Cierre de pozo petrolero generó protestas en el Magdalena Medio: comunidad exige respuestas de Ecopetrol

El pozo petrolero de Campo Teca en el Magdalena Medio enfrenta un futuro incierto que preocupa a cientos de familias en la región.

Este complejo, que ha operado durante décadas extrayendo hasta 1.300 barriles de crudo al día, ha recibido bloqueos recientes por parte de los habitantes de los municipios de Puerto Triunfo y Puerto Nare.

La comunidad exige respuestas del Gobierno nacional, Ecopetrol y la Agencia Nacional de Hidrocarburos acerca del deterioro progresivo y el posible cierre del pozo, informó un portavoz de la comunidad.

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Un proyecto propuesto en el último año con una inversión de 1.350 millones de pesos para incrementar la extracción a 50.000 barriles de crudo aún no se ha concretado. Esta falta de avance incrementa las dudas y las preocupaciones en la comunidad, ya que el cierre del pozo podría dejar sin sustento a cerca de 2.500 personas.

Heriberto Sandoval, vocero de la comunidad, expresó durante una manifestación: “Pedimos que se haga la fase 2 donde existen más o menos trescientos pozos y donde se genera cierto número de empleados para aliviar la crisis social y económica que en este momento vivimos. Estaremos aquí hasta que tengamos diálogos y respuestas positivas para nuestra comunidad”.

Carlo Tobón, concejal de Puerto Triunfo, también expresó su descontento con la inversión social de Ecopetrol en la región. A pesar de la cantidad considerable de hidrocarburos extraídos diariamente, Tobón señaló que la inversión en planes de desarrollo y regalías destinadas al municipio ha sido mínima.

“Son unos derechos que se tienen adquiridos porque es la riqueza de nuestros suelos, ahí están los ductos por donde salen los productos que están sacando de nuestros suelos, pero no le están retribuyendo nada al municipio, la inversión social es cero”, destacó el funcionario.

La comunidad de Puerto Triunfo y Puerto Nare continúa buscando respuestas y mantiene sus bloqueos hasta que se les brinden soluciones viables para su situación socio-económica y se materialicen las inversiones prometidas en el desarrollo del proyecto petrolero.

Ecopetrol prometió en 2014 invertir $1.350 millones en la recuperación del Campo Teca — Cocorná, con el objetivo de que en 2023 alcanzara una producción de 50.000 barriles diarios, según informaron líderes locales. Sin embargo, hoy en 2024 esa promesa no se ha cumplido. El campo, localizado en la subregión del Magdalena Medio antioqueño, sigue produciendo sólo 1.500 barriles de petróleo por día y da empleo a alrededor de 2.500 personas de los municipios de Puerto Triunfo, Puerto Nare y de Puerto Boyacá, en Boyacá.

La comunidad local manifiesta una creciente preocupación por el deterioro continuo del campo petrolero, que data de la década de 1980. Diomar Isaza, concejal de Puerto Triunfo, expresó: “Hay preocupación en la comunidad porque parece que al gobierno nacional no le importa este campo, y todo apunta a que lo quieren cerrar.” Estas inquietudes se comparten entre los habitantes y los trabajadores, quienes temen por la desaparición de su principal fuente de sustento.

La protesta llevada a cabo el miércoles 10 de abril del 2024 en Puerto Triunfo y Puerto Nare destaca el abandono y la falta de inversión en el campo por parte de Ecopetrol y del Ministerio de Minas y Energía. Los residentes ven con impotencia cómo las instalaciones se deterioran sin las inversiones necesarias para mantenerlas operativas. En palabras de Fernando Santa, líder transformador de la estrategia de hidrocarburos en la zona, “el proyecto prometido en 2014 nunca se ejecutó, y aún no comprendemos por qué Ecopetrol no quiere invertir en un campo con reservas de 750 millones de barriles, según declaraciones oficiales de la época.”

Este abandono no sólo impacta la economía local, sino también provoca una desconfianza creciente hacia las decisiones del Gobierno en materia de hidrocarburos. Los trabajadores han señalado que el mantenimiento adecuado y la actualización de las instalaciones podrían garantizar la continuidad del empleo y la producción eficiente del campo petrolero.