Ataque armado dejó siete muertos en una finca de Rionegro, Antioquia: autoridades revelaron las causas de la masacre

El 25 de junio de este año se registró en el municipio de Rionegro (Antioquia) una masacre que dejó siete muertos y una persona herida. Las autoridades han estado recopilando datos para dar con el paradero de los responsables y ya revelaron las primeras hipótesis: tres de los asesinados (Luis Guillermo Canoles Menco, de 32 años; Jesús Gabriel García Sarmiento, de 40 años, y Marlos Luis John Zárate, de 32) habrían aceptado un trabajo en un establecimiento perteneciente al grupo delincuencial El Mesa, con el que el Clan del Golfo tendría disputas territoriales.

Se sabe que las tres personas por las que iban los sicarios eran oriundas del Atlántico y que, además de trabajar en el establecimiento comercial, hacían labores de construcción en una finca ubicada en El Hoyito.

En el ataque también murieron Luis Epinayú (39), nacido en Uribia; Arturo Enrique González González (30), también de Uribia; Gildardo Cárdenas Epinayú (45), oriundo de Riohacha, y Yeisin Luis Fontalvo Buelvas (37) y nacido en San Jacinto.

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Los reportes más recientes de las autoridades indican que ninguna de estas cuatro personas tendría antecedentes penales o registros en el Sistema Penal Oral Acusatorio (Spoa). Por ello, se presume que murieron por, sencillamente, estar en el lugar equivocado.

Lo que las autoridades quieren determinar es si, finalmente, este crimen fue cometido como consecuencia de una venganza por traición en el mundo criminal. Todo parece indicar que estos datos serán determinantes en el desarrollo de las investigaciones. En recientes declaraciones a medios de comunicación, Luis Eduardo Martínez, secretario de Seguridad de Antioquia, expresó: “La Policía y la Fiscalía tienen muy avanzadas las investigaciones y próximamente se tendrán capturas relacionadas con este violento hecho”.

Esta masacre, una de las más grandes en lo que va del año en Colombia, tendría su origen una confrontación entre la estructura narcotraficante El Mesa, que se estaría disputando el control del microtráfico con El Clan del Golfo que, a su vez, habría establecido una alianza, con el Clan Oriente para combatir a El Mesa, de Bello, y con fuerte incidencia en el oriente de Antioquia.

Expertos en conflicto señalan que, a través de estas alianzas, el Clan del Golfo estaría buscando fortalecer su presencia creando un frente en Magdalena Medio, alargando los tentáculos de esta estructura criminal que parece no tener límites y que, pese a capturas como la de alias Otoniel, no que queda acéfala.

El 26 de junio, un día después del hecho violento, se conoció el testimonio de uno de los sobrevivientes al ataque armado, que habría sido perpetrado por hombres que llegaron en motocicletas y un vehículo.

Un hombre, su hijo y otra persona más salieron ilesos, y en medio del impacto al ser testigo de semejante acto, pudo mencionar algunas palabras acerca de las víctimas del hecho, todas procedentes de costa Caribe.

“Los mataron a todos”, fueron las palabras que alcanzó a registrar el medio local MiOriente en el momento en que el hombre reportó a sus familiares que se encontraba con vida tras la masacre. Adicional a lo anterior, vecinos en la vereda comentaron: “No entendemos qué pasó, eran muchachos buenos y trabajadores”.

El testigo, al igual que los habitantes del municipio, amaneció el miércoles 26 de junio bastante afectado por los hechos, y más por la forma en la que llegaron los hombres, evocando episodios oscuros que se vivieron, no solo en el departamento, sino en varias regiones del país, por cuenta de las masacres cometidas por grupos armados ilegales y paramilitares, y que por cuenta de este caso tienen a Rionegro en máxima alerta.

Otro ciudadano que corrió a ayudar a las personas que quedaron con vida, contó al mismo medio local que “se escucharon unos disparos, fuimos a auxiliar a unas personas a ver quien había quedado con vida, había dos heridos, y pudimos ayudarlos. Ya el resto eran cadáveres”.