Menos colombianos fueron detenidos intentando ingresar de manera ilegal a Estados Unidos: esto dice el informe de la agencia de fronteras

Durante el mes de junio, se observó una marcada disminución en la migración de colombianos hacia Estados Unidos a través de la frontera sur, según informó la Agencia para el Control de Aduanas y Protección Fronteriza (CPB, por su siglas en inglés).

En este periodo, se registraron aproximadamente 8.400 arrestos por intento de ingreso ilegal al país, lo que representa una reducción del 20% en comparación con mayo, cuando se contabilizaron 10.800 detenciones.

El mes pasado marcó el segundo menor número de arrestos de migrantes colombianos en lo que va del año fiscal 2024, que comenzó en octubre de 2023. En diciembre, se alcanzó el pico más alto con 18.692 arrestos en un solo mes. En total, aproximadamente 110.000 colombianos han sido arrestados durante el presente período fiscal, indicando una posible tendencia a la baja en comparación con años anteriores.

Las estadísticas recientes de la CPB también muestran una disminución general en la migración ilegal hacia Estados Unidos durante junio, con 130.000 encuentros documentados frente a los 170.000 de mayo, lo que representa una caída del 25%. Esta tendencia descendente es aún más notable entre los arrestos realizados en puntos fronterizos no oficiales, contabilizando alrededor de 83.536 personas.

El Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos (DHS) atribuye estos resultados a las nuevas políticas implementadas por la administración Biden desde mayo. Estas políticas incluyen la suspensión de solicitudes de asilo mientras los encuentros diarios no bajen de 1.500 personas, así como criterios más estrictos para otorgar asilo. Además, el incremento de controles por parte de México en la frontera ha contribuido a la reducción de la migración ilegal, asumiendo al país centroamericano como uno de los principales territorios de donde llegan los migrantes para llegar a Estados Unidos.

Según la CPB, los arrestos diarios en julio han promediado alrededor de 1.900 personas, lo que podría resultar en menos de 60.000 arrestos al finalizar el mes. Este nivel no se había registrado desde la última etapa de la administración de Donald Trump.

Las autoridades colombianas desmantelaron una red de tráfico de migrantes en una operación realizada el 18 de julio, según informó la Fiscalía. La organización, identificada como ‘los Andariegos’, supuestamente trasladaba de manera clandestina a 1.082 migrantes de Colombia y Ecuador hacia Centroamérica, atravesando la selva del Darién y las islas caribeñas de San Andrés.

De acuerdo con la Fiscalía, la banda gestionaba transportes, hospedajes y la salida del país para facilitar el camino de los migrantes hacia Estados Unidos. Entre las pruebas recabadas, se identificaron dos rutas principales ofrecidas por la organización.

En la operación, fueron detenidas ocho personas, entre ellas el presunto líder, identificado como Cristian Camilo Rivera Pérez, quien aparentemente coordinaba los alojamientos y traslados de los migrantes. Otros detenidos incluyen a individuos que gestionaban hospedajes en Medellín y Cartago, dos empleados de una empresa de transportes intermunicipales y un taxista.

Los detenidos enfrentan cargos de concierto para delinquir agravado y tráfico de migrantes, aunque ninguno aceptó los cargos imputados. Uno de los empleados de la empresa de transportes y el taxista siguen bajo investigación, mientras que los otros seis ya están en prisión preventiva.

Mientras la migración a los Estados Unidos se regula, la Corte Constitucional de Colombia ha instruido al Ministerio de Relaciones Exteriores y a Migración Colombia para que establezcan un plan que asegure la estadía y los derechos de los migrantes de origen venezolano en el país. Esta decisión se produce tras la revisión de 39 demandas presentadas por ciudadanos venezolanos que denunciaban la vulneración de sus derechos por parte de estas instituciones.

Los ciudadanos habían solicitado formalmente al ministerio que se les reconociera en calidad de refugiados, lo que les permitiría moverse libremente dentro del territorio colombiano. Aunque la Unidad Administrativa Especial de Migración Colombia había expedido salvoconductos para regularizar su estancia, los migrantes denunciaron que el ministerio no respetó sus derechos al debido proceso y al trabajo.