Colombia, un destino preferido para celebrar bodas en crecimiento

La celebración de eventos como matrimonios en el país está creciendo exponencialmente. Cada año se suman más parejas extranjeras y locales que quieren movilizarse en el país para encontrar un lugar adecuado para celebrar una boda.

Así lo señala Wink, una compañía con más de cinco años en el mercado de eventos sociales y corporativos, y que se ha propuesto a impulsar iniciativas para promover a Colombia en uno de los destinos más atractivos para bodas de destino. La empresa, liderada por su fundador y director de crecimiento, David Pineda, abrió una oficina en Estados Unidos, para posicionar al país a través de sus servicios en un nuevo mercado.

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En sus palabras, que brindó en una entrevista con Portafolio, Pineda reveló que “definitivamente Colombia se ha convertido en un destino de bodas y debemos aprovechar esto para seguir moviendo la economía”.

De hecho, la situación ha resultado tan importante, que las cifras del turismo y su influencia en la economía nacional han tenido un impacto positivamente por estas circunstancias, debido a que “ya que llegan turistas que no solo aprovechan el evento, sino que se hospedan en hoteles, visitan restaurantes o realizan recorridos por toda la ciudad”, como expresó Pineda.

Ahora bien, según Carmen Caballero, actual presidenta de Procolombia, Colombia en los últimos dos años se ha consolidado como un destino preferido, en especial, para las bodas extranjeras. Atrae a miles de parejas de diferentes países y genera oportunidades económicas significativas para sus ciudades.

Este auge no solo transforma la industria turística, sino que también impulsa el desarrollo local de ciudades como Cartagena, Medellín, Bogotá, Santa Marta, Cali y Barranquilla. Según datos recopilados por Procolombia en una encuesta, se evidencia un interés creciente en realizar matrimonios en estas ubicaciones.

De hecho, entidades internacionales como la International Association of Destination Wedding Professionals confirma la autenticidad de estas ciudades colombianas por la oferta cultural y natural de gran magnitud que se ofrece al mercado internacional.

Estudios indican que más del 40% de estas bodas generan ingresos que oscilan entre los 20.000 y los 50.000 dólares. La temporada alta para bodas destino en Colombia abarca los meses de diciembre, noviembre, marzo y agosto, períodos en los cuales la estadía promedio de los invitados se extiende de cuatro a seis días. Este hecho contribuye significativamente a los ingresos del turismo local.

Una encuesta realizada por ProColombia reveló que Estados Unidos es el país predominante de origen para las parejas que eligen Colombia como su destino nupcial, seguido por España, Canadá y México.

Los wedding planners, u organizadores de bodas, suelen contar con servicios de catering, repostería, coctelería, servicios de fotografía y video, sonido, decoración y provisión de locaciones.

El 2 de julio de 2024, se conoció que Cartagena de Indias fue galardonada nuevamente en los World Travel Awards como el mejor destino de luna de miel de Sudamérica. Esta posición continúa posicionando a la ciudad como un lugar preferido para los recién casados. Es la sexta vez que recibe este honor, habiéndolo obtenido previamente en 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022.

El reconocimiento destaca la oferta turística de Cartagena, que incluye playas, hoteles boutique, opciones gastronómicas diversas, y una vibrante vida cultural. La ciudad superó a otros destinos importantes como Buenos Aires, Fernando de Noronha, Islas Galápagos, Paraty y Río de Janeiro.

El turismo de luna de miel es de gran relevancia para Cartagena, atrayendo una significativa proporción de bodas internacionales. Según Procolombia, el 40% de las bodas en el país se realizan en esta ciudad, con eventos que generan una considerable dinamización económica.

Liliana Rodríguez Hurtado, presidente de la Corporación Turismo Cartagena de Indias, expresó satisfacción por el galardón, y resaltó la consolidación de Cartagena como un destino de romance y el importante impacto económico que este segmento turístico tiene en la ciudad.