La cocina de Masterchef Celebrity vio el regreso de los famosos para una nueva prueba con la caja misteriosa como protagonista. Con el pin de salvación en poder de Carolina Cuervo e Ilenia Antonini, los delantales negros de Víctor Mallarino, Ricardo Henao y Dominica Duque (que se ausentó del programa por lastimarse sus dedos), la prueba exigía a los participantes tener los sentidos más afinados que nunca para una competencia por parejas.
Paola Rey y Vicky Berrio, Nina Caicedo y Jacko, Marcela Gallego y Franko Bonilla, Alejandro Estrada y Roberto Cano, Martina La Peligrosa y María Fernanda Yepes, Juan Pablo Llano y Catherine Ibargüen. Cony Camelo se quedó sin pareja, por lo que la presentadora Claudia Bahamón abrió un sobre negro para decidir su suerte en la prueba. El mismo, le ordenó subir al balcón junto a Carolina e Ilenia, por lo que no cocinó en el episodio.
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El reto consistía en cocinar tapas o canapés, usando condimentos suministrados por el patrocinador. Tendrían la despensa abierta y 60 minutos para hacer cuatro preparaciones, de tres porciones cada una. Las cajas las tendrían que abrir para recibir instrucciones que afectarían el resultado de la preparación. Además, las parejas tendrían que elegir una persona que probara la preparación a ciegas, y otra que cocinara y viera, pero sin opción de probar. Antes de iniciar, cada pareja abrió la primera caja con sabores que incluían agridulce, picante, dulce o salado. En esta oportunidad no se darían delantales negros, pero sí habría pines de inmunidad.
El desespero de participar por parte de los que eligieron no ver (Vicky, Nina, Franko, Alejandro, María Fernanda y Juan Pablo) hizo que por momentos entorpecieran el trabajo de los que cocinaban. Además, debido a que cada 10 minutos iban abriendo las cajas para elegir las preparaciones, obligaba a mantener la concentración con cada canapé.
Una vez las cuatro cajas de todos los participantes fueron abiertas, el jurado fue pasando por las mesas para dar sus indicaciones. La mesa de Marcela Gallego y Franko Bonilla era la que evidenciaba más problemas para sacar adelante los canapés.
María Fernanda y Martina presentaron sus canapés de pollo agridulce, ceviche de mango con langostino, atún en salsa y wontons con dulce de leche, mermelada de mora y arequipe. El jurado valoró bien todos los canapés, excepto los wontons que consideraron que abusaron del dulce.
Marcela Gallego y Franko (que todavía vendado recibió un beso de Nicolás de Zubiria, pensando que era Claudia Bahamón) presentaron su camarón para el picante, cebollín y ajonjolí para el salado, jamón serrano para el agridulce, y no alcanzaron a preparar el canapé dulce, lo que los dejo en clara desventaja.
Roberto y Alejandro pasaron para presentar sus canapés, siendo elogiados tanto por el emplatado como por la manera de gestionar los sabores. Catherine y Juan Pablo fueron los siguientes, mostrando canastas de plátano para el agridulce, papas con vinagre, queso crema y salmón ahumado para el salado, langostinos encocados para el picante, y uchuvas para el dulce. El jurado cuestionó las texturas de algunas preparaciones, pero aprobó las preparaciones.
El siguiente turno fue para Nina y Jacko, que presentaron canapés de bolitas de queso para el picante, pepino para el salado, papa con vinagreta de perejil para el agridulce y merenguitos ahumados para el dulce. Salvo por el dulce que el jurado juzgó que “se lo tiraron” sumando mermelada, fue aprobado por el jurado. Por último, Paola y Vicky presentaron sus canapés: costillas con BBQ, plátano y papa para el salado, arroz con jamón con naranja y salsa de soya para el picante, pollo para el agridulce, y dulce de mora con queso manchego para el dulce. El jurado recibió bien las preparaciones, salvo por detalles técnicos, principalmente con el agridulce.
Luego de la deliberación, los pines de inmunidad se los llevaron Alejandro Estrada y Roberto Cano, completando cuatro salvados esta semana. La próxima prueba, adelantó Jorge Rausch, tendría la carne como protagonista para una nueva prueba de campo.