El recrudecimiento de la guerra en Colombia ha afectado directamente a los niños, niñas y adolescentes del país, teniendo en cuenta que han sido víctimas del reclutamiento forzado perpetrado por diferentes grupos armados, De acuerdo con la Policía Nacional, en lo corrido de 2024 se han documentado 101 casos en todo el territorio nacional.
Los menores de edad están llegando a las filas de las organizaciones ilegales a través de varias modalidades que involucran engaños, ofrecimientos económicos, explotación sexual, vínculos familiares y redes sociales. Los departamentos y municipios que presentan una situación más compleja son Cauca, Nariño, Caquetá, Villavicencio y Tolima.
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En vista de que el conflicto permanece y los menores de edad siguen siendo instrumentalizados por los actores armados, 17 niños, niñas y adolescentes de 20 territorios diferentes se unieron para componer una canción en contra del reclutamiento forzado. La producción musical llamada A la guerra no voy fue presentada el jueves 25 de julio en el evento de la Unidad para las Víctimas ‘Diálogo nacional para la no repetición sobre vinculación de niñas, niños y adolescentes en el marco del conflicto armado’.
Los niños contaron con el apoyo de la Fundación Batuta, que se encargó de la dirección y producción de la melodía; los menores se enfocaron en la composición de la letra: “No quiero violencias, no quiero muertes, a la guerra no voy. Sueño un gran futuro, un mejor presente, a la guerra no voy”, dice una parte de la canción.
“Esta canción es un llamado para que no desaparezcan más niños y para los que lamentablemente están vinculados en el conflicto armado puedan volver a la sociedad y hacer sus sueños realidad. Asimismo, es un mensaje para que los grupos armados no los vinculen al conflicto y para que las entidades y la sociedad los protejan”, indicó la Unidad para las Víctimas en un comunicado.
La composición se logró gracias a diferentes espacios de diálogo en el que participaron los niños y niñas, sus padres, madres y cuidadores, y otras entidades aliadas a 23 territorios del país. Los presentes pudieron contar sus testimonios, que ahora se plasman en la A la guerra no voy.
Asimismo, entre el 23 y 25 de julio, los niños crearon un manifiesto que enlista los reclamos y las necesidades que enfrentan por cuenta de la violencia en Colombia, que no cesa a pesar de que el Gobierno nacional, en cabeza del presidente Gustavo Petro, está llevado a cabo mesas de negociaciones con grupos armados.
Entre las peticiones está el que se les brinde garantías para moverse con seguridad en sus regiones, reconocer que las afectaciones a los pueblos étnicos son diferenciadas, conformar una comisión que en enfoque en desescalar el conflicto e impulsar proyectos relacionados con la cultura.
“Es muy conmovedor que nos encontremos en este evento. Me parece una extraordinaria aventura que la Unidad para las Víctimas convoque a las niñas, niños y adolescentes para oír sus voces. Tienen todo nuestro respaldo y apoyo, vamos a asegurarnos de que este mandato que ustedes han leído ojalá sea una realidad”, afirmó la directora de la Unidad para las Víctimas, Lilia Solano.
En ese sentido, la Unidad para Las Víctimas instó a la institucionalidad a tomar acciones que eviten la continuidad del reclutamiento forzado en el país. “Que se definan líneas de acción y medidas efectivas que garanticen que este hecho no se repita y de esta forma se resguarde la vida y el bienestar emocional, físico y social de niños, niñas y adolescentes en Colombia”, indicó la entidad en el comunicado.