Ministro de Defensa pedirá perdón públicamente por falsos positivos en Antioquia

El Estado colombiano admitirá públicamente su responsabilidad en casos de ejecuciones extrajudiciales conocidas como falsos positivos este miércoles 14 de agosto en un acto de reconocimiento ante las familias de las víctimas.

El evento tendrá lugar en el museo Casa de la Memoria en Medellín y será presidido por el ministro de Defensa, Iván Velásquez, con la participación del comandante del Ejército Nacional, general Luis Emilio Cardozo.

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El acto de perdón público abordará la ejecución extrajudicial de más de treinta personas en el departamento de Antioquia, región que refleja la mayor cantidad de casos de falsos positivos en el país.

De los 6.402 casos documentados en Colombia por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) entre 2002 y 2008, 1.613 ocurrieron en Antioquia. Estas personas, presentadas falsamente como guerrilleros muertos en combate, serán reconocidas hoy, junto con el sufrimiento de sus familias.

El abogado Javier Villegas Posada, quien representa a las familias de 26 de las víctimas, destacó la importancia del acto para dignificar a quienes perdieron la vida. Sin embargo, criticó que aún persiste una falta de reparación económica completa por parte del Estado.

“De las 26 familias que represento, 17 han esperado más de seis años por la indemnización, lo que constituye una revictimización”, denunció Villegas, señalando también que la impunidad y la insuficiente reparación económica vulneran los derechos a la no repetición y la reparación integral.

“El Estado reconocerá su culpa en las gravísimas violaciones a los derechos humanos contra 35 antioqueños que murieron indefensos y fueron presentados como subversivos muertos en combate. Crímenes de lesa humanidad amparados por el manto de la impunidad que les otorga a los autores de estos execrables asesinatos el acogerse a la Jurisdicción Especial para la Paz”, agrego Villegas.

Desde el Ministerio de Defensa confirmaron que el acto de perdón será específicamente por los casos de más de treinta víctimas de falsos positivos, sin ofrecer detalles adicionales sobre la ceremonia.

Entre las víctimas que serán honradas y por quienes se pedirá perdón se encuentran nombres como Carlos Alberto Sepúlveda Sepúlveda, Javier Barrera Pino, Wilson Darío Murillo y Gustavo Adolfo Cardona Alzate, entre otros. Todas estas personas fueron presentadas falsamente como bajas en combate y señaladas incorrectamente de ser integrantes de grupos insurgentes.

El entorno del conflicto armado en Colombia se ha caracterizado por graves violaciones de los derechos humanos, agravadas por la impunidad que han sentido las familias de las víctimas. La ceremonia de hoy reconoce la necesidad de los actos de perdón para el proceso de sanación, aunque resalta que estos deben ir acompañados de acciones concretas de reparación y justicia.

Este acto de reconocimiento de responsabilidad es un paso significativo en la lucha por la verdad y la reparación en Colombia. A través de estos gestos, el Estado busca reconstruir la confianza con las comunidades afectadas y reafirmar su compromiso con los derechos humanos y la justicia.

El 10 de octubre de 2023, desde la Plaza de Bolívar, en Bogotá, el ministro de Defensa, Iván Vásquez, y el presidente Gustavo Petro presidieron un acto de conmemoración para rendir homenaje a las familias de los 19 jóvenes asesinados por el Ejército en el municipio de Soacha en 2008.

Durante el evento, el Estado colombiano pidió perdón a las madres de las víctimas de los denominados ‘falsos positivos’, crímenes que involucraron ejecuciones extrajudiciales presentadas falsamente como bajas guerrilleras. En palabras de Petro, “Ocultar es el camino para matar en Colombia”.

Los jóvenes, quienes tenían entre 16 y 25 años, fueron engañados con ofertas de trabajo y luego asesinados por miembros del Ejército colombiano en un contexto de intensos enfrentamientos entre el Estado y grupos guerrilleros.

Según datos de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), estos casos forman parte de los 6.402 ‘falsos positivos’ registrados en el país, aunque organizaciones civiles consideran que la cifra podría ser aún mayor. Estas ejecuciones eran presentadas como bajas en combate para inflar las estadísticas de guerrilleros abatidos, lo que facilitaba el acceso a premios y promociones militares.

Durante su intervención, el ministro Vásquez destacó la importancia de reconocer estos crímenes: “Para honrar sus memorias, para decirle a Colombia y al mundo que los 19 jóvenes no eran guerrilleros, no estaban realizando ninguna acción delictiva; eran hombres cuyas vidas, sueños e ilusiones se truncaron por la acción criminal de integrantes del Ejército nacional”. Esto fue un intento del gobierno de Gustavo Petro para reconocer públicamente la responsabilidad del Estado y contrarrestar años de negacionismo y ocultamiento de información.

El evento fue parte de un esfuerzo más amplio del gobierno colombiano por avanzar en la memoria histórica y la restauración del daño causado a las víctimas y sus familias. Petro enfatizó que la defensa de la patria no debe confundirse con la defensa de la codicia y que es fundamental admitir los errores del pasado para avanzar hacia una verdadera democracia y libertad.