El Metro de Bogotá ha sido una promesa para los capitalinos durante más de 80 años, pues después de tanto tiempo hasta ahora se está construyendo la Línea 1, una muestra clara del atraso en modernización que ha tenido Bogotá a lo largo de su historia, que ha estado enmarcada bajo la mala administración y la corrupción.
De acuerdo con la página oficial de la empresa Metro de Bogotá, desde el año 1942 se habla de su construcción bajo la alcaldía de Carlos Sanz de Santamaría, cuando la ciudad apenas tenía 400.000 habitantes. En aquella época el tranvía prestaba su servicio de transporte público con 200.000 pasajeros al día, e incluso se llegó a proponer la reserva de terrenos para llevar a cabo el proyecto.
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Posteriormente, en el año 1948, luego de la ola de violencia que hubo a raíz de los hechos ocurridos el día 9 de abril con el asesinato del líder político Jorge Eliécer Gaitán, el alcalde Fernando Mazuera contrató al urbanista internacional Le Corbusier para que se encargara de hacer los estudios para reconstruir la ciudad. La firma Wiesner y Sert apoyó el proyecto para que Bogotá adoptara un plan de trabajo y así hacer la construcción de una línea férrea.
Para el año 1953, la capital contaba con 700.000 habitantes, en ese entonces se habló de construir la primera línea del metro por la avenida caracas. La administración adoptó un plan regulador teniendo en cuenta el crecimiento urbanístico y poblacional. Se pretendía ampliar las vías y adquirir una moderna flota de buses.
En 1954, bajo la administración del alcalde Roberto Salazar Gómez, se anunció el primer estudio para construir el metro; sin embargo, no tuvo éxito al momento de solicitar al Concejo de Bogotá un préstamo para financiar el contrato, el cual le negaron.
Durante el Gobierno del General Gustavo Rojas Pinilla, en 1957, se contrató una firma japonesa para que construyera el metro por concesión. Pero nuevamente la iniciativa se vio opacada, esta vez por negación del entonces Frente Nacional. En ese tiempo comenzaron a llegar buses a gasolina a la capital.
Años más tarde, en 1963, cuando la ciudad ya contaba con más de 1,6 millones de habitantes, el alcalde Jorge Gaitán Cortés propuso la construcción del metro y el tren cercanías, esto como resultado del gran crecimiento que había en la capital.
En 1966, el Gobierno distrital solicitó a la nación la construcción de la primera línea del metro, la cual se realizaría por la avenida Caracas entre calles 68 y 22 sur, un recorrido de 12 kilómetros que tendría cinco estaciones, pero al finalizar el mandato de Gaitán se archivó el proceso. El alcalde Virgilio Barco, en 1968 reservó US$200.000 para hacer un estudio sobre el esperado sistema de transporte en Bogotá.
Entre 1974 y 1976, la capital tenía 2,5 millones de ciudadanos, momento en el que se volvió a abrir la posibilidad de contar con un metro en la ciudad.
En la alcaldía de Hernando Durán Dussan en el año 1981, Ineco - Sofretu, de la mano con Consultoría y Sistemas de Colombia, plantearon la construcción de tres líneas férreas subterráneas y otras dos periféricas. Avanzaron los estudios para una línea prioritaria de 23 kilómetros. En esa época la administración recibió una oferta francoespañola para la construcción de un metro que costaría 1.800 millones de dólares.
En 1987, Bogotá tenía cerca de 3,9 millones de habitantes, y se adoptó una propuesta de Intermetro SPA de Italia que tenía como objetivo rehabilitar el 75% de las vías férreas existentes, de 46,4 km y 29 estaciones.
Entre 1988 y 1991, bajo el mandato del alcalde Andrés Pastrana, se propuso construir la troncal Caracas para opacar la anterior iniciativa de Intermetro SPA. Si bien el mandatario local tenía el respaldo del presidente Virgilio Barco, recibió fuertes críticas, pues el proyecto únicamente favorecía al 10% de los viajes en la ciudad. Por otro lado, se rechazó una propuesta de una firma italiana para construir un tren ligero que funcionaría a través de la línea del ferrocarril.
En el Gobierno de Gaviria, en 1992, el alcalde Juan Martín Caicedo propuso un acuerdo de la nación con el Distrito para construir el metro, pero no tuvo acogida. Entre 1993 y 19994, bajo la alcaldía de Jaime Castro, en Bogotá habitaban más de 4,9 millones de habitantes. En ese entonces se radicó ante el Consejo un proyecto para crear la empresa Metro y así construir la primera línea, bajo la modalidad de concesión a 30 años; sin embargo, por dificultades de financiación se archivó el proyecto.
En el año 1996, durante la alcaldía de Antanas Mockus se formuló el Plan Maestro de Transporte Urbano, el cual tenía como objetivo construir una línea de metro de 40 kilómetros, pero la propuesta resultó muy costosa.
Durante la presidencia de Ernesto Samper, en 1997, se diseñó un Sistema Integrado de Transporte Masivo que pretendía tener tres líneas del metro, pero por la crisis fiscal y las restricciones de crédito internacional el proyecto no continuó.
Para 1998 el alcalde de Bogotá era Enrique Peñalosa, en su administración se propuso el metro y el TransMilenio, con el fin de terminar con la denominada ‘Guerra del Centavo’. Se trataba de una iniciativa en la que funcionan buses troncales de gran tamaño, servidos desde estaciones a las que los ciudadanos podrían acceder luego de pagar su respectivo pasaje.
Del 2000 al 2003, Peñalosa inició la adquisición de predios para el metro, el cual proyectó la primera estación en la localidad de Bosa. En ese momento, el proyecto TransMilenio estaba en marcha con corredores exclusivos y estaciones de servicio prepago. El nuevo sistema de transporte comenzó a operar a principios del nuevo milenio con 14 buses por la Troncal Caracas, entre la calle 80 y la sexta.
En el 2006, Bogotá contaba con más de 6,7 millones de habitantes. La Secretaría Distrital de Movilidad adelantó el diseño del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP), que sería una nueva ayuda en la movilidad para los capitalinos.
La empresa Metro afirmó que entre 2008 y 2010, “el estudio de ingeniería conceptual elaborado por Sener – Transportes Metropolitanos de Barcelona - Ingeniería y Sistemas y Advance Logistic Group proyectó para Bogotá una red Metro de 100 kilómetros y 112 estaciones. La Primera Línea definida (27,5 km) tenía origen en el Portal de Las Américas, con un recorrido hasta el centro de la ciudad, para servir el corredor oriental”.
Entre 2013 y 2015, la administración de Gustavo Petro adelantó un estudio para un metro subterráneo. El costo se estimó en $13,9 billones. El expresidente Juan Manuel Santos entregó un cheque simbólico al alcalde, pero no tenía fondos.
De acuerdo con El Espectador, en el 2016 por fin hubo una luz de esperanza para el anhelado sistema de transporte, pues por medio del acuerdo 642 de dicho año el Concejo de Bogotá autorizó la creación de la empresa Metro de Bogotá S.A. En 2017 se autorizó a la Secretaría Distrital de Hacienda asumir las obligaciones de la primera línea por $6,08 billones.
En el 2018 se autorizó un cupo de endeudamiento de hasta $10,8 billones para la empresa Metro de Bogotá S.A. Un año después, en el 2019, la entidad, de la mano con Metro Línea 1 S.A.S., se comprometieron a sacar adelante el proyecto durante los próximos 20 años.
En 2020 se firmó el acta de inicio de concesión del contrato, el cual estipulaba que el metro iniciaría su operación en el 2028. En octubre de ese mismo año, se firmó por fin el acta que dio inicio a las actividades de diseño y pre construcción de la línea del metro.
Finalmente, luego de tanto tiempo, el metro empezó oficialmente su construcción en el año 2021 y ahora alcanzó el 35% de avance general en sus frentes de trabajo.