La guerra en Europa Oriental no solo ha cobrado vidas rusas y ucranianas. También, colombianos contratados como mercenarios para detener el avance en la frontera y proteger ciudades, como Kiev, Kharkiv, Odessa, Mariúpol y Dnipro han sido asesinados en medio de la guerra, a la que llegaron a cambio de una jugosa compensación económica.
Sin embargo, se conocen historias de compatriotas que aseguran haber llegado a Europa Oriental bajo la promesa de un salario, que cambió al no obtener los resultados esperados, y de mala gana, regresaron a Colombia para compartir su experiencia con otros mercenarios.
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Sumado a la propaganda anti ucraniana que desde el Kremlin estaría difundiéndose, a través de las redes sociales, con la ayuda de ‘influencers’, según denunciaron el Reuters Institute y la Universidad de Oxford, ha llevado a que grabaciones sean sacadas de contexto, como ocurrió con un video compartido en plataformas de denuncia ciudadana, en el que se ve a mercenarios colombianos supuestamente rescatando a un desertor.
De acuerdo con la descripción que acompaña a la grabación, el desertor, también de nacionalidad colombiana, había sido amarrado de manos y pies y manos y luego arrojado a una zanja, como castigo. “¿Dónde putas está Felipe? ¿Dónde?”, se escucha gritar al escuadrón de colombianos, que, con aparente facilidad, encuentra al “desertor” y lo libera.
“Rápido, rápido, rápido. Dale que se vienen, dale que se vienen”, gritó por última vez, antes de dar por terminada la grabación uno de los soldados que supuestamente habría recibido un disparo, al realizar la grabación recuperada por European_dissident y luego difundida en las redes.
Sin embargo, una fuente anónima dijo a Infobae que “los soldados también tienen el video porque se trata de un entrenamiento”, pero la “gente que ya no está en Ucrania, que se ha ido mal, enojada porque no se le pagó lo que se debía” estarían buscando compartir noticias falsas sobre sus condiciones de trabajo para el ejercito de Volodímir Zelenski.
Dos años y cinco meses han transcurrido desde que Rusia inició su invasión a Ucrania, un conflicto que ha dejado huellas profundas y ha transformado la vida de millones de ucranianos, con todo y que el país del este de Europa, se encontraba en una posición relativamente superior en términos de Índice de Desarrollo Humano (IDH) y en el Ranking Doing Business, que clasifica a las naciones según la facilidad que ofrecen para hacer negocios, como informó el portal especializado en economía Datos Macro.
A pesar del contexto bélico, Ucrania sigue siendo un destino atractivo para algunos colombianos, quienes ven en el país una oportunidad para mejorar su calidad de vida y estabilidad económica. Este fenómeno no es nuevo, ya que antes del conflicto armado, varios colombianos ya estaban migrando a Ucrania en busca de mejores oportunidades.
Soldados y exmilitares colombianos buscan futuro en Ucrania
El conflicto en Ucrania ha abierto una puerta inesperada para muchos colombianos con experiencia militar. Soldados, exmilitares y personas con experiencia en el campo de batalla han encontrado en la guerra contra Rusia una forma de mejorar su situación económica.
En una entrevista con un medio local, un exsoldado colombiano, que solicitó mantener su identidad en el anonimato, expresó: “La guerra no es algo que deseamos, pero a veces es la única opción que tenemos para salir adelante. Ucrania nos ha brindado una oportunidad de empleo que no encontramos en nuestro propio país”.
Wilder: un colombiano y su amor por Ucrania
Pero no todos los colombianos en Ucrania están involucrados en el conflicto armado. Hay quienes, como Wilder, han encontrado en el país europeo un segundo hogar, por su gente, sus paisajes y sus oportunidades laborales. “Hombre, más de un conocido, más de un familiar allá en Colombia me ha escrito para preguntarme: ‘Oiga, Wilder, ¿usted está amañado allá en Ucrania? ¿Cómo es ese país?’ Hombre... si les contara. Miren qué hermosura, los parques son hermosos, las ciudades son hermosas, los campos son hermosos. Miren el lago, miren la vista que tengo en este momento. Acá lo feo es uno”, explicó.
La experiencia de Wilder en Ucrania ha sido enriquecedora en muchos niveles. No solo encontró nuevas y atractivas oportunidades laborales, sino también una cultura acogedora y resiliente. “¿Las mujeres? Geniales ¿La calidad humana? Una cosa tremenda. Es un país resiliente, un país que, a pesar de la guerra, está firme y sigue siendo un país de brazos abiertos para los extranjeros. Acá nos acogen como familia, hay personas de todo el mundo y nadie es extraño”, comentó en un video ampliamente difundido.
A pesar de la guerra, que ya completa 29 meses, Wilder expresó sentirse feliz de tener su domicilio en Ucrania. Desde su nueva residencia, ha invitado a otros colombianos a explorar el país, una vez que la situación lo permita. “La gente es hermosa, amable, la gente es una belleza ¿Cómo no va a estar amañado uno en un país de estos? Es una belleza y ojalá fueran a los campos pa’ que vieran las plantaciones de girasoles, de trigo ¿Qué si estoy amañado acá? Ave María, home. Ojalá pudieran venir un día a turistear, a ver cosas bonitas, cosas hermosas”.
La realidad actual de Ucrania es un complejo mosaico de resiliencia y lucha diaria. Mientras algunas personas ven en el país una oportunidad de resurgimiento y crecimiento, otras viven la incertidumbre y los desafíos de un conflicto militar activo. Esta dualidad también se refleja en el ámbito de la economía local, donde sectores como la agricultura y la tecnología siguen desarrollándose, a pesar del conflicto con su imponente vecino.