Cambia la atención en salud de los maestros en Colombia: ahora necesitarán autorización para ser atendidos en los centros médicos y para reclamar medicamentos

El Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio (Fomag) anunció una serie de cambios en los servicios de salud para los maestros, que ya ha contado con transformaciones desde la entrada en vigencia de un nuevo modelo desde el primero de mayo de 2024.

A través de una circular, el Fomag (Fondo Nacional de prestaciones del Magisterio) informó que se daría por terminada la posibilidad de que los docentes sean atendidos en las IPS (Instituciones Prestadoras de Salud) sin previa autorización.

Esta medida, vigente desde mediados de mayo, ya no es aplicable desde el 1 de agosto, en aras del avance del nuevo sistema de salud que se está gestionando.

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Lo que hacían estas instituciones, fuesen públicas, privadas o mixtas, era brindar servicios de atención a los maestros y a sus beneficiarios, y contaban con el cubrimiento de medicamentos de baja complejidad, sin ningún problema.

Pero a partir de ahora los maestros deberán obtener una autorización previa, tanto para recibir atención médica, como para la entrega de medicamentos de distintas complejidades y costos. Esto se debe a que, según Fomag, “la prestación de los servicios y tecnologías de salud serán garantizados a través de la gestión de la red de prestadores en todos los territorios a nivel nacional”. Según la página del fondo, ya son al menos 700 de estas entidades en el territorio nacional.

Con relación con la atención de urgencias, las IPS públicas y privadas seguirán proveyendo estos servicios en todo el país, sin que pueda ser negado por falta de contratos, conforme a la legislación colombiana. Esta disposición garantiza que las urgencias médicas se atenderán de manera oportuna, sin importar los acuerdos contractuales vigentes entre las IPS y el Fomag.

Los pacientes serán referidos sin demoras a la nueva red de prestadores construida a nivel nacional, y la entrega de medicamentos será gestionada por una red de gestores especializados, lo que se espera que mejore la eficiencia del sistema, ya que, para las IPS es “de obligatorio cumplimiento en todas las instituciones del territorio nacional, sin que puedan ser negadas dichas atenciones por no contar con contratos, como lo estipula la ley colombiana”, como citó W Radio.

Aún así, los docentes deberán pedir autorización para solicitar medicamente de baja complejidad, alto costo y control especial, a través de la red de prestadores de servicios.

La restructuración del modelo de salud del magisterio se ha enfocado en resolver varios problemas críticos que enfrentan los maestros, según análisis de diversos medios. Entre ellos, la implementación busca reducir los tiempos de espera para consultas y procedimientos médicos, disminuir las tasas de radicación de Peticiones, Quejas, Reclamos y Sugerencias (PQRS), y aumentar la satisfacción de los pacientes respecto a la calidad de la atención recibida.

No obstante, como comunicó Blu Radio, diversos representantes del magisterio han expresado sus preocupaciones y expectativas sobre estos cambios. Indican que la transición hacia el nuevo modelo de salud genera incertidumbres, especialmente en cuanto a la continuidad y accesibilidad de los servicios. Las asociaciones de maestros y sindicatos han solicitado al Fomag proporcionar información clara y oportuna sobre cómo se implementarán los nuevos acuerdos y cómo afectarán al acceso a los servicios de salud.

Los hospitales públicos de Antioquia anunciaron que dejarán de prestar servicios no urgentes a los docentes debido a la falta de pagos por parte del Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio (Fomag). Esta medida ha encendió alarmas no solo en el departamento, sino a nivel nacional, pues la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (Acesi) también está considerando tomar decisiones similares.

La situación se debería a la implementación de un nuevo sistema de salud, que eliminó la figura de los operadores intermediarios, transfiriendo la responsabilidad directamente a la Fiduprevisora. Sin embargo, este cambio ha generado complicaciones, ya que Fiduprevisora no ha podido adaptarse rápidamente, provocando una falta de pagos a clínicas y hospitales que ha dejado a miles de maestros sin acceso a servicios médicos básicos.

En busca de una solución, el Fomag emitió la circular 002 el 13 de mayo, autorizando a las instituciones a prestar servicios al magisterio bajo la modalidad de “pago por evento” sin necesidad de un contrato previo. Aunque inicialmente parecía una medida efectiva, las instituciones médicas enfrentan ahora la realidad de que los pagos prometidos no se han materializado, de acuerdo a lo que comunicó Cambio.

Ante estas denuncias, el Fomag respondió a través de un comunicado oficial en el que asegura estar trabajando para cumplir con sus obligaciones financieras. De acuerdo con la entidad, en estos momentos se está adelantando el pago del 70% del valor facturado por los servicios prestados por evento, pero no se mencionó con claridad cuándo se cubrirá el 30% restante.