Disidencias abandonaron explosivos en la vía Belalcázar-La Plata, en límites entre Cauca y Huila

No cesan los hostigamientos armados de las disidencias de la extinta guerrilla de las Farc que el martes 23 de julio abandonaron cilindros, al parecer, cargados de explosivos en un puente vehicular en límites entre el departamento del Cauca y del Huila.

Según informaron en el periódico regional Diario del Huila, el material bélico no convencional fue abandonado en la infraestructura vial que de Puerto Valencia que une a los municipios de La Plata y de Páez.

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Precisamente en redes sociales se conocieron videos de los dos artefactos explosivos que fueron abandonados en el puente de la vía La Plata-Belalcázar, por lo que las autoridades tuvieron que acudir a la zona para verificarlos, sin que se conociera si fueron desactivados, destacaron en la cuenta de Facebook del medio local La Última.

Al parecer, el intento de atentado habría iniciado desde la mañana, según un comunicado de la alcaldía de Páez (Cauca), donde solicitaron a los conductores no llegar a ese puente por el peligro de que el artefacto fuera detonado.

Entre tanto en la capital del departamento, exactamente en la carrera 12 con calle 9ª, también en la noche del martes, la Fuerza Pública tuvo que acudir al lugar para verificar un paquete sospechoso, destacaron en el Diario del Huila.

En la mañana del mismo martes, pero en la vía que comunica al municipio de Garzón con el corregimiento de San Antonio del Pescado, en el Centro del Huila, las disidencias de las Farc habían abandonado otro de esos cilindros, sin embargo, grupos especializados en antiexplosivos de la Fuerza Pública lo desactivaron, indicaron en la emisora RCN Radio.

Agregaron, que el artefacto explosivo pertenecería a la comisión Rodrigo Cadete del bloque Jorge Suárez Briceño del autodenominado Estado Mayor Central (EMC), cuyo máximo jefe subversivo es alias Iván Mordisco.

“Aquí hay un hecho complejo y lamentable, ya que estos delincuentes querían generar daño a la integridad física de la fuerza pública. Este cilindro tenía unos cables y más cerca del pasacalle, se encontraban unas minas antipersonas de fabricación artesanal, con el propósito de poderlo detonar cuando llegara algún miembro de la fuerza pública”, señaló Elkin Lloreda Gómez, secretario General y de Convivencia de Garzón.

Y es que las disidencias vienen perpetrando hostigamientos armados desde la semana pasada, como reacción a las operaciones militares en su contra que lleva a cabo el Ejército, en especial en el departamento del Cauca.

El más grave ocurrió también en la noche del martes en el corregimiento de El Plateado del municipio de Argelia, en el occidente del Cauca, donde atacaron con un dron con explosivos la cancha sintética de fútbol en la que se realizaba una actividad deportiva.

El atentado en contra de la población civil, según informó el Ejército, dejó un trágico saldo de un niño muerto y seis personas heridas.

La violenta incursión, señaló la misma Fuerza Pública, se dio como una represalia por parte de la estructura Carlos Patiño, porque los habitantes de esa zona del Cauca se negaron a expulsar a los militares de su territorio.

En ese mismo municipio, pero en el corregimiento de Sinaí ocurrieron combates el pasado domingo, donde resultaron cinco soldados heridos y el desplazamiento forzado de los habitantes de la zona rural.