Mafe Carrascal defiende a capa y espada la reforma laboral ante los mitos que existen: “No genera desempleo”

A tres semanas de iniciadas las sesiones legislativas en el Congreso, la bancada del Gobierno reanudará el debate de la reforma laboral, crucial para el trámite ante la Plenaria de la Cámara de Representantes. Esta propuesta legislativa, respaldada firmemente por la congresista María Fernanda Mafe Carrascal, marca un momento decisivo en la agenda de la administración de Gustavo Petro.

El 12 de agosto, la representante por la coalición del Pacto Histórico, utilizó su cuenta de X para destacar los puntos clave de la reforma laboral. Aunque el proyecto guarda similitudes con la propuesta anterior que fue archivada, Carrascal enfatizó su carácter innovador y su enfoque renovado.

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Esta reforma tiene como objetivo restaurar derechos que fueron eliminados anteriormente y establecer nuevas protecciones para los trabajadores, con el fin de mejorar las condiciones laborales y garantizar un trato equitativo para todos. Sin embargo, es importante mencionar que en el pasado no avanzó debido a diversas objeciones presentadas por los congresistas, que señalaron que contenía disposiciones que podrían perjudicar a los empleadores, entre otros aspectos.

La congresista Carrascal mencionó en su cuenta de X que: “La reforma laboral busca que los y las trabajadoras recuperen derechos perdidos, que les han quitado a través de varias reformas en los últimos años, como la estabilidad laboral para todas las personas que cumplan funciones permanentes, la jornada nocturna desde las 7:00 p.m. y el recargo del 100% por trabajar el día de descanso”.

La congresista destacó que el nuevo texto de la reforma era fruto de un amplio proceso participativo, en el que recogieron propuestas de la ciudadanía y realizaron mesas de concertación tripartitas durante seis meses. Este enfoque participativo, afirmó Carrascal, permitió que la iniciativa fuera un reflejo de las necesidades y demandas reales de los trabajadores.

Actualmente, la reforma laboral consta de 81 artículos, de acuerdo con los congresistas que están al frente de la iniciativa, teniendo en cuenta todo lo suprimido por parte de varias bancadas que no estaban de acuerdo con algunos aspectos.

“La #ReformaLaboralVa promueve el círculo virtuoso de la economía, donde a mayores ingresos de las familias trabajadoras, mayor demanda agregada, mayores ventas empresariales y mayor empleo”, se lee en una de sus publicaciones.

La reforma tiene un punto adicional de controversia, especialmente en relación con su posible efecto sobre el empleo. Los opositores señalaron que la iniciativa del Gobierno podría estar dirigida a incrementar el desempleo al afectar directamente a los empleadores, pero la congresista negro tales afirmaciones.

Carrascal señaló que: “La reforma laboral NO genera desempleo. La reforma aumenta los ingresos y el consumo de los hogares y por esa vía aumenta los ingresos de las empresas. Esto les permite a las empresas formalizar y pagar dignamente el trabajo sin desemplear a nadie (sic)”.

Otro punto que Carrascal destacó en su defensa de la reforma es la regulación de la tercerización y la intermediación laboral, pues señaló que en lugar de eliminarlas, la propuesta busca establecer normas claras para asegurar que estas prácticas se realicen con responsabilidad y respetando los derechos de los trabajadores. La congresista enfatizó que el problema radica en la explotación y el desconocimiento de los derechos laborales, no en la contratación de terceros para la producción de bienes o servicios.

“El problema no consiste en que las empresas contraten a terceros para producir bienes o prestar servicios, sino en que la tercerización laboral ampare el desconocimiento de derechos de los trabajadores”, se lee en uno de los post de la representante.

Esta postura provocó preocupación entre sus seguidores en las redes sociales, que afirman que ella apoya la reforma a toda costa; sin embargo, existe incertidumbre sobre la manera en que se “recuperarán los derechos” de los trabajadores. A pesar de que se reconocen aspectos positivos en la reforma, aún no se conoce un plan detallado que garantice que no perjudicará a los empleadores.