Con cinco años y edad, esbelta, inquieta, juguetona y con un olfato infalible, París, una perra de raza belga malinois, se convirtió en “la piedra en el zapato” para los narcotraficantes que delinquen en el Amazonas, ya que por sus habilidades, la Fuerza Pública ha podido incautar 14 toneladas de estupefacientes que se mueven a través del departamento por sus vías fluviales en las zonas de frontera con Brasil y Perú.
“En estos resultados operacionales, ha jugado un papel fundamental (...) Desde cachorra fue entrenada y preparada para esta clase de misiones, incluso en las condiciones más adversa”, señalaron en
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Su capacidad es tal que en ocasiones los criminales han intentado ponerle señuelos para confundirla e impedirle que halle las drogas, pero igualmente la canina ha frustrado sus envíos, como ocurrió en una ocasión en que integrantes de la Armada Nacional requirieron en zona rural del municipio de Puerto Nariño, en el río Amazonas.
“Cuando París subió a la embarcación, llegó hasta un punto en donde se encontraban varios pescados, algunos en avanzado estado de descomposición. Con esto los delincuentes pretendían desorientar a la canina. Pero la pericia y el entrenamiento de esta “guardacostas de 4 patas” fue más efectivo y dio la señal a su guía para indicarle que en el sitio había droga”, relataron en esa fuerza militar.
Y ese ha sido su diario vivir con su trabajo como una más entre los uniformados que patrullan por ese imponente cuerpo de agua que se considera como el más largo del mundo, donde los narcotraficantes también intentan mover toneladas de sustancias psicoactivas con el uso de lanchas rápidas.
Los buenos resultados que ha permitido conseguir con sus especiales cualidades, también se han dado porque los miembros de la armada que la tienen a su cargo siempre están pendientes de sus necesidades.
“Esta canina, con su guía, un Infante de Marina Profesional, con quien lleva más de cuatro años y medio, recibe los cuidados específicos según su especialidad. Su alimentación es balanceada, a diario recibe preparación física y además goza de días de descanso. Estas rutinas permiten que siempre tenga buena salud, la destreza y disposición para detectar cargamentos ilegales”, explicaron en las FF.MM.
Pero también esto ha provocado que sea un objetivo de los criminales, por lo que, además de su manutención, los militares le asignaron guardaespaldas para protegerla de atentados en su contra, que incluso en las noches, cuando descansan.
“Por sus resultados operacionales, esta pastora belga malinois, tiene un grupo de seguridad en los caniles (lugar donde duermen y descansan los caninos) que la cuidan y protegen, ya que ha sido objeto de amenazas, incluso han ofrecido dinero para quien logre hacerle daño”, indicaron.
En la porción del imponente Amazonas que corresponde a Colombia, explicaron en las Fuerzas Militares, la Armada Nacional cuenta con 200 uniformados que conforman el Grupo de Guardacostas fluvial, donde París, como el resto de perros de su unidad canina, cumplen un papel crucial para proteger la soberanía y contrarrestas a las organizaciones criminales que tienen injerencia en esa zona del sur del país.
“Una de las misiones fundamentales por las cuales se encuentran desplegados, es la de combatir el fenómeno del narcotráfico, ya que muchos criminales emplean los ríos para movilizar la droga”, indicaron.
Según datos de las Fuerzas Militares, en lo corrido de este año, los uniformados han logrado incautar más de 518 toneladas de estupefacientes, que ha sido una cifra histórica en la lucha contra el narcotráfico en el país, que es una de las rentas ilegales que mayores ingresos le brinda a los grupos armados al margen de la ley.
“Esto ha permitido debilitar y afectar las redes logísticas y criminales de las diferentes organizaciones transnacionales dedicadas a este negocio ilícito”, destacaron.