Una nueva tragedia tiene en alerta a las autoridades, debido a que involucra a un menor de edad, que falleció ahogado en medio de un aparente descuido por parte de sus cuidadores mientras que se encontraban en una piscina pública.
De acuerdo con el reporte oficial, el trágico suceso ocurrió en el Parque de la Familia, situado en el municipio de Montenegro, Quindío. La víctima es un niño de tres años que murió tras caer en una piscina de adultos.
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El menor fue identificado como Alan Jerónimo Ramírez González, que se perdió de vista de sus familiares y en el momento en el que decidieron buscarlo encontraron la macabra escena: el pequeño estaba flotando en el agua, desde donde fue sacado y, posteriormente, trasladado a un centro asistencial.
Los allegados del menor lograron llevarlo hasta el Hospital Roberto Quintero Villa, donde los médicos intentaron adelantar las labores de reanimación, pero antes de poder obtener resultados, se confirmó que el niño ya no tenía signos vitales por lo que no respondió a los procedimientos.
Versiones de las personas que se encontraban en el lugar de los hechos indican que el pequeño se cayó al agua sin que nadie se diera cuenta, lo que retrasó su rescate. Aunque, al percatarse de su presencia en el agua, fue trasladado de urgencia al hospital, se confirmó su fallecimiento.
Entre tanto, se confirmó que las autoridades locales se desplazaron al reconocido parque, con el fin de iniciar la recolección de pruebas y material que ayuden a esclarecer este lamentable suceso. Las investigaciones preliminares indican que se tomarán las medidas necesarias para entender cómo ocurrió el accidente y determinar posibles responsabilidades de los presentes en el lugar.
Debido a este caso, la Policía resaltó la necesidad de mejorar las medidas de seguridad en los parques y lugares de recreación para prevenir situaciones similares en el futuro. También, se envió un mensaje de condolencias para la familia de Alan Jerónimo y recordaron a los padres y cuidadores la importancia de un monitoreo constante de los niños en áreas con cuerpos de agua.
Este incidente generó una profunda tristeza en la comunidad de Montenegro y sirvió como un trágico recordatorio de la necesidad de extremar las precauciones en espacios recreativos, especialmente aquellos que cuentan con piscinas y otros tipos de riesgos potenciales para los más pequeños.
¿Cómo cuidar a los niños en los paseos?
Las piscinas, ríos y playas son sitios de esparcimiento ideales para disfrutar con la familia, pero también representan riesgos, especialmente para los más pequeños. Para minimizar estos peligros, la Policía Nacional de Colombia ofreció una serie de recomendaciones dirigidas a padres y cuidadores.
En primer lugar, es vital prestar atención a las señales de seguridad presentes en estos lugares, que indican el uso adecuado de trampolines, palancas, toboganes y otras atracciones acuáticas, así como la profundidad de la piscina. Así, se pueden prevenir accidentes que pueden surgir por el mal uso de las instalaciones o por desconocer la profundidad adecuada para ciertos juegos.
La constante vigilancia de un adulto responsable es otro aspecto crucial. Nunca se debe dejar solos a los niños mientras se bañan en cuerpos de agua, pues es esencial estar atento para garantizar su seguridad.
Se debe evitar que los niños se lancen de cabeza al agua sin haber comprobado previamente la profundidad y la ausencia de obstáculos que puedan ocasionar lesiones graves, debido a que pueden golpearse con el fondo u otros objetos sumergidos.
Otro punto importante es asegurar que las piscinas cuenten con los cerramientos adecuados y la presencia de personal salvavidas. Las vallas de seguridad y los equipos de rescate profesional pueden hacer la diferencia en situaciones de emergencia.
Finalmente, es recomendable no acampar ni instalarse en zonas bajas aledañas a ríos, pues estas pueden ser áreas propensas a inundaciones repentinas.