El tercer presidente del Senado de la República durante este mandato, el conservador Efraín Cepeda, ya inició sus labores en el legislativo y, apenas dos días después de su posesión, el congresista marcó su posición frente a las iniciativas del presidente Gustavo Petro y su gabinete.
Según comentó el nuevo jefe de la cámara alta, las polémicas solicitudes del primer mandatario no están alineadas con su postura, por lo que descartó desde ya la posibilidad de que el Congreso se avale la idea de una asamblea nacional constituyente, además del fast track, para acelerar el acuerdo de paz de 2016 y la reforma agraria.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
“No estoy, de ninguna manera, y tengo que decirlo firmemente, en la orilla de una asamblea nacional constituyente. Me parece que emprender esa aventura es nefasto. La Constitución que nos rige tiene apenas 33 años y ha sido reformada por el Congreso 55 veces. No hemos tenido tiempo de aplicarla en su integridad, porque hemos estado ocupados reformándola. No queremos una nueva Constitución. Estoy en la orilla de avanzar en una agenda legislativa, agenda social, que se apoyen los proyectos que convengan al país”, comentó en diálogo con El Tiempo.
El congresista fue contundente en afirmar que durante su administración siempre defenderá al legislativo sobre el presidente, pues cree que tramitar las reformas del Gobierno por la vía constitucional es el paso para tomar la mejor decisión para el país.
“Aceptamos que se requieren reformas, pero que incluyan todas las visiones. Si lo que se quiere es presionar al Congreso para que sea notario, yo estaré siempre del lado del Congreso, defendiendo la institucionalidad. La legitimidad del Congreso está a toda prueba, el Congreso sacó alrededor de 22 millones de votos”, continuó.
Cepeda también hizo referencia al fast track que Petro estaría dispuesto a llevar al Congreso con el propósito de acelerar la implementación del Acuerdo de Paz de 2016, además de adelantar su reforma agraria para garantizar tierras a los desmovilizados de las extintas Farc.
Sin embargo, quien fue también congresista en el mandato de Juan Manuel Santos y apoyó esa vía para conseguir la paz en Colombia con el antiguo grupo guerrillero de las Farc, aseguró que en esta ocasión no es la mejor solución para el país y que insistir en un trámite acelerado solo traerá mayores tropiezos a la implementación de los acuerdos
“Fui presidente del Senado durante el proceso de paz, pero era otro momento, que lo hizo necesario para la implementación. Quiero recordar que hoy un ‘fast track’ es un salto al vacío, porque vamos a tener, primero, que hacer un acto legislativo. Sería un año y quedaría el último año para el fast track. Un ‘fast track’ ahora puede entorpecer el camino y ahora lo que necesitamos es caminar rápido por los resultados”, comentó al diario nacional.
Asimismo, aunque no descartó la posibilidad de que en el Congreso se pueda dar un guiño a las reformas que el Ejecutivo plantea radicar en las próximas semanas, aseguró que las iniciativas del presidente y su gabinete ministerial deberán atravesar por el debate público y ajustarse a las necesidades de los colombianos y las exigencias de expertos y de los mismos congresistas.
“Ahí estaremos para lo que se pueda consensuar. Este Congreso lo que no acepta son imposiciones; mi partido menos, con una trayectoria de 175 años no es notario de nada ni nadie. Esa es la discusión, sabemos que se requieren unas reformas y si las debatimos y las consensuamos podemos acordar. Hace bien el ministro Cristo en no presentar ninguna de ellas, como se acostumbraba el 20 de julio, hasta que no encontremos consensos”, aseguró Efraín Cepeda en diálogo con El Espectador.