En la tarde del martes 13 de agosto de 2024, el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá (Senafront) aprehendió a un ciudadano colombiano que circulaba por la provincia del Darién, zona fronteriza entre ambas naciones.
Según la información oficial, el sujeto intentaba ir al país centroamericano, pero cuando pasó por el sistema de perfilamiento y biometría, ubicado en el punto migratorio de Lajas Blancas, se detectó que tenía una orden de captura vigente de Interpol (Organización Internacional de Policía Criminal) por los delitos de concierto para delinquir agravado, homicidio agravado y tortura.
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Además, las autoridades panameñas sostuvieron que esta persona estaría vinculada con una subestructura del Ejército Gaitanista de Colombia (EGC) o Clan del Golfo, que tiene injerencia en Cartagena y municipios aledaños del departamento de Bolívar. “Esta persona presuntamente está relacionada con supuestos homicidios selectivos en la modalidad de sicariato”, informó Senafront en un comunicado.
Ahora, las autoridades de Panamá realizan las coordinaciones pertinentes para que el sujeto sea deportado a Colombia, con el fin de definir su situación judicial.
De igual forma, Senafront Panamá informó la captura de tres ciudadanos colombianos, cuando se movilizaban en un vehículo tipo sedán, y con el porte de un arma de fuego sin el permiso correspondiente, por lo que fue incautada por las autoridades centroamericanas.
Los detenidos fueron aprehendidos y dejados a disposición de las autoridades colombianas que definirán su situación ante la justicia.
Presunto colaborador del Clan del Golfo fue capturado en Ecuador
Además de estas capturas en territorio panameño, la Policía de Ecuador entregó a las autoridades colombianas a Cristian Alexander Mendoza Cali, conocido con el alias de Cristian Alexander M., presunto colaborador del Clan del Golfo en territorio peruano.
De acuerdo con el reporte oficial, la captura del sujeto se realizó en la provincia de El Oro, en la tarde del domingo 11 de agosto de 2024, durante un operativo conjunto entre la Policía de Colombia, junto con la fuerza pública de Ecuador y Perú.
Este sujeto estaba oculto en el país inca, debido a que tiene una orden de captura vigente en territorio colombiano por el delito de concierto para delinquir. Por ello, intentaba ingresar a Ecuador para mantenerse fuera del radar de la Policía. Sin embargo, durante su proceso de entrada, las autoridades lo detuvieron y, posteriormente, fue dejado a disposición de las autoridades de Colombia.
“Hasta el 2006 habría pertenecido a las autodefensas unidas de Colombia y actualmente sería integrante de una banda criminal que apoya en operaciones al Clan del Golfo”, señaló la Policía de Ecuador en un comunicado.
Así mismo, las autoridades ecuatorianas detallaron que Mendoza Cali había sido judicializado en 2018 por un caso por concierto para delinquir agravado, donde fue condenado a 48 meses de prisión. Sin embargo, al cumplir su sentencia, el sujeto se reintegró a las filas del Clan del Golfo para ejecutar sus acciones criminales en Perú.
Este es el segundo integrante del Clan del Golfo que es deportado a Colombia, proveniente de Ecuador, ya que en noviembre del año anterior, se reportó la captura de alias Mister Black o Cartagena, señalado de ser uno de los principales articuladores de las acciones criminales del clan del Golfo en el departamento de Santander.
De acuerdo con información de la Policía de Colombia, alias Míster Black estaba involucrado en actividades de extorsión a productores de palma y ganaderos, así como en la comisión de homicidios y el tráfico de estupefacientes en Santander. “Con su detención se impidió la expansión de esta organización criminal en Santander, donde venía extorsionando a palmicultores y ganaderos, cometiendo homicidios y traficando con drogas”, informó el general William Salamanca, director de la Policía Nacional.
Información de inteligencia de la Policía menciona que la expansión del Clan del Golfo en Ecuador y Perú se debe a la búsqueda de nuevas rutas para el tráfico de drogas, sumado a la alianza entre este grupo armado con estructuras criminales del vecino país, quienes facilitan el paso de las sustancias ilegales, lo que ha generado que se multipliquen los hechos de violencia y la inseguridad en Ecuador.