Campesinos bloquearon vías en Santander porque aseguran que el Ministerio de Ambiente los quiere sacar de sus territorios

En este momento, un grupo de campesinos se encuentra protestando en Málaga, Santander, con bloqueos de vías como rechazo a la delimitación del páramo del Almorzadero.

Según declaraciones de los manifestantes, el Ministerio de Ambiente tiene la intención de desalojarlos de sus territorios.

Los campesinos expresaron que la delimitación propuesta afectaría directamente sus medios de vida y sus tradiciones agrícolas en la región. Para ellos, la medida podría resultar en la pérdida de sus tierras productivas, lo cual agravaría la situación socioeconómica de la comunidad.

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La protesta ha causado interrupciones en el tráfico y ha generado una respuesta por parte de las autoridades locales. Las comunidades afectadas argumentan que no se han considerado sus derechos ni se les ha brindado una alternativa viable para continuar con sus actividades.

Según videos difundidos en las redes sociales, se puede ver cómo un camión de carga pesada, carpado, está atravesado horizontalmente en una vía de Málaga, y tiene una pancarta blanca de letras rojas y verde que dice: “No a la delimitación del Páramo del Almorzadero ¡Concepción Presente!”

Aunque las autoridades no han emitido un comunicado oficial sobre las posibles soluciones o negociaciones, los manifestantes exigen ser escuchados y que se busquen opciones que no impliquen el desplazamiento forzoso.

Se espera que las manifestaciones continúen hasta que se logre un acuerdo entre los campesinos y el Ministerio de Ambiente, que permita proteger tanto la conservación del páramo como los intereses de las comunidades locales.

La Procuraduría General de la Nación ha solicitado a la Secretaría de Ambiente de Bogotá un informe detallado sobre la comercialización de carne de tiburón en los restaurantes de la ciudad. Esta acción surgió tras la incautación de 5.5 kilogramos de carne de tiburón tollo en un restaurante en la localidad de Teusaquillo, derivada de una denuncia ciudadana.

Adriana Soto Carreño, Secretaria Distrital de Ambiente, debe ahora proporcionar un informe sobre las medidas de control vigentes respecto a la venta y comercialización de tiburones y rayas, conforme a la Resolución 0766 de 2024 de la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (Aunap). Este documento establece directrices para reducir las capturas incidentales de estas especies y regular su aprovechamiento.

Durante un operativo conjunto realizado el 22 de junio de 2024, la Secretaría de Ambiente y la Policía Nacional confiscaron la mencionada cantidad de carne de tiburón tollo en un establecimiento de Bogotá, actuación que se desarrolló gracias al aviso de una ciudadana. Tal comercialización es considerada ilegal según la Resolución 0380 de 2021, que clasifica a estos tiburones y rayas marinas como recursos hidrobiológicos no comerciables.

La situación ha activado un proceso sancionatorio ambiental bajo la Ley 1333 de 2009, y podría acarrear penas de prisión de 60 a 135 meses, además de significativas multas, según el artículo 328 del Código Penal. Un vocero ambiental destacó la importancia de la colaboración continua con la policía, indicando que los controles incluyen restaurantes, mercados y terminales.

La Secretaría de Ambiente y la Policía Nacional instaron a la ciudadanía a reportar cualquier actividad sospechosa relacionada con el tráfico de fauna silvestre a través de varios canales de comunicación, subrayando la importancia de la vigilancia y cooperación ciudadana para la protección de las especies.

El tiburón tollo, también conocido como cazón (Galeorhinus galeus), es una especie de tiburón que pertenece a la familia Triakidae. Se encuentra en aguas templadas y subtropicales de todos los océanos del mundo, especialmente en el Atlántico norte. Este tiburón puede alcanzar hasta 2 metros de longitud y pesar más de 45 kilogramos.

Su cuerpo es alargado y fusiforme, con un hocico puntiagudo y ojos grandes. La coloración varía entre el gris y el marrón en la parte superior, mientras que la parte inferior es más clara. Se alimenta de peces, cefalópodos y crustáceos. Es una especie de gran valor comercial, tanto para la pesca de la carne como para la obtención de aceite de hígado y aletas.

El tiburón tollo está clasificado como especie en peligro debido a la sobrepesca y la degradación del hábitat. Diversas organizaciones internacionales están promoviendo regulaciones para su conservación.