Indígenas embera trataron de tomarse sede de la Procuraduría en Bogotá: tuvieron que evacuar a los funcionarios por una salida lateral

Un grupo de indígenas intenta ingresar a la sede de la Procuraduría General de la Nación, ubicada en la capital del país. Las autoridades hacen presencia en el sitio.

Al parecer, los indígenas pertenecientes a las comunidades Emberá Katío asentadas en Bogotá están usando las vías de hecho para ingresar a las instalaciones. Funcionarios de la entidad intentaron mantener el orden, pero aparentemente los manifestantes los superan en número.

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A través de redes sociales se conocieron algunos videos que dejan ver la situación a las afueras de la sede de la Procuraduría General de la Nación.

Decenas de indígenas Emberá se agruparon en el ingreso del ministerio Público y, al parecer, están negando la entrada y salida de personal de la entidad. Así mismo, en los clips se observa que hay presencia, además de adultos, de decenas de menores de edad.

De acuerdo con información que trascendió en medios de comunicación nacionales, la situación en el interior de la Procuraduría es tensa debido a las alteraciones del orden público a las afueras de la sede.

Por el momento se desconoce cuáles son las demandas de la comunidad indígena que tomó las vías de hecho en el centro de la capital del país.

Las comunidades indígenas que residen en el Parque Nacional de Bogotá comenzarán su retorno a sus territorios el 29 de julio, bajo la coordinación de la Unidad para las Víctimas. El miércoles 18 de julio se iniciaron los preparativos para este proceso, con el objetivo de garantizar condiciones dignas para su regreso.

Lilia Solano, directora de la Unidad para las Víctimas, informó que una comisión integrada por funcionarios de la entidad, representantes de la Alcaldía de Bogotá y líderes de las comunidades indígenas viajó a Risaralda.

Ese encuentro con los gobernadores indígenas locales buscaba armonizar y coordinar el retorno, asegurando las condiciones necesarias para que los desplazados no se vean forzados a regresar a las ciudades por falta de oportunidades en sus territorios.

Solano enfatizó que la clave para un retorno exitoso es proporcionar garantías adecuadas. De lo contrario, advirtió, las comunidades indígenas como los Emberá podrían volver a desplazarse en busca de mejores condiciones de vida en las áreas urbanas.

“Las entidades del Gobierno nacional están preparando todos los compromisos, si hay condiciones dignas el pueblo Emberá que va de retorno, pues se puede quedar”, dijo.

El desplazamiento indígena en Colombia data de los años 70, indicó Solano. Este problema ha sido una consecuencia del conflicto armado y ha forzado a muchas comunidades a abandonar sus tierras. Aunque no es un fenómeno reciente, el Gobierno ha reiterado su compromiso de abordar esta problemática de manera integral.

La Unidad para las Víctimas y la Alcaldía de Bogotá han caracterizado a los desplazados indígenas en el Parque Nacional, arrojando que 1330 desean retornar a sus territorios, 438 buscan reubicación y 415 prefieren integrarse en la capital. “Por primera vez en la historia de Colombia podemos hacer algo realmente digno para el pueblo Emberá”, afirmó Solano.

Este esfuerzo conjunto entre el Gobierno nacional y local ha articulado tres opciones para los desplazados: el retorno con condiciones dignas, la reubicación en otras zonas y la integración en la ciudad de Bogotá, explicó Solano.

“El retorno debe ser con condiciones dignas, porque si no hay condiciones dignas se regresan en un mes; la reubicación, hay unos de la población que quieren ir a otros lugares; y la integración, teniendo en cuenta que Bogotá es la capital del país, aquí llega gente de muchos lugares, entonces las comunidades indígenas, afrocolombianas, campesinas, tienen derecho también a encontrar un sitio y desarrollar un proyecto de vida”, añadió la funcionaria.