El caso de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) ha calado hondo en el Gobierno nacional, pues con el paso de los meses, las declaraciones de Olmedo López y Sneyder Pinilla han salpicado a piezas claves del Gobierno de Gustavo Petro.
Pero, aunque se han revelado hasta conversaciones que dejarían en evidencia todo un presunto entramado de corrupción entre el Ejecutivo y la Ungrd, hasta ahora el presidente Gustavo Petro ha asegurado que él no tenía conocimiento ni responsabilidad en las acciones de los funcionarios.
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Al respecto, el concejal de Bogotá Daniel Briceño comentó que, a pesar del intento de Petro de tomar distancia del escándalo de corrupción, el primer mandatario sí tiene responsabilidad política por lo que ha sucedido con el dinero de la entidad.
“Yo creo que el presidente Gustavo Petro tiene una responsabilidad política gigantesca, y por lo tanto, su proyecto político está manchado de la corrupción de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo”, aseguró Daniel Briceño a Semana TV.
En ese sentido, Briceño explicó que no puede creer que el presidente no tuviera conocimiento sobre lo que estaba sucediendo y los dineros que se negociaron bajo la fachada de supuestas emergencias que, como quedó revelado en las conversaciones de Sneyder Pinilla con los asesores del ministro de Hacienda, fueron aprobadas a medida para girar los dineros del Estado.
“Yo no creo en el cuento del presidente de que todo es a sus espaldas y que él no tenía ni idea, ni absolutamente la forma de verificar lo que estaba pasando”, agregó el concejal.
En cuanto a las emergencias que se utilizaron para desviar miles de millones, Daniel Briceño aseguró que fueron ideadas por el propio Gustavo Petro, pues él fue el que se refirió a los problemas de agua en La Guajira o la emergencia invernal.
“Solo en 2023, en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo se ordenaron más de 596.000 millones de pesos en contratos, más de medio billón de pesos, se hizo una adición presupuestal que fue pública dentro del Congreso de la República por más de 208.000 millones de pesos, se trasladaron recursos millonarios hacia la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y todo se ejecutó a través de unas emergencias que el propio presidente Gustavo Petro declaró. La emergencia de la Guajira se la inventó el propio presidente Gustavo Petro, no se la inventó Olmedo, no se la inventó el ministro, no se la inventó el señor Carlos Ramón”.
Ese tipo de comportamientos, según Daniel Briceño, demostrarían la posible responsabilidad de Gustavo Petro en el escándalo de corrupción, por lo que aseguró que no se debería permitir que se lave las manos, incluso, cuando no retiró de sus cargos a los funcionarios señalados como Olmedo López o al ministro de Hacienda Bonilla.
“Yo sí creo que el presidente tiene una responsabilidad política y debe responder políticamente con su proyecto y le debe dar la cara a los ciudadanos, yo no creo que nosotros podamos permitir que el presidente se lave las manos cuando él fue el que nombró a los funcionarios, cuando él fue el que estuvo pendiente de todo y cuando él fue el que mantuvo a Olmedo López cuando salió el escándalo y sigue manteniendo al ministro Bonilla y mantuvo hasta el último momento al ministro Velasco”, explicó Briceño.
Por último, el senador se refirió a las presuntas intervenciones de Gustavo Petro en la justicia, pues recordó el cambio de fiscal en el caso de su hijo Nicolás Petro Burgos, por lo que acotó que el primer mandatario no debería poder lavarse las manos de lo sucedido con el dinero dispuesto para atender emergencias en el país.
“El presidente sí ha intervenido judicialmente en varios de los casos de corrupción, por ejemplo, el cambio de fiscal que se le hace al hijo del presidente Gustavo Petro se hace porque el presidente abusando y rompiendo la división de poderes es quien sale a nombre presidencial, dice la denuncia, y lleva al fiscal Mario Burgos ante el concejo de disciplina judicial, entonces el presidente sí ha intervenido, ha tratado de intervenir en los procesos que lo afectan a él y ahora no puede venir a lavarse las manos porque él sí tiene responsabilidad política”, concluyó Briceño.