24 militares estarían involucrados en la muerte de once civiles en el Putumayo: la Fiscalía los acusó de homicidio

Militares del Ejército Nacional fueron imputados por estar vinculados al asesinato de once civiles en el Putumayo, informaron desde la Fiscalía General de la Nación.

Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos presentó ante un juez de control de garantías en Puerto Leguízamo, Putumayo, a 24 integrantes del Ejército Nacional por su presunta implicación en la muerte de varias personas el 28 de marzo de 2022 en Alto Remanso, una comunidad rural de Puerto Leguízamo.

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Los 24 militares fueron imputados por los delitos de homicidio en personas protegida y homicidio en persona protegida en grado de tentativa. Durante la audiencia, los señalados no aceptaron los cargos, es decir, se declararon inocentes de lo que se les acusa.

Entre los señalados por el ataque contra la población civil que dejó un número importante de muertes están el teniente coronel Néstor Andrés Cadena Bautista, el capitán Jorge Erney Marroquín Cadena, el teniente Julián Ernesto Ávila Martínez, los sargentos segundo Cristian Gabriel Pérez Galindo y Maicol Andrés Quiñones Mendoza, los cabos primero Wilber Leonardo Rodríguez y Wilson Andrés Santamaría Ramos.

Así mismo, 17 soldados identificados como Dairo José Arboleda Toro, Edisson Javier Estaban Aguiar, José Efraín Letamo Yalanda, Santander Licona Ramos, Wilmer Mosquera Poscué, Luis Ángel Núñez Peña, Danilo Quintero Urrea, José Alexander Villa Ciro, Financio Noé Anama Escobar, Maycol Mauricio Abril Hernández, Yeisson David Becerra Gutiérrez, Robinson Beleño Herrera, Franky Fabián Hoyos Pérez, John Fredy Hoyos Quiñones, Carlos Alberto Perdomo Romero, Jeisson Rico Soto y Jeisson Rivera Holguín.

De acuerdo con las investigaciones adelantadas por la Fiscalía General de la Nación, el 29 de marzo de 2022 Néstor Andrés Cadena Bautista, teniente coronel y comandante del Batallón contra el Narcotráfico N°3, habría dado la orden de desplegar una unidad táctica en las cercanías de Alta Remanso, en un esfuerzo por ubicar a alias Bruno, señalado jefe de una estructura disidente de las Farc conocida como Comandos Defensores de Frontera.

Según la Fiscalía, tras varias horas de vigilancia y con conocimiento de que Bruno no se encontraba en la zona, las unidades involucradas procedieron a atacar el caserío utilizando vestimenta diferente a la comúnmente usada por el Ejército Nacional.

Durante el ataque, que tuvo lugar durante un bazar comunitario, los uniformados realizaron unos 1.600 disparos contra 13 casas, una caseta comunitaria, el polideportivo y el embarcadero, según los análisis del Centro Estratégico de Valoración Probatoria (Cevap) de la Fiscalía. Además, lanzaron granadas de 40 milímetros y de fragmentación, lo que resultó en la muerte de un gobernador indígena, el presidente de la Junta de Acción Comunal, un menor de edad y otras ocho personas más en estado de indefensión. Asimismo, cinco civiles resultaron heridos, incluyendo una adolescente embarazada que dormía en su vivienda.

El teniente coronel Cadena Bautista habría dirigido el operativo desde el complejo militar Santana en Puerto Asís, Putumayo, mientras que las primeras declaraciones de los militares indicaban que se trataba de un combate contra un grupo armado organizado residual. Sin embargo, la Fiscalía asegura que los disparos se realizaron sin que existiera tal confrontación.

La Fiscalía General de la Nación asevera que el operativo en el Alto Remanso fue una intervención desproporcionada y que las víctimas, en su mayoría campesinos y miembros de comunidades indígenas, fueron atacadas mientras se encontraban en sus hogares y en un evento civil.

“En ese sentido, la Fiscalía imputó a los 24 integrantes del Ejército Nacional los delitos de homicidio en persona protegida y homicidio en persona protegida tentado. Los cargos no fueron aceptados”, dice un comunicado emitido por la Fiscalía General de la Nación.

Hasta el momento, la defensa de los militares ha negado los cargos y sostiene que la operación se realizó bajo los protocolos militares pertinentes.