia”.

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Otro punto clave de ‘Bogotá Sin Hambre 2.0′ es el fortalecimiento de servicios sociales. Ese apartado incluye la mejora y expansión de los Comedores Comunitarios, donde personas de escasos recursos pueden acceder a alimentos nutritivos de manera gratuita o a bajo costo. También se contempla el aumento en la disponibilidad de alimentos mediante la apertura de nuevos espacios de comercialización, incluyendo ferias locales y mercados campesinos.

El programa también da un lugar destacado a la mejora del Plan de Alimentación Escolar (PAE) en los colegios públicos, asegurando que los niños reciban comidas de calidad durante su jornada educativa. Esto se complementa con alianzas con el sector privado, comunitario y campesino, que son esenciales para implementar estas acciones.

La inversión necesaria para lograr los objetivos asciende a 4,6 billones de pesos durante el cuatrienio. Según informó el alcalde, de ese montante, 3,6 billones se destinarán al PAE, mientras que más de 981.000 millones se dirigirán al bienestar alimentario en general. Además, 1,6 billones de pesos se asignarán a las transferencias monetarias bajo el esquema de Ingreso Mínimo Garantizado.

Para la Administración distrital, la iniciativa de ‘Bogotá Sin Hambre 2.0′ no solo buscará atender la demanda creciente de alimentos entre las personas más necesitadas, sino también mejorar la oferta y distribución de estos productos para garantizar una mayor cobertura y eficiencia en la atención.

En cuanto a los objetivos que dispone poner en marcha la administración para mitigar el hambre en la capital, la iniciativa contempla lo siguiente. Más de 35.000 espacios de comercialización con mercados campesinos serán creados en Bogotá como parte del programa ‘Bogotá Sin Hambre 2.0′.

Lo anterior marcará un incremento del 12% en comparación con la administración anterior, y pretende mejorar tanto la oferta de alimentos en la ciudad como su distribución para asegurar una mayor cobertura y eficiencia en la atención de las necesidades alimentarias.

El programa apunta a fortalecer a 5.000 actores del sistema de abastecimiento y distribución alimentaria con soporte técnico y comercial. Esto se acompañará de la intervención de 17 plazas distritales de mercado para su embellecimiento y reforzamiento estructural, lo que permitirá un entorno más adecuado para la comercialización de alimentos.

La Secretaría de Integración Social liderará la respuesta a la demanda alimentaria de los habitantes más pobres y vulnerables de la ciudad. Parte de esta estrategia incluye el rediseño de todos los programas de transferencias del distrito bajo la iniciativa “Mejores transferencias, Más Bien-estar”. Este rediseño comenzó con la transición de bonos canjeables por alimentos a transferencias monetarias para 9.000 personas con discapacidad y más de 36.000 personas mayores.

El valor promedio de las transferencias destinadas a los hogares en situación de pobreza extrema aumentará. Según datos oficiales, para el 20 de agosto de 2024, 37.000 hogares que previamente recibían un promedio de $384.000 mensuales pasarán a recibir un promedio de $505.000.

Otro eje clave del programa será aumentar la atención a personas que asisten a servicios regulares de alimentación, quienes actualmente reciben raciones que cubren entre el 25% y el 100% de los requerimientos nutricionales diarios. Se espera que los beneficiarios aumenten de 924.494 a 982.249.

Se planea abrir y operar 50 nuevos comedores comunitarios, incrementando el total de 115 a 165. Para definir la ubicación de estos comedores, se utilizarán criterios de equidad y eficiencia, lo que también permitirá la entrada de nuevos operadores y un servicio más cercano a quienes lo necesitan. Los beneficiarios de estos comedores pasarán de 77.000 a 109.000 durante el cuatrienio.

Para mejorar el impacto y el alcance del programa, se establecerán alianzas con el sector privado y organizaciones comunitarias. Estas alianzas irán más allá de simples donaciones y buscarán desarrollar modelos operativos en cada uno de los canales.

La Secretaría de Educación se enfocará en garantizar la alimentación saludable al 100% de los estudiantes de colegios públicos distritales a través del Programa de Alimentación Escolar (PAE), el cual se propone servir 909.000 raciones de comida diariamente. Además, se incrementará al 55% el porcentaje de raciones de comida caliente que actualmente se entrega en colegios y se abrirán 30 nuevos comedores escolares, sumando un total de 242 en toda la ciudad.