Los excongresistas Bernardo Miguel Elías, más conocido como el Ñoño Elías, y Musa Besaile, fueron capturados por instrucción de la Corte Suprema de Justicia, por el vínculo en el caso de tráfico de influencias en contratos del Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo (Fonade).
Sin embargo, W Radio reveló que el exsenador Besaile al parecer está poniendo trabas a la medida de aseguramiento ordenada por el alto tribunal. El citado medio precisa que la cárcel de Montería le pasó a la Corte Suprema de Justicia los cuestionamientos de la defensa del excongresista. Según la defensa, Besaile ya cuenta con libertad provisional con la cual estaba pagando la pena con casa por cárcel.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.
“Se nos informa cuál es la medida que debe cumplir el procesado Besaile Fayad, sin mencionar que existe una tercera condena, que revisada la cartilla biográfica, registra una libertad provisional otorgada”, precisa la petición revelada por W Radio.
Asimismo, precisan que el exsenador del Partido de la U fue condenado a una pena de 92 meses por concierto para delinquir, y que la orden de traslado fue emitida en el proceso 00612, que según la defensa, es el escándalo de Fonade.
Por tal razón, la defensa precisa que se tienen dos casos concretos, emitidas por dos jueces diferentes, la que otorga la prisión domiciliaria y la emitida por la Corte Suprema de Justicia.
Detalles del caso Fonade
El caso Fonade ha levantado numerosas sospechas de corrupción desde hace varios años, implicando a diversas figuras políticas en la malversación de fondos destinados a proyectos de desarrollo.
Los hechos por los que se recapturan los dos excongresistas, informó la Corte Suprema, ocurrieron entre el último semestre de 2016 y el segundo semestre de 2017. Durante ese período, Elías y Besaile utilizaron sus influencias políticas y su control sobre cuotas burocráticas en Fonade para adjudicarle un contrato de interventoría a su amigo Richard Kamal Nader Ordosgoistia. La Corte detalló que estos actos ilícitos tuvieron lugar cuando los exsenadores derivaron de manera indebida ventajas de sus posiciones.
Ambos exsenadores ya habían confesado y recibido condenas por su participación en el escándalo de Odebrecht. Los beneficios jurídicos les fueron otorgados en su momento por su cooperación con la justicia. Musa Besaile, quien cumplía una orden de detención domiciliaria, fue trasladado a una cárcel, mientras que Bernardo Miguel Elías ya habría sido recapturado.
Durante la presidencia de Juan Manuel Santos, los ñoños mantuvieron una relación privilegiada en el Congreso, proporcionando apoyo crucial para la reelección presidencial. Su influencia en la región de Córdoba era importante; lideraron campañas que, presuntamente, aseguraron votos esenciales para Santos. A cambio de su respaldo, recibieron acceso y control sobre entidades gubernamentales como Fonade, donde colocaron a varios de sus recomendados. Esta dependencia, ahora desmantelada, se convirtió en el epicentro de sus prácticas corruptas.
El escándalo de Odebrecht, que sacudió a múltiples países latinoamericanos, reveló una extensa red de sobornos y corrupción. La empresa constructora brasileña desembolsó sumas cuantiosas a cambio de influencias y contratos de obras públicas. En Colombia, esta trama involucró a funcionarios y políticos de alto nivel, incluidos los exsenadores cordobeses, quienes recibieron dinero para financiar campañas políticas.
De acuerdo con la Corte Suprema de Justicia, con esta acción se busca salvaguardar la integridad de las entidades públicas y dar un paso firme en la lucha contra la corrupción en el país.
La Corte Suprema de Justicia de Colombia dictó condenas significativas para dos exsenadores implicados en casos de corrupción relacionados con la contratación en el Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo (Fonade). La condena se puso en firme el 8 de febrero del 2024.
Musa Besaile fue sentenciado a dos años y medio de prisión por el delito de tráfico de influencias de servidor público. Además de la pena de cárcel, deberá pagar una multa de 68.33 salarios mínimos legales vigentes, y se le ha inhabilitado para el ejercicio de derechos y funciones públicas.
Por otro lado, Bernardo Miguel Elías Vidal, conocido como ‘Ñoño’ Elías, fue hallado culpable del mismo delito. Su condena asciende a tres años y medio de prisión, junto con una multa de 75.04 salarios mínimos legales vigentes. También se le ha inhabilitado por cuatro años para ocupar cargos públicos.