Bogotá es el epicentro del 55% de los casos de trata de personas en Colombia

La Alcaldía de Bogotá destacó los progresos de su estrategia RedActiva, enfocada principalmente en el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá. La iniciativa busca enfrentar un problema de alcance global como lo es la trata de personas. De este delito se identificaron 60 casos en la terminal aérea durante 2024, por lo que se busca brindar apoyo psicosocial y canalizar las denuncias a las autoridades correspondientes.

Gustavo Quintero, secretario de Gobierno Distrital, enfatizó la gravedad de este flagelo: “La explotación sexual y los trabajos forzados son formas de esclavitud moderna que no podemos tolerar en nuestra sociedad. Con la creación de RedActiva, unimos esfuerzos para erradicar estas prácticas y asegurar un futuro digno para todas las personas”.

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Según la oficina de las Naciones Unidas contra la droga y el delito, la trata de personas es una de las principales amenazas mundiales debido a las redes criminales transnacionales que se dedican a la explotación y comercio de personas. Las cifras del Ministerio de Defensa revelan que en Colombia se registraron 91 casos de trata de personas entre enero y junio de 2024, con 33 de esos casos identificados en Bogotá.

El aeropuerto El Dorado, al ser uno de los principales puntos de tránsito, se convierte en un escenario clave para las operaciones de RedActiva. Las autoridades buscan mediante esta estrategia prevenir la salida y entrada de víctimas de trata, atacando las operaciones de las redes criminales desde sus puntos de origen y destino.

A nivel global, la trata de personas es el segundo delito más lucrativo, superado únicamente por el narcotráfico. Este dato, proporcionado por la ONU, destaca la rentabilidad de este crimen para las organizaciones delictivas y la complejidad que enfrentan las autoridades para desmantelar dichas redes.

En el desarrollo del Congreso Internacional de Derechos Humanos, Género y Enfoque Diferencial que tuvo lugar en Barranquilla, la Procuraduría General de la Nación presentó un inquietante escenario sobre la trata de personas en Colombia. Margarita Cabello Blanco, jefe del Ministerio Público, expresó su asombro y preocupación ante las elevadas cifras que este delito registró durante el 2023.

“Observamos con preocupación alarmante las grandes cifras de afectación por la trata de personas. En el año 2023, tan solo en casos denunciados, se presentaron 264 por trata, las más alta de los últimos 15 años, según el Observatorio del Delito de Trata del Ministerio del Interior”, afirmó Cabello Blanco.

Las víctimas de trata son principalmente trasladadas hacia México y diversos países de Europa, según los datos recopilados. Entre esos casos, se identificaron dos alarmantes situaciones que involucraron a menores de tan solo 11 años, atrapados por redes de trata dentro del territorio colombiano.

La relatora especial para la trata de personas del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Siobhán Mullally, mencionó que la mayoría de las víctimas son mujeres y que el propósito principal de este delito es la explotación sexual. Mullally, en su intervención, ofreció un detallado análisis de esta problemática en Colombia, destacando su visita a ciudades como Bogotá, Cúcuta, Apartadó, Necoclí, Pasto e Ipiales.

Durante estas visitas, tuvo la oportunidad de conocer a algunas víctimas y señaló los desafíos significativos en la implementación de leyes, protección y prevención del tráfico, especialmente en áreas rurales, fronterizas y zonas de conflicto.

Los hallazgos de Mullally destacan la importancia de la educación en la lucha contra la trata, y abogan por una aproximación que incluya igualdad de género, educación sexual basada en derechos humanos y el fortalecimiento de los sistemas de protección infantil. También explicó la necesidad de brindar atención especializada a las víctimas de explotación en comunidades vulnerables.

Además, se enfatizó la importancia de considerar a los grupos en mayor riesgo, afectados por la discriminación, la xenofobia, el racismo y los fenómenos migratorios. En relación con esto último, Mullally compartió su experiencia en Necoclí, Antioquia, donde fue testigo de la desesperación de personas que iniciaban su travesía por el Darién, destacando lo apremiante de abordar estas situaciones desde múltiples frentes.