El representante a la Cámara del Centro Democrático, Juan Espinal, anunció que presentará una denuncia contra el presidente Gustavo Petro debido a la reciente propuesta de inversiones forzosas del mandatario. Según Espinal, esta medida ha generado un “pánico económico” en el país, lo que podría tener graves consecuencias para la estabilidad financiera de Colombia.
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La propuesta de Petro en cuestión busca que los bancos destinen una parte de su cartera al otorgamiento de créditos a tasas de interés bajas en sectores estratégicos como infraestructura, turismo y energías renovables. Gustavo Petro argumenta que esta intervención estatal es crucial para corregir las fallas del mercado y asegurar que los recursos financieros lleguen a sectores tradicionalmente desatendidos por el sistema bancario.
Espinal, miembro del partido de oposición Centro Democrático, ha criticado drásticamente la propuesta, calificándola de “irresponsable” y “peligrosa”. Manifestó que presentará una denuncia formal contra Petro por generar pánico económico y poner en riesgo la estabilidad financiera del país.
En confirmación con Infobae, el representante Espinal declaró que: “es evidente que el presidente Gustavo Petro ha generado pánico económico, un presunto delito que está estipulado en nuestro ordenamiento penal, por las declaraciones que dio los últimos días sobre las inversiones forzosas. Esto pone en riesgo, el ahorro de los colombianos yo creo que el presidente Petro lo que quiere es que los colombianos retiren sus recursos, que están invertidos en los diferentes bancos, en sus cuentas de ahorros corrientes, para que estas se queden bajo del del colchón y seguramente la estrategia es debilitar a un sector que fundamental para la economía del país”.
Añadió que “el presidente Gustavo Petro siempre se muestra como enemigo de los empresarios de nuestro país, que generan oportunidades y riqueza. Ahora con esto, si bien la economía ha venido creciendo de manera mínima, estas declaraciones del presidente lo único que hacen es espantar la inversión generar un pánico interno sumado y, sumado a eso desea presentar una reforma tributaria que pondría, obviamente en riesgo, las inversiones y que atacaría de manera directa el bolsillo de todos los colombianos”.
Finalizó indicando que se debe revisar “¿cuántas personas han retirado sus ahorros de los bancos?”
Las propuestas de Petro
El presidente Gustavo Petro propuso una política de inversiones forzosas que obligará a los bancos a destinar una porción de su cartera para ofrecer créditos a tasas de interés bajas en sectores estratégicos como infraestructura, turismo y energías renovables. Esta iniciativa pretende reactivar la economía y fomentar el desarrollo en áreas clave del país.
Sin embargo, la propuesta no ha sido exenta de críticas. Expertos y gremios económicos estiman que podría distorsionar el mercado financiero, forzando a los bancos a financiar proyectos menos rentables en lugar de permitir que el flujo de capital se dirija a áreas de mayor rentabilidad. David Cubides, director de Investigaciones en Alianza Fiduciaria, advirtió que parte de los recursos provienen de las cuentas de ahorro de los ciudadanos, generando preocupación sobre la seguridad de estos fondos.
Además, el riesgo de que esta medida afecte la liquidez y la calidad crediticia de las instituciones financieras es motivo de alarma, ya que los recursos destinados a estos créditos podrían no generar los retornos previstos a largo plazo.
A pesar de las críticas, Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, ha defendido la política, calificándola como una estrategia temporal y justificada para canalizar recursos hacia sectores vitales para el desarrollo del país.
Los comentaristas del gremio de comerciantes Fenalco han expresado su inquietud acerca de la capacidad del gobierno para administrar eficientemente estos recursos, advirtiendo sobre los posibles riesgos de expropiación de los ahorros de los ciudadanos.
La propuesta de Petro ha generado un intenso debate en Colombia sobre su viabilidad y el posible impacto en el sistema financiero y la confianza de los inversionistas. La evolución de este debate será crucial para entender los efectos que esta política puede tener en la economía del país.