En un comunicado publicado en su cuenta de X, el expresidente Álvaro Uribe Vélez se refirió a la venta del predio El Porvenir, un terreno de 192 hectáreas ubicado en el municipio de San Carlos (Córdoba), al Gobierno del presidente Gustavo Petro, en aras de dar fuerza a los proyectos productivos de los emprendedores rurales del país.
Según la misiva, el exmandatario ha sostenido cuatro encuentros con el mandatario, donde le manifestó su desacuerdo con la expropiación del sector agropecuario.
“En dos de las cuatro reuniones con el presidente Petro le expresé estar en desacuerdo con la expropiación del sector agropecuario y estar de acuerdo con compra de predios para proyectos productivos campesinos, sin desalojar a los empresarios del campo”, expresó Uribe.
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Agregó que “el presidente (Gustavo Petro) me respondió que se debía promover la oferta de tierras, lo cual muchas personas han hecho a través de Fedegán. También agregó que se debería promover entre empresarios que puedan hacerlo la venta parcial al Estado para resolver problemas sociales. Mi familia ha compartido esta tesis”.
Igualmente, el exjefe de Estado indicó que, previamente, se registraron avalúos altos en San Carlos, Córdoba, por lo que alzó su voz de protesta a funcionarios del Instituto Geográfico Agustín Codazzi para que consideraran la compra del predio.
“Hace unas semanas, ante unos avalúos prediales muy altos en San Carlos, Córdoba, reclamé a los funcionarios del Agustín Codazzi y agregué que entonces considerarán comprar el predio”, explicó.
De igual forma, Uribe sostuvo que recibió otras visitas por parte de funcionarios de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), encabezadas por el director Felipe Harman, quien le preguntó si se vendía ese terreno.
“Me preguntó que si se vendía, le dije que sí, le anoté que a un precio muy inferior al avalúo catastral que corresponde a San Carlos (...) Le solicité al doctor Harman que se reconsideraran los avalúos en la región para que quienes allí trabajamos podamos seguir en la ganadería”, comentó.
Finalmente, el expresidente y líder del partido Centro Democrático señaló que “el predio ofrecido y solicitado tiene aproximadamente 192 hectáreas, en condiciones de alta productividad sostenible y al alcance de la ganadería empresarial y también campesina (...) los funcionarios de la Agencia Nacional de Tierras, en sus visitas, han recaudado directamente toda la información pertinente”.
Rifirrafe entre Uribe y Petro por expropiación
Tanto el expresidente Álvaro Uribe como el presidente Gustavo Petro han tenido diferencias referentes a la compra de tierras improductivas para repartirla a campesinos y ponerlas a producir.
A través de sus redes sociales, el líder político del Centro Democrático ha manifestado constantemente su desacuerdo con las medidas del Gobierno Petro, señalando que, de realizarse la expropiación, afectarían a las inversiones privadas, e indicó que el modelo propuesto por el actual jefe de Estado es similar a los impulsados en Cuba y Venezuela.
“Hay diferentes maneras de expropiar y siempre los resultados han sido malos. El comunismo clásico expropió con fusilamientos; Castro con invasión; Chávez decidía en el discurso, sin instituciones, sin normas de defensa del afectado; los Kirchner con impuestos”, expresó Uribe en su momento.
Durante la campaña presidencial de 2022, el entonces candidato Gustavo Petro manifestó que este modelo podría avanzar en el cumplimiento del Acuerdo de Paz firmado en 2016 entre el Estado colombiano y la extinta guerrilla de las Farc, en relación con la reforma agraria.
“Para que este mundo productivo de la tierra sea posible, los poseedores que ven la tierra como poder y no como instrumento productivo, tienen que retroceder, deben liberar la tierra y yo propongo comprársela, no para que quede de propiedad del Estado, sino para que sea propiedad de quienes ven la tierra como un instrumento de producción, es decir, comprarle las haciendas a Álvaro Uribe Vélez para que allí se pueda producir comida, dado que él la piensa como un instrumento de poder”, expuso Petro.
Ante ello, Uribe recriminó a Petro diciendo que no era un terrateniente, sino un “finquero”, y que con sus declaraciones, pondría en riesgo la integridad de su familia.