En las últimas horas, ha circulado en redes sociales una serie de imágenes que ha generado un fuerte rechazo entre usuarios preocupados por la conservación de la fauna marina. Las fotografías muestran a un grupo de pescadores en el municipio de Moñitos, Córdoba, posando con un ejemplar de pez marlín, también conocido como pez espada o pez vela, de casi 3 metros de largo que fue capturado durante la mañana del 16 de agosto.
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La publicación de las imágenes ha desencadenado una ola de críticas, especialmente en torno a la preservación de las especies marinas. Aunque el pez espada no está clasificado como una especie en peligro de extinción, algunas de sus poblaciones han sufrido una significativa presión debido a la sobrepesca, lo que ha motivado la indignación de los defensores de los derechos de los animales y ambientalistas.
Los pescadores, quienes celebraron la captura con múltiples fotografías, han sido objeto de duros comentarios en las redes sociales, donde se les ha señalado por no contribuir al cuidado de especies que, si bien no están amenazadas a nivel global, sí requieren una gestión sostenible para evitar su declive en ciertas regiones.
“¿Qué van a hacer con el pez muerto? ¿Qué sentido tiene exponer estos comportamientos con el hábitat natural de una especie, quizá, en vía de extinción? ¿Cuál es la moraleja? (SIC)”, “Cómo siempre destruir sin necesidad... Para qué lo mataron..?? Que plaga tan inmunda la humanidad..!! Extinción ya...!!! (SIC)”, “ No es extraordinario, solo es cruel, salvaje, despiadado y decadente. Ninguna de las 2 especies sale beneficiada, el pez muere y para los pescadores es una anecdota sin mayor ganancia (SIC)”, fueron algunos de los cuestionamientos que sobresalieron en X, red conocida anteriormente como Twitter.
Las acciones de los pescadores en Moñitos, Córdoba, han suscitado un fuerte debate en las redes sociales debido a su implicación en la sostenibilidad ambiental y el respeto por la vida marina. A primera vista, la captura de un pez marlín, una especie icónica por su tamaño y belleza, podría parecer un logro significativo. Sin embargo, el acto de posar con el pez y exhibirlo en fotografías ha sido ampliamente cuestionado por varias razones.
En primer lugar, aunque el pez marlín no se encuentra en peligro de extinción a nivel global, muchas de sus poblaciones locales están bajo presión debido a la sobrepesca. Estas especies son de vital importancia para el equilibrio de los ecosistemas marinos, y su captura indiscriminada puede alterar significativamente este equilibrio. Los marlines, al ser depredadores topes, juegan un papel crucial en mantener la salud y estabilidad de los océanos.
Además, la exhibición pública de este tipo de capturas promueve una cultura que celebra la caza de grandes especies marinas sin considerar las consecuencias ecológicas a largo plazo. Este tipo de acciones no solo perpetúan la idea de que estas capturas son un símbolo de éxito, sino que también desincentivan los esfuerzos globales para la conservación y el manejo sostenible de las especies marinas.
También ocurrió un caso en Cali donde los animales exóticos son víctimas de inescrupulosos. Las autoridades de Cali han alertado sobre el creciente tráfico de fauna silvestre, tras incautar carne de armadillo en un operativo conjunto entre el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente (Dagma) y la Policía Ambiental.
La carne, transportada ilegalmente, representa un grave riesgo para la salud pública, al estar asociada con la transmisión de lepra, una enfermedad zoonótica. Este caso subraya la urgencia de combatir el tráfico de especies, no solo para proteger el equilibrio ecológico, sino también para prevenir brotes de enfermedades. En lo que va del año, más de 1.900 animales silvestres han sido rescatados en situaciones similares en la región.